De costuras y retales felinos (Novela)

[Berlín]

Ohh, no había visto el avioncito de color verde en el encabezamiento de la carta. Jo, que bonito.

[Berlín]

Con tu permiso...



—¿Qué haces subida al tejado? Te he buscado por toda la casa-dices
—No me has buscado en el lugar adecuado—te digo
—Vi tu avión. Pero estaba muy lejos—dices
—Todo el mundo está muy lejos. Ven, siéntate a mi lado.
Me abrazas y tus manos se cruzan en mi cintura. Acercas tu cara y me hueles. Me das un beso en el cuello. Pero es un beso casto y me rio.
Las calles están desiertas. Acaso algún perro que ladra en la lejanía. En el parque una pareja se abraza con fuerza. Alrededor de ellos vuelan las hojas y se levantan formando vórtices secos, pero ellos no se dan cuenta. El mundo desapareció hace rato.
—Deberías haberte vestido—dices
Los gatos no tenemos frio. Estamos acostumbrados a la lluvia y a vagar desnudos.
—¿Qué decías en tu avión?—preguntas.
—Te decía que las noches son muy largas. Y que a veces me acurruco y me abrazo yo sola para darme calor.
Me abrazas muy fuerte y me señalas la luna.
—Ella también está sola.
—Pero ella siempre ha estado sola.
Dices que no me quieres ver triste y me haces cosquillas hasta que me doblo de la risa.
—Estás muy loca—dices
—Nunca lo he negado.
—¿Quieres un café?—preguntas
—Café para dos.

[Mister_Sogad]

Ay gata, me espoleas cosa mala, espero que me perdonen las licencias que me voy a tomar al coger prestada una cosilla.
_________________________________________________



Te espero en el pasillo, has dejado la puerta abierta mientras te vistes y ya por dos veces me has dicho que puedo entrar si quiero, que confías en mí sin problema. Me lo he pensado un momento porque en el tejado he creído ver cicatrices sobre tu piel revuelta y me apetece seguir esas líneas con dedos que sanan y susurros que aligeran. Pero también me he dejado tentar por lo que has pintado sobre tu cuero de gata, y no quiero pensar en líneas o curvas, no quiero enturbiar mis sentimientos sinceros. Me quedo aquí fuera, sin cruzar la puerta.

—¿Crees que la felicidad me esquiva estando tan cerca? —Me lanzas de lejos.

—La felicidad es un golem que siempre tiene hambre. Un monstruo creado por nuestras manos, un ser de barro que va cambiando su forma, a veces mengua, a veces se convierte en gigante, en ocasiones no es más que un pedazo de piedra que ha perdido toda su fuerza.

Silencio. Ni siquiera puedo oír ruido de ropa revuelta. De improviso una mano me acaricia lentamente el cogote y se desliza poco a poco por mi espalda, luego ella me abraza por detrás apoyando su cabeza a la altura de mi hombro. Me aprieta y suspira.

—¿Y cómo se le alimenta? —Dice despacio, su tono reverbera creando ecos en cada rincón de mi cuerpo.

Mis manos acarician las suyas lentamente, me muerdo un instante el labio inferior.

—Perdóname.

—No, no digas eso. No estoy triste, estas aquí.

Dejo pasar el tiempo, mis dedos persiguen el contorno de sus nudillos, acarician la piel de sus manos.

—Alimentar al golem depende sobre todo de nosotros, pero no solo por hacerlo directamente sino por aprovechar todo el alimento que se nos pone por delante.

—Tú me aportas ricos manjares.

—Lo has entendido. Tan solo digo que la felicidad puede costar de lograr y mantener, pero es mucho más fácil si te abres a lo que de por sí te la da.

—No puedo tenerla a pan y agua.

Ambos reímos, me aprieta con fuerza y me suelta. Desaparece una vez más en la habitación y yo continúo de centinela en la puerta. Cuando reaparece su cara esta vestida con una sonrisa, en sus ojos destaca el destello alegre de las caricias.

—Estoy lista.

—De acuerdo, pero antes de irnos tengo un poquito de barro para tu golem.

Ríe curiosa y me mira intensamente a los ojos.

—¿Un regalo?

—Un te quiero.

Con gesto brusco me agarra con fuerza, sus manos envuelven mi cara, la gira y me planta un sonoro beso en la mejilla.

—Me vas a empachar al monstruo —Dice cuando me suelta con una sonrisa radiante.

—Lo voy a convertir en gigante.

[Berlín]

Con cada palabra tuya, con cada avion de papel que entra por mi ventana, añades un poco más de barro a mi cuerpo trasnparente. Casi estaba desaparecida. Me estas dando forma de nuevo:




...gracias.

[Mister_Sogad]

Solo te ayudo a redefinir tu contorno, recuerda que son tus dedos los que se manchan de tinta, eres tú la que te dibuja.

[Estrella de mar]

Parad los avioncitos, que me subo.

Ole los poetas felinos y sus garras de tinta.

[Berlín]

Parad los avioncitos, que me subo.

Ole los poetas felinos y sus garras de tinta.

Estrella, el hilo es del tigre, pero ya sabes que tú siempre eres bien recibida. Además, los aviones son transparentes. Si los miras al trasluz sólo hay mucho cariño.

Tú y yo llevamos muchos duelos en nuestro haber ¿recuerdas niña del mar?
Y a mi una estrella en el pelo no me quedaría mal.

[Estrella de mar]

Y tanto que me acuerdo, mi perla marina. Todavía llevo un brazo de palo.

A ti te sienta bien hasta un mojón.

Te espachurro a besos, gata loca. Aprovecha, Topito.

[Mister_Sogad]

Parad los avioncitos, que me subo.

Ole los poetas felinos y sus garras de tinta.

Estrella, el hilo es del tigre, pero ya sabes que tú siempre eres bien recibida. Además, los aviones son transparentes. Si los miras al trasluz sólo hay mucho cariño.

Tú y yo llevamos muchos duelos en nuestro haber ¿recuerdas niña del mar?
Y a mi una estrella en el pelo no me quedaría mal.

Estrella tiene pase VIP en todos y cada uno de mis hilos, incluso puede tomar los mandos si le da la gana.

Estrella

[Estrella de mar]

Esto es lo que os voy a hacer a los dos algún día.

[Mister_Sogad]

¡Y con cinco brazos nada menos!

[Tolomew Dewhust]

Ahora toca dar caña aquí, que me viene muy a cuento de lo otro .

Ahora soy cada vez más consciente de las inmensas posibilidades que se abren si uno apuesta por no tener límites, ni cortapisas, por dejarse llevar por los sueños y por todo lo que te nace.

Eso me pasa a mí cuando os leo determinadas historias.

Mira, este hilo que estáis formando es tela de bonito. La mayoría de las cosas que vais posteando no tienen ni medio minuto, os están brotando tal cual y crece hacia arriba. Por el motivo que se intuye detrás, el momento en cuestión en que lo iniciaste -con el bajón de la bruja piruli- y el cariño que desprende, ya por eso se deja uno llevar y lo lee con agrado y con una sonrisilla en la boca.

Sinceramente, leído el primer párrafo, se ha leído el conjunto, porque no hay una historia detrás, sino un propósito. Nos deleitáis con la retórica de las palabras y eso es bueno, pero no va a trascender más allá (te digo esto porque me tomo confianzas muy pronto con la gente, hasta que alguno me diga que "hasta aquí", y, hasta ahí, ¿ok?).

Yo que tú, caso de querer demostrarle mi cariño, le daba vueltas al coco e intentaba algo "distinto". Crear un personaje, o coger a una personita y dotarla de poderes sobrenaturales, o plantarla en una situación inverosímil... que vistas la historia y te des un curro como si fuera un relato... y luego lo cuelgas aquí con su nombre o dejando claro que la prota es ella. Coge a una chica que se llame Angie y dices que de niña movía los dedos de su mano izquierda y que los árboles temblaban en el suelo o sacudían sus ramas al compás que ella marcaba. Y de ahí hasta donde quieras, for example.

Lo otro, los ronroneos, las caricias, las palabras bonitas... son preciosas, pero solo eso.

Berlín escribe que te caes para atrás, pero tiene que sentarse a escribir. Si cuelga lo primero que le pasa por la cabeza, es uno más de nosotros, y es una pena, porque ella, si quiere, hace cosas distintas. Por eso hay que darle caña para que haga las cosas con tiempo (lo del barro, lo del minotauro... vale, pero ponlo al lado de Calafateando o el relato a la arquera y se te caen los ojos al suelo).

Que a gusto me he quedao, chiquillo.

Y ahora voy a otro sitio a seguir soltando paridas, .

[Berlín]

Calafateando no podía salir de otra manera, Tolo. Y no sabes cuánto me costó escribirlo. Si no os hubiera gustado me habria dado igual.

Verás, poeta, para que lo que yo escriba os haga caer para atrás yo tengo que sentirlo desde lo más hondo y me tiene que doler, si no sólo me salen mierdas. Es así de claro.

[Tolomew Dewhust]

Creo que tenéis un GPS o algo conectado a la muñeca y cuando se os menciona os pita u os sacude, ¿no? Jaja.

No, mira, es que se trata justo de eso, el otro día se lo decía yo al canario. Si tengo una idea en la cabeza, aunque me siente cada tarde durante dos semanas frente al portátil, no hay nada que hacer, no escribo ni media palabra. Es que me pasa continuamente. Luego, un día, cuando digo que no, que no participo, que no escribo, que otra vez será... un día me duele la barriga y la suelto del tirón, por eso digo siempre "he parido esta historia", porque es un parto con su embarazo de nueve meses y todo.

Entonces, escribir por escribir, pues, como no lo hacemos del todo mal, sí... pero sin chicha ni limoná.

Somos de la misma cuerda, Ber. Somos chusmilla. De los que frecuentan la taberna del pirata Mucho_pito.

[Berlín]

jajajaja tú lo has dicho, poeta: somos chusmilla de ese tugurio que dices. Y gracias por llamarme chalada el otro dia, hacía tiempo que no me decian algo tan bonito.


....al pan pan y al vino vino.

Ahora vendrá el del saco a darme una receta del mendrugo normando.
Un abrazo.