Mi familia y otros animales - Gerald Durrell (Corfú 1)
Moderadores: magali, Ashling, caramela
¿Y que me decís de las "cabras triscando y ramoneando"? Son una gozada las expresiones que utiliza.
Lo de los cipreses, qué curioso. Lo que dice Yani, el pastor, sobre la creencia de que si te quedas dormido bajo un ciprés, éste le te roba la inteligencia, los "sesos"... ¡Los cipreses son la versión arbórea de los zombies! Y encima, el árbol por excelencia de los cementerios...
Lo chungo que es cuando te hace viajar sistemáticamente y sin transición de la hilaridad al congelamiento facial... y vuelta a empezar. Con Aquiles o con Quasimodo, p.e. Bueno, peor lo de Aquiles .
He dejado a Mme. Cíclope poniendo sus huevos.
Lo de los cipreses, qué curioso. Lo que dice Yani, el pastor, sobre la creencia de que si te quedas dormido bajo un ciprés, éste le te roba la inteligencia, los "sesos"... ¡Los cipreses son la versión arbórea de los zombies! Y encima, el árbol por excelencia de los cementerios...
... con la cola manchada de verde durante días...Edmundo escribió:la imagen de la paloma Quasimodo manchando el mapa
Lo chungo que es cuando te hace viajar sistemáticamente y sin transición de la hilaridad al congelamiento facial... y vuelta a empezar. Con Aquiles o con Quasimodo, p.e. Bueno, peor lo de Aquiles .
He dejado a Mme. Cíclope poniendo sus huevos.
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No había estado para comentarlo, pero me encantó el libro.
Me gustaron los personajes, las descripciones, la maravillosa isla... pero sobre todo me gustaron los animalitos que pueblan todo el libro. Me encanta el tratamiento que hace de ellos y como cuenta sus trastadas como si de personas se tratase
Delicioso.
PD: Cuando queráis, leemos los dos que nos faltan.
Me gustaron los personajes, las descripciones, la maravillosa isla... pero sobre todo me gustaron los animalitos que pueblan todo el libro. Me encanta el tratamiento que hace de ellos y como cuenta sus trastadas como si de personas se tratase
Delicioso.
PD: Cuando queráis, leemos los dos que nos faltan.
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Pues no lo leas, Ava... bueno, léelo si quieres lo digo porque me he llevado un chasco, recordaba con mucho cariño el libro y tenía presente las impresiones que me causó, y al leerlo ahora se me ha borrado el recuerdo. Una cosa extraña, la lectura actual ha borrado el recuerdo De todas formas el libro me ha gustado muchísimo, cuánto condensa en una sola página, qué de historias... aunque me da la impresión que de pequeña no juzgas tanto ¿no os ha pasado? ahora que si este es un estirado, el otro un irresponsable y de pequeña me eché unas buenas risas con todo
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Te haré caso Azucena, ya que es una de las cosas que más temo cuando me releo un libro, me ha pasado con algunos y desearía que se hubiera quedado el recuerdo de mi infancia en mi memoria. Gracias por tu comentario.
Ah! y en cuanto a lo de juzgar de pequeños somos mucho menos críticos, yo también me reía de todo y punto; de mayores somos más maliciosos
Ah! y en cuanto a lo de juzgar de pequeños somos mucho menos críticos, yo también me reía de todo y punto; de mayores somos más maliciosos
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“Nubes de luciérnagas salieron al mar revoloteando sobre las olas y en ese preciso instante aparecieron los delfines nadando en fila india por la bahía, cimbreándose rítmicamente, con los lomos como pintados de fósforo. En el centro de la cala se detuvieron a nadar en círculo, girando y sumergiéndose, saltando a veces en el aire para caer en medio de un estallido de luz. El cuadro de conjunto con los insectos arriba y los delfines iluminados abajo era extraordinario. Bajo la superficie se distinguía, incluso, el sendero de luz que dejaban los delfines al bucear zigzagueando por el fondo arenoso, y cuando saltaban en el aire despidiendo gotas de agua esmeralda, no sabíamos ya si lo que veíamos eran luciérnagas o fosforescencia. Un hora duró este festival, pasada la cual las luciérnagas volvieron a tierra y se alejaron bordeando la costa. Entonces los delfines se alinearon y pusieron rumbo al mar abierto, dejando tras de sí un sendero llameante que luego de arder un momento se fue apagando lentamente, como una rama incandescente que atravesara la bahía.”
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