El lector - Bernhard Schlink

[madison]

La manera de describir cómo ella se desnuda o vuelve a vestirse, Ana subiéndose las medias...
Hablo de memoria, pero recuerdo que me fascinaba mientras lo leía porque me parecía estar en la habitación viviendo la escena, incluso respirando el aire viciado que se respiraba allí, con la bañera llena y humeante

[Aben Razín]

La manera de describir cómo ella se desnuda o vuelve a vestirse, Ana subiéndose las medias...
Hablo de memoria, pero recuerdo que me fascinaba mientras lo leía porque me parecía estar en la habitación viviendo la escena, incluso respirando el aire viciado que se respiraba allí, con la bañera llena y humeante

¡Es cierto, madi!

Con una prosa sencilla y elegante, Bernhard Schlink está consiguiendo que el lector esté en medio de todo... ¡ejem, ejem!... ¡Ya me entiendes!...

El caso es que no puedo dejar de leer y ya me encuentro en un tercio de la novela y sigue manteniendo la misma tensión narrativa. Aparecen unos accesos coléricos de Hanna Schmitz que no presagian nada bueno, pero que, incomprensiblemente, Michel Berg los acaba comprendiendo...

[Aben Razín]

Segunda Parte. Capítulo 2.

Ya ha ocurrido el hecho desencadenante de la segunda parte de esta obra tan buena que estoy leyendo:

En un momento, una tarde cualquier, Hanna Schmitz desaparece sin dejar rastro, incluso en su trabajo, después de que el encargado le ofrece una mejora laboral. Tiempo más tarde, después de terminar la carrera de Derecho, Michel Berg acude a los famosos juicios, posteriores a los famosos de Nuremberg, y se encuentra a Hanna.

Durante la presentación de la trama de esta Segunda Parte, el autor, por boca de Michel Berg, hace una excurso muy interesante para justificar la motivación de los juicios que se hicieron tras la caída del Tercer Reich, no los de Nuremberg. Para esa generación posterior a la II Guerra Mundial que empezaba a tomar los puestos de la anterior, se trata de acusar a toda una generación que vivió, contempló y acudió a esa barbarie. Es decir, se juzga, por lo tanto, a la inacción que hubo como una forma de rehabilitar la moral de la sociedad que se estaba construyendo.

Paralela a esta situación, Michel Berg sigue viviendo los amores y desamores de una forma humillante, diríamos, él ha encontrado el amor y cree que por ello tiene que padecer o sufrir, sin mayores planteamientos personales.

Sigo leyendo esta buenísima novela

[Jolines]

Qué ganas me están entrando de leerlo.

[nosequé]

Qué ganas me están entrando de leerlo.

Anímate, merece mucho la pena

[Aben Razín]

Qué ganas me están entrando de leerlo.

Me uno a la recomendación que te hace nosequé además quiero recordar que te debía un aviso en cuanto comenzara a leer esta novela -¡algo que he hecho!-

Lo dicho, ¡ponte a leer esta novela!...

[Jolines]

Sí, sí, sí !!! Tengo un par de libros por delante y me pongo con él. Y con vuestros comentarios, me voy a poner con muchas ganas. Gracias!!!

[Aben Razín]

Sí, sí, sí !!! Tengo un par de libros por delante y me pongo con él. Y con vuestros comentarios, me voy a poner con muchas ganas. Gracias!!!

¡Estaré muy atento a tus comentarios, Jolines!

Supongo que, cuando lo empieces, ya lo habré terminado, pero ¡no importa!...

[Jolines]

Creo que será en diciembre, después del miniclub de Balzac.

Ya os iré contando.

[Aben Razín]

Creo que será en diciembre, después del miniclub de Balzac.

Ya os iré contando.

¡Perfecto, Jolines!

[Paul Thinkmind]

Yo también me propuse leerlo, pero vi la peli.

Y me gustó mucho mucho. Pero no sé si la novela aporta mucho más.

Y ahí está el debate de si se debe

presentar a los asesinos o a los cómplices de ellos, como en caso de Hanna, la guardiana del campo, como una persona que siente y padece. Humanizar a los monstruos... A despertar la simpatía del lector y a que perdone esos crímenes tan lamentables. En el libro la victimiza, y seguro que mucha gente siente que está indefensa, pero si lo piensas fríamente, no la perdonas, y tampoco la comprendes?

Yo tengo opiniones encontradas sobre esto. Y otra muy particular sobre los que ayudaron a que todo aquello pasara,

a los que eran partes de la rueda, y se dejaron llevar. No comprendo no doy mi perdón a criminales de guerra, sea cual sea su situación.

[nosequé]

Creo que fueron muchos los mostruos, pero unos eran las mentes y otros sólo borregos que seguían a los asesinos.

Visitar campos de asesinatos como Auschwitz, te da otra visión del horror.

Y yo no perdono y por supuesto no lo olvido y seguiré hablando del tema, siempre que tenga ocasión.

El otro día en otro hilo, hable de otro libro: Una mujer en Berlin. Otra realidad del mismo horror.

[Eyre]

El otro día en otro hilo, hable de otro libro: Una mujer en Berlin. Otra realidad del mismo horror.

Uf, tremendo y desgarrador testimonio, y real, además: https://www.abretelibro.com/foro/viewtop ... 16&t=22087

[Aben Razín]

Terminado.

Si digo que me ha gustado esta novela, miento, porque me ha fascinado. Pueda ser que no tenga un estilo engolado, pero es directo, muy directo, casi como si fuera un diario a pie de calle, pero con unas dosis enormes de realismos: los protagonistas están enfrentados continuamente a dilemas éticas que marcan sus vidas de forma indeleble.

Aquí, es donde, creo, radica la maravilla de esta novela: la historia, los personajes, la memoria que destruye, los dilemas éticos en un período monstruoso de la historia de Alemania y la resolución final de todo ello son los elementos que no abandonan al lector en ningún momento.

Algo evidente es, por parte del autor, la utilización de elementos judiciales para el desarrollo de la obra, más aún si tenemos en cuenta cuál es el trabajo del escritor, pero que sirve para centrar los problemas que van surgiendo, sobre todo, en las dos últimas partes de la novela.

Por último, los problemas éticos que existen llaman directamente a nuestras conciencias y obligan al lector a posicionarse de alguna manera y, entiendo, persisten en la memoria porque no se resuelven tan fácilmente.

Desde luego que os la recomiendo, saludos

[fresa_charly]

Yo también lo leí después de ver la película (y La dama del perrito, de Chejov ) y todavía no sé si me gusta más la película o el libro

Kate Winslet está absolutamente espectacular en la película, dota de una humanidad a Hanna que no me llegó igual en el libro.

Y en el libro Michael, que lleva todo el peso narrativo, es impactante. Su desamparo inicial, sus reflexiones, su evolución, su comprensión

Pequeña joyas

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