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Rindermarkt, mi calle
Creo que es atribuible a algún ilustrado más aquello de "no se si existe Dios, pero si existe, le echamos de menos".
Fiorella me ha llamado la atención el texto que has escrito. Me ha recordado a las últimas reflexiones que Flaubert puso en boca de Emma Bobary.
Qué curioso que Jangel lo compare con escritores centroeruopeos, porque también me ha recordado a mi amado Kafka en su Carta para el padre. Quizá por la manera expresa de contar los sucesos que podrían ser duros, como situaciones que no se dan de forma tan rara en una determinado estrato social. Pero sobre todo por la expresión, el hablar directamente, el diálogo, el monólogo expreso para sí mismo y para el interlocutor, sea este quien sea.
A destacar el hilo de cordura del comienzo, que va tornandose en locura conforme avanzan las frases.
Gratísima sorpresa tu texto, Fiorella.
Fiorella me ha llamado la atención el texto que has escrito. Me ha recordado a las últimas reflexiones que Flaubert puso en boca de Emma Bobary.
Qué curioso que Jangel lo compare con escritores centroeruopeos, porque también me ha recordado a mi amado Kafka en su Carta para el padre. Quizá por la manera expresa de contar los sucesos que podrían ser duros, como situaciones que no se dan de forma tan rara en una determinado estrato social. Pero sobre todo por la expresión, el hablar directamente, el diálogo, el monólogo expreso para sí mismo y para el interlocutor, sea este quien sea.
A destacar el hilo de cordura del comienzo, que va tornandose en locura conforme avanzan las frases.
Gratísima sorpresa tu texto, Fiorella.
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