La Playa de a Fontaiña de Vigo (Micro)

[Cuentos Peques]

LA PLAYA DE AFONTAIÑA DE VIGO

Autor Eric Moreira Pérez

Se nos avecinan tres jornadas de mucho calor en nuestra localidad
lo mejor es ir con nuestros peques a la playa de Afontaiña a nadar.

Los peques juegan a saltar las olas que vienen y van favorecidas por el viento
si al peque le regalas un helado se pondrá muy pero que muy contento
su abuelo se acuesta sobre una toalla se levanta y se sienta en un asiento
se levanta caminando hacia su nieta despacito y muy lento
cuando llega hacia ella le otorga un refrescante helado
para disfrutarlo este intenso y caluroso verano
la peque se pone a construir castillos elegantes de arena
el mar se pone bravo y con sus olas lo destruye cuando le da la vena
la peque se pone a llorar desconsoladamente y dando pataleta con la pierna.


Llega un repartidor de helados gratuitos para todos los peques allí presentes
financiados por alcaldes escolariegos y varios presidentes
se los entregaban a los peques mediante drones inteligentes
con sensores de movimiento,reconocimiento facial y pequeñas lentes
los peques mordían los helados con fuerte sensación de frio en los dientes
un gran contraste entre el frio del helado y los termómetros calientes
una peque decía hay mi querido frigo pie no me tientes
al terminar la ola de calor los peques se fueron para sus hogares
a caminar por la mañana por el paseo del rio lagares
viendo la fauna y los peces nadar por aquellos lares
que hermosa es la naturaleza y sus lindos parajes
una peque acostada en la hierva mientras su madre le da masajes
por que le duele la espalda al caerse de unos arboles
esa misma noche los caracoles cenaran los cultivos de verduras y coles
mientras burlaran todas las trampas colocadas por lo agricultores
igual que burlan la seguridad antipirateria de los ordenadores. Fin

[lucia]

Hombre, cuando le viene en gana no, cuando sube la marea, ¿no? Que el mar no se lleva los castillos de arena por malicia

Y nunca he entendido eso de salir a pleno sol los días de mucho calor en vez de buscar la sombra y el frescor.