Los capítulos siguientes empieza a enredarse todo en plan culebrón en el mejor sentido.
Fernando y Pepita haciendo manitas en un amor que va a ser imposible, la decepción de Sánchez Morueta con su querida, los malvados Paluí y Urquijo... |
Moderador: LizzyDarcy
Fernando y Pepita haciendo manitas en un amor que va a ser imposible, la decepción de Sánchez Morueta con su querida, los malvados Paluí y Urquijo... |
He acabado el Capítulo Tercero, y, efectivamente, es un poco mono-tema (¿dónde he oído yo eso? Ah, sí, me callo...) sobre los jesuitas y todo ese mundillo en el País Vasco... la verdad, me aburre un poquitín, pero Blasco nunca se hace pesado... al debido momento, lo deja...ratonB escribió:
El famoso anticlericalismo de Blasco Ibáñez es más bien "antijesuitismo": vaya repaso les da en este capítulo. La compañía de Jesús debía tener en esos años una influencia social enorme, por la educación y demás, y si Blasco estaba comprometido con una ideología que competía por hacerse con la misma clientela es normal que surgiese esas animadversión.
No he llegado a todo eso... voy a intentar ponerme, pero como tengo otras ordalías en las que testificar, voy rezagada...ratonB escribió:El capitulo cuatro mientras que Fernando enseña las fábricas al medico nos cuela Blasco un curso de metalurgia. De aquí salimos ingenieros industriales, klatu. Me recuerda a las lecciones magistrales de Julio Verne.
Los capítulos siguientes empieza a enredarse todo en plan culebrón en el mejor sentido.Y Aresti tratando de poner sentido común. Está interesante
Fernando y Pepita haciendo manitas en un amor que va a ser imposible, la decepción de Sánchez Morueta con su querida, los malvados Paluí y Urquijo...
ratonB, ratonB... que te veía muy callado y que todo me parecía indicar que ya habías acabado y que por galante consideración, nada decías hasta que yo hubiera llegado al fatídico punto final, el lugar y la fecha de composición... lo hace siempre Blasco... cumplíase así la voluntad de Zeus...ratonB escribió:Yo voy por el nueve, igual lo acabo hoy.
Interesante el debate entre Aresti y Urquiola, recuerda las dos españas de Machado, en el que Blasco, a través de Aresti, toma partido con todo su derecho. Aunque mejor dicho serían tres españas. Sin quererlo le ha salido la tercera (creo que la mayoritaria) representada el primo millonario que entre dos fuegos simpatiza con una pero tiene que condescender con la otra.
Eso también , pero además es porque con este libro voy a capítulo por sentada, que se presta ya que cada uno de ellos se centra en algún o algunos personajes o la relación entre ellos y casi resultan pequeñas historias en sí mismos, no como otras novelas que se leen más de corrido. Conociendo a Blasco Ibáñez debe estar dejando el mambo para el último capítuloklatubaradaniktó escribió: ratonB, ratonB... que te veía muy callado y que todo me parecía indicar que ya habías acabado y que por galante consideración, nada decías hasta que yo hubiera llegado al fatídico punto final, el lugar y la fecha de composición... lo hace siempre Blasco... cumplíase así la voluntad de Zeus...
A mí me pasa lo mismo, pero mis sentadas son más espaciosas porque combino este libro con catorce mil más y no tengo ojos, atención ni ansiedad suficiente para tanta cosa apetitosa...ratonB escribió:con este libro voy a capítulo por sentada, que se presta ya que cada uno de ellos se centra en algún o algunos personajes o la relación entre ellos y casi resultan pequeñas historias en sí mismos...
más dramático y con más sangre. |