El doble - Fiodor M. Dostoievski

[olamiamol]

Buenas.

¿Sólo estoy yo para el MC de Dostoievski?

Yo lo voy a leer pero para la semana que viene, ponle que para el miércoles.

[hierbamora]

Yo lo voy a leer pero para la semana que viene, ponle que para el miércoles.

Ah, pues genial, yo creo que no podré empezarlo antes del lunes, así que ya lo vamos comentando,

[Armando]

Yo me uno. Lo tengo por ahí y es cortito. Empiezo mañana o pasado mañana.

[olamiamol]

Mañana empiezo!

[olamiamol]

Llevo cinco capítulos y aún no le he pillado el punto. Estoy perdido aunque parece que a partir del próximo capítulo conoceremos el problema del doble.
Decepcionante.

[Armando]

Yo lo inicio ahora mismo.

Ya había leído el prólogo de mi edición (de Aguilar, en esas que traen muchas obras del autor), y en ella mencionan que Dostoievski le había puesto todas sus esperanzas a esta obra. Para entonces ya no era la joven sensación de las letras rusas que había escritos Noches Blancas, y Fiodor buscaba con este librito una obra maestra, que lo colocara de nuevo en la cúspide artística.

Sin embargo, no fue comprendida ni por los lectores ni la crítica. En mi edición hacen alabanzas de esta obra, sobre todo la ambigüedad que maneja. Pero ante la nula aceptación que tuvo en su tiempo, el autor llegó a detestar este libro.

Ya veré, ya veré.

[hierbamora]

Por motivos ajenos a la lectura, no he podido comenzar todavía...

Espero esta tarde, por fin hacerlo...

[hierbamora]

Llevo cinco capítulos y aún no le he pillado el punto. Estoy perdido aunque parece que a partir del próximo capítulo conoceremos el problema del doble.
Decepcionante.

A mí no me está decepcionando. Llevo leídos los ocho primeros capítulos. Veo ciertos guiños al desenfado y humor de Gógol, (algunos críticos hablan de un intento de imitación), y su lectura me resulta muy amena. Cierto que Goliadkin es un personaje que irrita y en ocasiones cabrea, pero sirve de excusa y rastreo para indagar, -como tan bien hace Dostoievski-, el interior del ser humano, el tema de las contradicciones, incongruencias e inseguridades personales.

Es interesante, además, que el doble, este caso, toma vida propia y emerge como competitivo de uno mismo. Clara línea simbiótica con Freud y sus posteriores tesis.

Parece ser que esta segunda obra no tuvo demasiado éxito, no está entre las más notables, y que ello hizo sumir al ruso en la depresión.

Sigo

[hierbamora]

Leído. Me ha gustado mucho, y no consigo encasillarla como "obra menor". De hecho, no quiero compararla con ninguna otra. Es en sí misma una gran novela. Creo que Dostoievski no defrauda, lo que sí, quizá, son las críticas que le hicieron a esta obra, y que ahora considero injustas.

El libro tiene escenas muy cómicas, como la de los once pasteles

que se come su doble y que le toca pagar a él: "Pues si dice que son once, serán once -pensó, colorado como un cangrejo-, ¡Bah! ¿Qué hay de raro en comerse once pasteles? Si uno tiene hambre y se comen once pasteles!, ¡buen provecho le hagan! Nada de particular ni de ridículo tiene eso...(Alianza, p. 98). O el sinsentido de hacer visible una cinta rosa, en una noche de San Petersburgo, húmeda e inconstante.

El encuentro con su homónimo le lleva a numerosas calamidades y desastres. El otro parece usurparle la identidad, no solamente el nombre. Hasta sin sombra se queda nuestro protagonista. Un hombre que sufre porque se ve ninguneado, reducido a mero residuo de otro, ¿horrible, verdad?

La lucha contra la sociedad como conjunto, o la burocracia, el sentirse repudiado, ignorado, el gran incomprendido Goliadkin se emparienta y mucho, con el también marginado protagonista de Memorias del subsuelo, aunque El doble tiene menos carga filosófica, y es mucho más disparatada. A su manera, ambas son geniales,

Es también un viaje alucinante por la mente de un, ¿enfermo? Sólo, quizá, esto pueda fatigar a ciertos lectores. Pues el viaje es circular, sin retorno, solipsista, usando un término más filosófico. Es un personaje disociado, demediado, que causa dislocación, disturbio, molestia o recelo. Al respecto sobre el doble se dice:

Me voy con las buenas gentes..., las que viven con honradez. Con las que viven sin falsedad y no tienen dobles (p. 108).

Hay momentos irónicos, como cuando comenta que ya han pasado los tiempos de Juan Jacobo Rousseau (p. 165). Otros, surrealistas:

-¿Qué has hecho con la carta, ladrón? ¿A quién se la diste?
-No di a nadie ninguna carta. No tenía ninguna carta. (p. 105)

O esta frase, simpática donde las haya, dicha por un cochero:

No puedo llevar a dos personas exactamente iguales, señor. El hombre bueno trata de vivir honradamente y no de cualquier modo y, además, nunca tiene un doble (p. 116)

Aparece la crítica a los franceses que luego continuará en El jugador:

Debieran haber propinado una azotaina a usted por leer libros franceses y a sus padres por habérselo permitido. Porque los franceses no enseñan el bien. Lo que contienen es veneno, ¡un veneno pernicioso, señorita! (p. 165)

A pesar de todo, un hombre optimista, perseverante y reincidente en sus intentos de aclararse. Un hombre ahogado por sí mismo. Una gran elucubración sobre lo real y lo imaginario, donde lo fantástico y lo ilógico se introduce en numerosas secuencias. Forma así como una tragicomedia esperpéntica, o una pesadilla grotesca, de ritmo rápido, ágil, informal y divertida. Os animo a leerla.

[olamiamol]

Pues yo sigo aún atascado por el capítulo 7. De momento me está decepcionando aunque ciertamente está mejorando a medida que avanzo en los capítulos.

[hierbamora]

El libro es un puro disparate tras otro, quizá tomándolo de esa forma lo disfrutes más, no sé, es algo tan relativo...

A mí los capítulos 9 y 10 me gustaron especialmente, tienen mucha parte cómica y anécdotas muy divertidas, como la de los pasteles, -que nombré-, o la conversación con el cochero. Sólo por esta última, ya me ha ganado Dostoievski,

Quizá no sea imparcial, pero es que sus alocados personajes me entusiasman...

Sigo vuestros comentarios,

[olamiamol]

Pues ya he terminado de sufrirlo, y digo esto después de haber leído casi toda la obra de Dostoievski. Para mi gusto la peor de sus novelas y el hecho de que sea disparatada no es el motivo de esa opinión,; simplemente no está a la altura del resto de su obra y no hablo de las Mayores, sino que incluyo cualquiera de las escritas en esa primera época como "Pobres gentes", "Noches Blancas" o "Nietochka Nezvanova".

Sin duda no se lo recomiendo a nadie que nunca haya leído una novela de Dosto porque indudablemente se le quitarían las ganas de leer otra novela del moscovita ( y pensándolo bien tampoco se la recomendaría a quien haya leído gran parte de la obra del genial escritor ruso).

Y comento esto siendo Dostoievski mi autor favorito (no en balde lo llevo en el avatar).
En fin he perdido el tiempo con esta novela.

[hierbamora]

Pues ya he terminado de sufrirlo, y digo esto después de haber leído casi toda la obra de Dostoievski. Para mi gusto la peor de sus novelas

Jo, pues veo que no te ha gustado prácticamente nada, así que entonces, me alegro que lo hayas acabado,

No he visto tanto desnivel respecto a otras obras, aunque es cierto que aún me quedan algunas para completar toda su producción. Quizá con más perspectiva mi juicio sea más certero.

[Turin-21]

Empezandolo, pero me esta costando agarrarle el ritmo, sobretodo por esos nombres rusos, me pierdo por completo

[Berlín]

Bueno, pues me la he fumado en un par de caladas y me ha encantado. Es de esas obras que te dejan pensando, y pensando me he acordado de Jeckill y Hyde y de ese desdoblamiento, de esa disociación, aunque química, de la personalidad. Jeckill se toma la fórmula y sale el monstruo y yo me pregunté al leerla si acaso no todos llevamos un monstruo dentro, que quisiera salir, pero no le dejamos porque no se puede. Hablo de la dualidad. En esta novela de Dosto he pensado que tal vez ese doble no exista, que es una creación del protagonista, una creación donde verter todo lo que a él le avergüenza de si mismo, porque él no usa careta más que en los bailes de disfraces.

Luego tiene ese aire kafkiano, aunque aquí me dio risa porque Kafka es posterior.

En fin, una gran novela. Y hay peli, aunque no la he visto.