Lesbia Brandon - Algernon Charles Swinburne (Erótica)

Enamórate, emociónate y siente.

Moderadores: Ceres, Pikolina

Responder
Avatar de Usuario
woki
Foroadicto
Mensajes: 4242
Registrado: 29 Jun 2015 00:54

Lesbia Brandon - Algernon Charles Swinburne (Erótica)

Mensaje por woki »

Lesbia Brandon

Imagen
Algernon Charles Swinburne (1837-1909) constituye el más evidente eslabón literario entre el mundo de Byron, Shelley, Southey, y en general el romanticismo inglés y los últimos coletazos del ya decadente victorianismo, representados en la figura de Wilde. Amigo personal del último representante del círculo byroniano, W. Savage Landor, a quien conocería, ya viejo, en su retiro de Fiésole; compañero de Universidad, en Oxford, de los máximos representantes del prerrafaelismo –Rossetti, Morris, Burne-Jones-, a quienes acompañaría en sus primeros pasos; amigo y admirador de Hugo y Manzini, cuyos intereses políticos compartiría, anticipándose con ello al tardío interés político de los literatos ingleses; y precursor, gracias a su peculiar interés por Sade, de muchos de los temas de Wilde y Carpenter, Swinburne constituye una especie de resumen simbólico de las diversas corrientes literarias, culturales y políticas que durante la segunda mitad del siglo XIX surgen en Inglaterra o se expanden en dicho país procedentes del Continente.

Conocido y admirado fundamentalmente por sus baladas de aire tradicional (Poems & Ballads, 1866 y 1878) y por sus grandes poemas dramáticos (Atlanta in Calydon, 1865, y Erechteus, 1876, sobre todo), así como por su gran trilogía dramático-histórica (Chastelard, 1865, Bothwell, 1874, y Mary Stuart, 1881), su obra en prosa, perteneciente a su época más productiva -entre 1860 y 1865- resulta casi por completo desconocida. De hecho, de dicha obra en prosa, sólo una novela epistolar -hecha sobre el modelo de Las relaciones peligrosas, de Laclos-, Love's Cross Currents, llegó a quedar terminada. Las otras dos, Tebaldeo Tebaldei -falsa crónica de tiempos de Lucrecia Borgia, muy influida por el prerrafaelismo- y la que aquí se presenta en traducción, Lesbia Brandon, quedaron inconclusas y arrinconadas.

Lesbia Brandon tiene, sin embargo, el interés -a pesar de su inconclusión y del montaje póstumo e hipotético realizado por manos de la crítica- de constituir el primer y único caso de "educación sentimental" a la inglesa, escrita por manos no femeninas. Trozos de la vida, las aficiones, las pasiones y los intereses de Swinburne aparecen traspuestos en ella, perfectamente engarzados con el ambiente de su época. Y un aura masoquista -continuamente enlazada con la tradición flagelística inglesa y las particulares aficiones de Swinburne en este sentido- aparece recorriéndola toda. Una especie, en definitiva, de cuadro de época, que expresa más de lo que en la época era permisible, y menos de lo que hoy, tal vez, desearíamos.
Autor: Algernon Charles Swinburne
Título original: Lesbia Brandon
Año de publicación: 1952*

Editorial: Laertes
Año de la edición: 1982
ISBN: 9788485346479
Páginas: 262
Traducción: Alberto Cardín


*Escrita entre 1859-1868 e inacabada debido a la imposibilidad de ser editada por su contenido, se publica por primera vez en 1952 de forma póstuma

Ver en Amazon y Casa del Libro
Avatar de Usuario
woki
Foroadicto
Mensajes: 4242
Registrado: 29 Jun 2015 00:54

Re: Lesbia Brandon - Algernon Charles Swinburne (Erótica)

Mensaje por woki »

El Espejo Gótico escribió:[...] presenta casi todas las obsesiones de Swinburne, entre ellas: una especie de tensión sensual entre hermanos disimulada bajo la máscara del amor fraternal [...] espiritual más que sensorial. El verdadero disparador opera a través de una segunda mujer, llamada Lesbia Brandon, en realidad una muchacha joven, poetisa y pagana, que cautiva a Herbert (el protagonista), y lo lleva hacia un nuevo nivel de castidad, donde la tristeza encuentra un cauce idílico para manifestarse. Lo interesante de Lesbia Brandon es justamente esta idea de que la castidad no prescinde del erotismo. Todo lo contrario, el ascetismo amoroso muchas veces amplifica la tensión sexual, «desviándola» de los cauces permitidos por la sociedad [...]
Responder