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pikoo escribió:Menudo drama con los padres y las tradiciones, qué cultura más opresora.
Desde mi punto de vista, está muy bien relatada por la autora. No sólo por los sentimientos de agobio que generan en algunos personajes, sino por el análisis en sí que se va logrando al cabo del paso de la narración,
Por lo tanto, en este sentido, la novela está muy lograda,
Pasado: El coraje de ser de Mónica Cavallé.
Presente: Los perdedores de la Historia de España de Fernando García de Cortázar.
Terminado, y la verdad es que si me ha gustado. Es una lectura muy diferente de las que estoy acostumbrada, no solo por la temática, si no por la forma en que esta escrita.
En parte me sorprende, por una parte, que ni la madre ni el padre den su brazo a torcer y prefieran perder a su hijo a aceptar que ama a una persona que proviene de otro país. ¡Es tan anticuado!
Y por otro lado me sorprende que permanezca en China después de haber sido repudiados. Por parte de él podría entenderlo, al final y al cabo es su país. ¿Pero por la de ella? Un país donde le han tratado mal, le han despreciado, esta sola... ¿como puede siquiera querer que su hijo tenga la nacionalidad de un país así? Incomprensible.
Leyendo:
Juramentada - Brandon Sanderson
La biblioteca de París - Janet Skeslien Charles
A mí no me ha gustado tanto como a la mayoría, creo que más por la forma que por el fondo. Digo esto porque el tema del libro es muy interesante pero la lectura no me ha llegado a atrapar más que en algunos capítulos, sobretodo de la primera parte. Veo que todos nos hemos fijado en las mismas cosas relativas a lo del choque de culturas (y no solo culturas, sino también entre una nueva generación china que ha viajado y conocido otros países y otra antigua que se cree el culmen del refinamiento y la cultura) que no voy repetir. Para mí lo mejor es el cambio de la protagonista que pasa de estar totalmente desconcertada porque la actitud de su marido contradice todo lo que le había dicho su madre a "occidentalizarse" por amor a él.
Tiene momentos divertidos como la comparación de las casas (lo de las ventanas), lo de los niños o la manera de saludarse.
Llevo un tiempo bastante desconectada del foro y de la lectura en general, pero aquí sigo... Voy por el capítulo XV, y de momento me está gustando. Me parece muy interesante
todo el proceso de cambio que va viviendo la protagonista, cómo poco a poco va viendo que hay más mundo que las tradiciones que siempre le han enseñado, y cómo lo va aceptando, aunque le cuesta mucho.
Además, me parece que plantea un debate bastante complejo:
ella realmente no comienza a cambiar por su propia voluntad ni porque así lo desee, sino porque es lo que su marido quiere. Al final, su motivación no deja de ser la misma que la que su cultura determina que debe ser: complacer a su marido. En ese sentido, el debate se me presenta si me pongo en la perspectiva de él: lo que quiere es que ella se sienta libre de hacer lo que desea, pero realmente consigue acercarla un poco a esa libertad a través de una imposición. Entiendo que en un primer momento no hay otra forma de que salga de ahí, pero no puedo dejar de ver la contradicción. Me recuerda a una frase de Mundodisco que siempre me ha gustado: "No se puede ir por la vida construyendo un mundo mejor para la gente. Sólo la gente puede construir un mundo mejor para la gente. De lo contrario, no es más que una jaula". Lo curioso es que aquí me parece que el marido sí debe de hacer lo que está haciendo. Todo un dilema, vaya.
Aunque es una novela breve y con redacción bastante sencilla, tiene mucho fondo. Me gusta cómo plantea el choque de la sociedad oriental con la occidental, tanto en el tema de la mujer como de la organización de la familia, por llamarlo de algún modo. Y me parece increíble cómo la educación puede llegar a hacer que dos personas tengan formas de ver la vida tan opuestas que sean incapaces de comprender la otra.
pikoo escribió:
Y por otro lado me sorprende que permanezca en China después de haber sido repudiados. Por parte de él podría entenderlo, al final y al cabo es su país. ¿Pero por la de ella? Un país donde le han tratado mal, le han despreciado, esta sola... ¿como puede siquiera querer que su hijo tenga la nacionalidad de un país así? Incomprensible.
A mí también me ha llamado la atención esto que comentas. Es más, ya desde el principio me parece curiosa la actitud de ella:
cuando van a China, yo me imaginaba que iban sólo un tiempo, y que pensaban instalarse en EEUU. Me sorprendió bastante lo contrario, y más aún viendo el rechazo que sufre ella, como dices. Finalmente, lo que me dejó totalmente asombrada fue que quisiese educar a su hijo en esa sociedad. La única explicación que se me ocurre es que ahí esté jugando también un papel importante el machismo, aunque más sutilmente.
Me quiero detener especialmente en el comentario que deja Jonayla en un spoiler de un comentario que se encuentra dos más arriba que éste,
Realmente, no me había parado a pensar en este particular, así que me ha resultado muy sugerente, porque
en definitiva, no es ella la que va descubriendo, sino que responde a una demanda del marido para que vaya tomando consciencia, si bien, no está impuesta de una manera violenta y dictatorial -al menos, es mi impresión-. El resultado es evidente que es muy positivo, pero el camino también es importante. Lo que resulta diáfano es que la crítica contra el machismo imperante en esos momentos en la sociedad china es palpable desde todos los puntos de vista que uno mire la obra,
Gracias por aportar esa visión, Jonayla
Pasado: El coraje de ser de Mónica Cavallé.
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Yo también lo he terminado y coincido con los comentarios de caramela y Aben. Me ha gustado cómo va contando la historia en forma de diálogo con una interlocutora que no aparece como personaje de la historia, pero que en realidad es el lector del libro. Y por supuesto también me ha gustado la historia que nos cuenta: la evolución de una mujer china educada de forma tradicional al verse expuesta a la educación y costumbres occidentales. La historia de Kwei-lan (la protagonista) y su hermano en el fondo son las dos caras de la misma moneda: choque Oriente-Occidente, aunque cambia la virulencia del choque.
Y sobre lo que comentáis sobre como empieza el cambio de Kwei-lan
es cierto que ella comienza a cambiar para agradar a su marido, que es lo que se espera de una mujer china, pero él en ningún momento le impone su voluntad, sino que la considera su igual, tal y como le dice el día de su boda. Lo más que hace es pedirle con delicadeza, al cabo de un tiempo, que se quite las vendas de sus pies. Y a partir de aquí, poco a poco surge todo.
Tal y como dije en un comentario anterior, es un libro que deja huella porque hace pensar y que sigue siendo actual a pesar de que fue escrito hace casi un siglo.
"He buscado el descanso y sólo lo he encontrado en un rincón leyendo un libro" (Tomás de Kempis)
Yo creo que para entender la actitud de la americana habría que saber un poco sobre su pasado.
Si era una de esas mujeres liberadas de los locos años 20 o, si por el contrario, había sido educada en una familia conservadora. En el primer caso sí que sería raro su comportamiento, aunque ya sabéis que se suele decir que el amor todo lo puede. En el segundo caso no me llamaría tanto la atención, ya que occidente, en esa época a las mujeres también se las educaba casi exclusivamente para ser una buena esposa al servicio de su marido.
Emilio6 escribió:Yo creo que para entender la actitud de la americana habría que saber un poco sobre su pasado.
Si era una de esas mujeres liberadas de los locos años 20 o, si por el contrario, había sido educada en una familia conservadora. En el primer caso sí que sería raro su comportamiento, aunque ya sabéis que se suele decir que el amor todo lo puede. En el segundo caso no me llamaría tanto la atención, ya que occidente, en esa época a las mujeres también se las educaba casi exclusivamente para ser una buena esposa al servicio de su marido.
Yo creo que la decisión de Mary es la adecuada para lo que Pearl S. Buck quiere transmitirnos en este libro. Mary y Kwei Lan son las dos mujeres que ejemplifican la apertura de China a Occidente y en general lo positivo del mestizaje de culturas. Si Mary hubiera presionado para irse a EE.UU. la historia no hubiera tenido sentido, porque habría replicado la misma actitud que habían tenido sus suegros chinos con ella: despreciar lo que no pertenecía a su mundo y considerar su propia cultura como superior. Lo que la autora nos quiere transmitir es que todos ganamos cuando nos abrimos a otra cultura diferente, pero no para copiar sin más lo que la otra cultura tiene y despreciar la nuestra, sino para crear algo nuevo y más rico en matices. Sobre esto, Pearl S. Buck , que no olvidemos que era americana e hija de misioneros, nos da la clave cuando el marido de Kwei Lan le dice a ésta por qué quiere que visite a su antiguo profesor norteamericano justo antes de que ellos tengan a su hijo.
Mañana -dijo- te llevaré a una casa donde podrás ver cómo se vive a la occidental. Es el domicilio de mi antiguo profesor norteamericano. Deseo que hagas esa visita, no para que imites simiescamente sus costumbres, sino porque deseo ampliar el horizonte de tus ideas.
"He buscado el descanso y sólo lo he encontrado en un rincón leyendo un libro" (Tomás de Kempis)
Mariela escribió: Sobre esto, Pearl S. Buck , que no olvidemos que era americana e hija de misioneros, nos da la clave cuando el marido de Kwei Lan le dice a ésta por qué quiere que visite a su antiguo profesor norteamericano justo antes de que ellos tengan a su hijo.
Y, además, de misioneros presbiterianos con todo lo que esto supone. No obstante, estoy de acuerdo con lo que comenta Mariela -así lo entiendo- cuando te refieres a que no existe una imposición dictatorial y unívoca a la hora de recorrer el camino de la multiculturalidad -¡tan necesaria en estos tiempos que nos corren!-.
De hecho, siempre veo en las páginas de esta novela un decurso atento de lo que va sucediendo. De esta manera, las cosas acaecen, aunque haya momentos donde se palpa cierta tensión que es propia del cambio que se va transformando en ciertos personajes de la obra.
Saludos,
Última edición por Aben Razín el 07 Oct 2020 13:24, editado 1 vez en total.
Pasado: El coraje de ser de Mónica Cavallé.
Presente: Los perdedores de la Historia de España de Fernando García de Cortázar.
Poco que añadir a todos los comentarios anteriores...
Hay que mirar la novela en perspectiva, ahora quizá tenemos muchas letras que cuentan esos años, pero en 1930 podría ser una novela conmovedora, dura, y que cuenta con perspicacia el sentir de tradiciones cuando las costumbres y el mundo global empiezan a acercarse. La hoja de ruta de ese sentir la hace una novela casi indispensable para comprender -en 1930- el choque cultural y los sentimientos derivados.
Una novela que te hace pasar un rato de buena lectura!
¡Salud y buen viento!
Luciendo los tatuajes de un pasado bucanero, de un velero al abordaje...
Buccan escribió: ↑07 Oct 2020 12:59
Poco que añadir a todos los comentarios anteriores...
Hay que mirar la novela en perspectiva, ahora quizá tenemos muchas letras que cuentan esos años, pero en 1930 podría ser una novela conmovedora, dura, y que cuenta con perspicacia el sentir de tradiciones cuando las costumbres y el mundo global empiezan a acercarse. La hoja de ruta de ese sentir la hace una novela casi indispensable para comprender -en 1930- el choque cultural y los sentimientos derivados.
Una novela que te hace pasar un rato de buena lectura!
¡Salud y buen viento!
Buccan
He subrayado las frases con las que estoy de acuerdo con tu comentario: la perspectiva histórica de lo que relata esta novela, como en otras tantas, es fundamental. No se puede ver el relato con sólo los ojos de este principios del siglo XXI. En verdad, hay que ir un poquito más allá.
Pasado: El coraje de ser de Mónica Cavallé.
Presente: Los perdedores de la Historia de España de Fernando García de Cortázar.
Buenos días.
Anoche empecé este libro, y la verdad es que me está gustando bastante.
es una lectura amable detrás de toda la densidad de los últimos libros leídos, y me gusta mucho forma pulcra y elegante de escribir de esta autora, muy acorde a la cultura china que está intentando describir.
Un acierto.
Quizás es por eso que dicen que sus únicos buenos libros son los que dedica a China, y el resto...
Bueno no lo sé, no he leído otros.
El caso es que estoy desayunando y buscando información sobre las tradiciones chinas, y viendo imágenes del tema de los pies de loto y se me ha revuelto el estómago. Por dios. ¿Cómo se puede sufrir tanto? Las mujeres de verdad que no entiendo cómo han sobrevivido en este mundo estúpido. Y mejor no digo nada más porque en este momento y tras leer y ver imágenes, estoy calentita. Ea.
Silba la calandria y nos sorprende en vela, amuchados, con ganas de seguir.
Entiendo la necesidad de que en la segunda parte se hable de la situación de su hermano, pero Pearl me la ha metido doblada. Yo quería seguir buceando en la relación entre Kwei y su marido, por las diferencias entre ambos, y el respeto mutuo de aprendizaje y asimilación.
¡Qué rabia!
No niego que, para hacer más amplia la visión de la cambiante China, también está bien la perspectiva de introducir a una americana en ese difícil mundo que la expulsa, pero tocar tantos frentes me va a desarrollar una esquizofrenia, querida Señora Buck.
Silba la calandria y nos sorprende en vela, amuchados, con ganas de seguir.
en un spoiler de un comentario que se encuentra dos más arriba que éste, 
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