Ya sabemos como es Villena, yo lo he conocido en un par de presentanciones-tertulia, y esa imagen decadente de eterno niño caprichoso tiene su encanto, transmite bien, es innegable que es un buen comunicador, sobre todo de nostalgias, pero colocarlo frente por ejemplo a Javier Tomeo, lo deja un poco deslucido en cuanto a potencia intelectual. Y francamente no me imagino a Panero y toda su brusquedad frente al amaneramiento de Luis Alberto y que surgiera de ahí mucha afinidad.
Estoy esperando el libro que es de la editorial Renacimiento, a ver si lo veo y pillo este y el que ha preparado mi amiga Maria Angeles Ezama de Maria Teresa Leon.
Felicidad Blanc
Moderador: natura