Nuestra actitud como lectores

Noticias, curiosidades y recursos sobre la literatura y el mundo que gira a su alrededor.

Moderador: Ashling

Avatar de Usuario
Ivanovich
Foroadicto
Mensajes: 3168
Registrado: 18 Oct 2007 12:21

Nuestra actitud como lectores

Mensaje por Ivanovich »

Hola!, quizá exista algún hilo abierto sobre este asunto, en cuyo caso alguien podrá fusionarlo. Si no es así, pues el asunto va de cual es la actitud que cada uno tiene como lector cuando se sienta y abre el libro por la primera página. En otro lugar, una reciente forista, tan reciente como yo (Paramo por donde andas???) transcribió esta cita de una entevista a Cortazar que yo, raudo y veloz, apunté entre mis favoritas:
Mi conducta de lector, tanto en mi juventud como en la actualidad, es profundamente humilde. Es decir, te va a parecer quizá ingenuo y tonto, pero cuando yo abro un libro lo abro como puedo abrir un paquete de chocolate, o entrar en el cine, o llegar por primera vez a la cama de una mujer que deseo; es decir, es una sensación de esperanza, de felicidad anticipada, de que todo va a ser bello, de que todo va a ser hermoso. No tengo ninguna prevención previa. Y te lo digo porque estoy acostumbrado a hablar con lectores que abren un libro casi como quien pega una bofetada: es decir, están enojados por adelantado. Si el libro es realmente muy bueno, los aplasta y los vence. Pero, en la mayoría de los casos, su actitud es agresiva y se diría casi que están esperando que el libro sea malo y que ese va a ser el gran triunfo de ellos como lectores si es que el libro es malo, para que les sea posible decir después que es malo. Eso se advierte con frecuencia en la crítica de tipo periodístico.
Al hilo de esta cita:

¿Cuál es vuestra actitud (o vuestro objetivo) como lectores?, ¿adoptáis una posición de superioridad respecto del autor o, por el contrario, una actitud mucho más humilde? ¿tendéis a buscar las excelencias de la novela o, por el contrario, magnificáis los defectos como un triunfo del lector sobre el autor? (o ambas cosas a la vez), ¿tenéis prejuicios literarios? (por ejemplo, a veces me sorprendo a mi mismo reprobando tal o cual tipo o categoría de libro y luego pienso ¿quién soy yo, o quien me creo, para hacerlo?), ¿que hacéis cuando lleváis un tercio de "obra maestra" leida y os dais cuenta de que se os cae de las manos? ¿Que otras actitudes tenéis como lector?

En fin, volviendo a la cita de Cortazar ¿qué os parece?, ¿pensáis lo mismo? ¿creeis que pensáis lo mismo? ¿os gustaría pensár lo mismo?

Abrazos,

Iván
Avatar de Usuario
Irene_Adler
La Adler
Mensajes: 15284
Registrado: 13 Ene 2006 20:19
Ubicación: Ciudad de las bajas pasiones

Mensaje por Irene_Adler »

Aquí va a estar mejor. :wink:
1
Avatar de Usuario
madison
La dama misteriosa
Mensajes: 41160
Registrado: 15 May 2005 21:51

Mensaje por madison »

[quote]que hacéis cuando lleváis un tercio de "obra maestra" leida y os dais cuenta de que se os cae de las manos? ¿Que otras actitudes tenéis como lector?
[/quotYo cada vez me vuelvo mas selectiva así que si el libro no me dice nada lo dejo enseguida, no pierdo el tiempo con él porque si me fuerzo a leerlo no me entetro.
Quizás en otro momento lo leeré...o no, quien sabe :roll:
Avatar de Usuario
AnaRyan
No tengo vida social
Mensajes: 2105
Registrado: 07 Ago 2007 16:34
Ubicación: Boom'ya Moon

Re: Nuestra actitud como lectores

Mensaje por AnaRyan »

Ivanovich escribió:
cuando yo abro un libro lo abro como puedo abrir un paquete de chocolate, o entrar en el cine, o llegar por primera vez a la cama de una mujer que deseo; es decir, es una sensación de esperanza, de felicidad anticipada, de que todo va a ser bello, de que todo va a ser hermoso.
Estoy de acuerdo con esa actitud a la hora de empezar un libro. Yo siempre los abro por primera vez con mucha ilusión, con la ilusión de pasar muy buenos ratos leyéndolo, de desear que no se acabe, que dure eternamente y poder seguir sumergiéndome en su historia uno y otro día.

También es cierto que algunos libros, bien sea por haber tenido malas experiencias anteriores con el mismo autor o por la temática predominante no puedes experimentar esa mezcla de ilusión, esperanza y candidez hacia el libro. En muchos de esos casos prefiero dejar correr el libro y quizá cogerlo en otra ocasión. Y es que cuando uno lee por iniciativa propia y no por imposición puede (y debe) seleccionarlos pensando en disfrutar al máximo con ellos.

Claro que siempre hay el que empiezas feliz y acaba decepcionándote y defraudándote... Pero tampoco es cuestión de tomarlo como una victoria y pensar que si es bueno has perdido tú... Es una postura un tanto extraña pero no dudo de su existencia. Hay gente para todo y sí es cierto que al leer algunas críticas da la sensación de que van buscando (esperando) que sea malo para poder criticarlo o ¿por qué no? bueno, para poder alabarlo. En definitiva, que leen más pensando en lo que podrán decir después que en el momento de lectura.

Y no sé si me he ido de la pregunta :oops:
1
Avatar de Usuario
madison
La dama misteriosa
Mensajes: 41160
Registrado: 15 May 2005 21:51

Mensaje por madison »

Cuando compro un libro que me hace mucha ilusión, lo acaricio sin darme cuenta :wink:
Avatar de Usuario
Akhesa
No puedo vivir sin este foro
Mensajes: 560
Registrado: 25 Jul 2007 21:40
Ubicación: Al sur del sur

Mensaje por Akhesa »

Yo cuando empiezo un libro en general es con ilusión, o al menos con curiosidad, por ver si te gustara o no. Lo que comentas de leer un libro "enfadado" previamente me parece que no tiene mucho sentido la verdad, a no ser que sea por imposición y no te quede más remedio que leer. Pero vamos, no creo que sea muy buena actitud para emprender una lectura, porque probablemento solo saques cosas malas, aún habiendo elementos buenos en la obra.
1
Avatar de Usuario
Lorena_uk
Lector voraz
Mensajes: 134
Registrado: 13 Oct 2007 19:17
Ubicación: Madrid
Contactar:

Mensaje por Lorena_uk »

Para mí abrir un libro nuevo y leer sus primeras lineas, es como abrir un regalo el día de navidad y admirarlo durante unos segundos, me siento como un niño pequeño que descubre que significa una palabra nueva que ha escuchado en el colegio; es lo mismo que cuando me compró un libro...es la misma sensación que tenía de pequeña cuando me compraba golosinas. Para mi es como un rito, siempre abro el libro por el final, leo la última frase, lo cierro respiro hondo y lo abró por el principio y no dejo de leer hasta que al menos he terminado el primer capítulo. Nunca tengo expectativas, lo leo sin más, lo disfruto, no me creo una idea preconcebida...esperó a terminarlo para emitir un juicio, hay veces que me lo leo dos veces, con un espacio de tiempo por medio, para emitir el juicio correcto, porque quizás la primera vez me pareciera malo, pero la segunda vez me parezca bueno...yo leo para disfrutar no lo hago para juzgar, eso ya lo hago una vez haya terminado.
1
Avatar de Usuario
Andromeda
Vivo aquí
Mensajes: 7893
Registrado: 18 Oct 2007 20:56
Ubicación: Al otro lado del mar
Contactar:

Mensaje por Andromeda »

Al igual que Madison, con el tiempo me he vuelto bastante selectiva pero aún soy incapaz de dejar un libro a medias. Este hecho me ha acarreado consecuencias buenas y malas pero creo que han predominado las positivas.
Otro punto, el de que quiénes somos para juzgar, nos lo va aclarando la misma experiencia como lectores; es la única manera de ir depurando nuestro propio concepto de la buena literatura, que a veces y por esta misma causa, puede llegar a coincidir con el de la -digamos, más valorada- crítica (en general).
La predisposición..., cuando tengo a Coetzee frente a mí, conozco anticipadamente que voy a sufrir con la obra, por eso procuro esperar el momento idóneo para iniciar la lectura (es decir, no estar en la depre ni nada por el estilo).
Hay autores fascinantes que ni en sueños me lo hubieran parecido tiempo atrás. Cuando he leído críticas muy favorables y otro tanto adversas a una obra literaria, apenas si puedo esperar para acceder a la misma y formarme mi propia (acertada o no) opinión y sin que me hayan predispuesto las mencionadas apreciaciones. :arrow: Ese es el caso, por ejemplo, de Murakami y Kafka en la orilla , lo tengo pendiente y me urge leerlo.
Otro ejemplo: Delirio, de Laura Restrepo: me pareció muy buena su técnica narrativa, muy elaborada, pero la trama no me enganchó en ningún momento. Dejarla a medias..., imposible; leer otra obra suya: ¿?


Saludos.
Imagen
Avatar de Usuario
Gretogarbo
Vivo aquí
Mensajes: 12248
Registrado: 11 Abr 2007 11:10
Ubicación: Aquí pero deseando regresar

Re: Nuestra actitud como lectores

Mensaje por Gretogarbo »

Ivanovich escribió:1.¿Cuál es vuestra actitud (o vuestro objetivo) como lectores?, 2.¿adoptáis una posición de superioridad respecto del autor o, por el contrario, una actitud mucho más humilde? 3.¿tendéis a buscar las excelencias de la novela o, por el contrario, magnificáis los defectos como un triunfo del lector sobre el autor? (o ambas cosas a la vez), 4.¿tenéis prejuicios literarios? (por ejemplo, a veces me sorprendo a mi mismo reprobando tal o cual tipo o categoría de libro y luego pienso ¿quién soy yo, o quien me creo, para hacerlo?), 5.¿que hacéis cuando lleváis un tercio de "obra maestra" leida y os dais cuenta de que se os cae de las manos? ¿Que otras actitudes tenéis como lector?

En fin, volviendo a la cita de Cortazar ¿qué os parece?, ¿pensáis lo mismo? ¿creeis que pensáis lo mismo? ¿os gustaría pensár lo mismo?

Abrazos,

Iván
Magnífico hilo, Ivanovich. Como lector de obras de ficción he de decir:
1. Mi único objetivo es pasar un rato entretenido, sin más.
Mi actitud antes de ponerme con una obra nueva es no ser crítico ni con ella ni con su autor y la misma actitud mantengo después de leerla. Me gustó o no, simplemente eso; no me veo con ninguna capacidad para decir si es buena o es mala.
2. Mi posición respecto al autor no es ni de superioridad ni de inferioridad. Es de admiración por haber tenido la capacidad y paciencia de rellenar folios en blanco; ¿con qué fin?, no me importa.
3. Por supuesto que busco las excelencias de la novela, con avidez además. Para mí esas excelencias son frases o párrafos enteros que me hacen meditar, que me hacen recordar, que me hacen sentir, que me definen, que me emocionan. Y las paso a mi libreta roja.
4. Prejuicios literarios: ninguno. Ya he comentado en más de una ocasión cómo han caído en mis manos novelitas del oeste y he de decir que las que he leído me han divertido un montón. Y no tengo ningún problema en terminar una novela de Saramago, comenzar con las Leyendas de Bécquer y poner en la parrilla de salida La isla del tesoro de Stevenson.
5. Si llevo leída media "obra maestra" y veo que se me cae de las manos, aprieto los dedos y sigo para adelante pero la termino. Me ha pasado recientemente con Rojo y negro de Stendhal y puedo decirme ¡qué tostón!
Para terminar: suscribo lo dicho por J. Cortázar, de principio a fin.
Gracias Ivanovich.
Recuento 2024
Ayer: Grito nocturno. Borja González
Los asesinos del emperador. Santiago Posteguillo
Hoy: Hoy es un buen día para morir. Colo
Soberbia. William Somerset Maugham
Avatar de Usuario
moranis
Foroadicto
Mensajes: 3356
Registrado: 15 Ene 2007 17:24
Ubicación: Valentia

Mensaje por moranis »

Me parezco demasiado a Gretogarbo :roll: , el consuelo esta vez es que también me parezco a Cortázar...

Siempre me han gustado casi todos los libros que he leído, y quizá se deba a esa actitud de esperanza con la que los abordo. Soy también de los que frente al autor, no tengo más que palabras de admiración y muchas veces de gratitud, por haber escrito lo que yo quería leer o haber sido capaz de escribir.

Últimanente me he enfrentado a algún libro con otras actitides, y eso se nota a la hora de degustarlo, desde luego no lo recomiendo. Si lees por entretenimiento no puede haber otra actitud hacia un libro virgen...
1
Avatar de Usuario
Ivanovich
Foroadicto
Mensajes: 3168
Registrado: 18 Oct 2007 12:21

Mensaje por Ivanovich »

Por la relación que puede tener con este hilo ....

Seguro que muchos habéis leido un libro de Daniel Pennac que se titula Como una novela (Anagrama, colección Argumentos, los marrones), un ensayo breve sobre el placer de leer. He visto que en el foro hay abierto un hilo (con una respuesta), pero no se como incluir aquí el link.

Al principio parece un libro un poco simplón e ingenuo, pero luego va creciendo y a mi me gustó mucho (lo leí hace ya tiempo). En uno de los capítulos Pennac incluye un decáloco con los "derechos imprescindibles del lector", que en su opinión son los siguientes (seguro que en internet hay alguna página que contiene el texto completo del capítulo, merece la pena echarle un vistazo). [nota: si esto ya está incluido en algún otro hilo, que es muy posible, pido disculpas por adelantado]

1. El derecho a no leer.
2. El derecho a saltarnos las páginas.
3. El derecho a no terminar un libro.
4. El derecho a releer.
5. El derecho a leer cualquier cosa.
6. El derecho al bovarismo (enfermedad de transmisión textual).
7. El derecho a leer en cualquier sitio.
8. El derecho a hojear.
9. El derecho a leer en voz alta.
10. El derecho a callarnos.

Abrazos,

Iván
Avatar de Usuario
madison
La dama misteriosa
Mensajes: 41160
Registrado: 15 May 2005 21:51

Mensaje por madison »

Que reseña mas genial Ivan :wink:
Avatar de Usuario
Lorena_uk
Lector voraz
Mensajes: 134
Registrado: 13 Oct 2007 19:17
Ubicación: Madrid
Contactar:

Mensaje por Lorena_uk »

La verdad que tiene bastante razón....sin duda tenemos todos esos derechos como lectores, que nos hemos ganado con el mero gesto de abrir el libro.
1
Avatar de Usuario
lorelai lee
Me estoy empezando a viciar
Mensajes: 410
Registrado: 04 Nov 2007 02:13
Ubicación: Irruptora en Jijo

Mensaje por lorelai lee »

Ivan el tema me parece muy interesante.

Yo me acerco a los libros siempre con una gran ilusión, llena de esperanzas de descubrir un mundo nuevo capaz de fascinarme. De hecho mi relación con ellos empieza en el mismo momento de la compra, cuando paso horas en la librería mirando los títulos, leyendo las contraportadas o resúmenes, escogiendo con cuidado según mi estado de ánimo, aceptando el reto de empezar a leer a un autor nuevo o retomando la lectura de alguno de los más queridos. Son como pequeños regalos que me hago a mí misma, y sonrío cuando encuentro un libro que hacia tiempo que deseaba leer y los cojo con cariño. Otras veces me reto a mí misma a empezar a leer alguna obra que preveo complicada y me siento audaz y valiente. Sé que voy a empezar una nueva aventura.

Cuando llego a casa voy empezándolos según mi estado de ánimo. Con el tiempo he aprendido que hay momentos para cada tipo de libro, no desdeño ninguno porque todos pueden aportarme algo pero desde luego hay autores o temáticas por las que siento mucha más atracción. Sí estoy en una fase algo baja voy a las apuestas seguras, cuando estoy en plena época voraz ataco nuevos autores, temáticas diferentes e incluso me lanzo a leer obras de divulgación o ensayo, que reconozco es lo que me da más pereza. Pero hay momentos para Austen como hay momentos para Auster, no todos los días tengo ganas de leer a Kundera ni a Marías pero un Asimov o un Heinlein pueden sacarme del atolladero de un libro demasiado árido. A veces simultaneo dos libros según el estado de ánimo o me pongo a hojear todos los libros que están a la espera de ser para impregnarme de esa ilusión anticipada.

Antes era incapaz de dejar un libro inacabado...ahora sé que, para mí, es mejor dejarlos, a veces para nunca más retomarlos y otras veces para releerlos en un momento más idóneo. Mi impulso como lectora es intentar acabar todos los libros y antes lo hacía pero con la edad me he vuelto más perezosa y hay libros que acaban eternamente inacabados en mi biblioteca.

Pero desde luego me reconozco en las palabras de Córtazar, porque un nuevo libro siempre es un lienzo en blanco lleno de esperanzas que no siempre se cumplen. Cuando eso pasa me siento decepcionada y triste y según la profundidad de la decepción le doy nueva oportunidad al autor o no. Pero no los juzgo simplemente considero que hay libros que no son para mí y el tiempo es finito así que intento centrarme en los libros que sí cumplen mis expectativas e incluso las superan produciéndome una sensación al acabarlos difícil de olvidar.
1
Avatar de Usuario
Andromeda
Vivo aquí
Mensajes: 7893
Registrado: 18 Oct 2007 20:56
Ubicación: Al otro lado del mar
Contactar:

Mensaje por Andromeda »

Encontré esta cita sobre la calidad de los libros y la existencia de buenas o malas novelas (Pennac).
…digamos que existe lo que llamaré una ‘literatura industrial’ que se contenta con reproducir hasta la saciedad los mismos tipos de relatos, despacha estereotipos a granel, comercia con buenos sentimientos y sensaciones fuertes, se lanza sobre todos los pretextos ofrecidos por la actualidad para parir una ficción de circunstancias, se entrega a ‘estudios de mercado’ para vender, según la ‘coyuntura’, tal o cual tipo de ‘producto’ que se supone excita a tal o cual categoría de lectores.
Sin lugar a dudas malas novelas.
¿Por qué? Porque no dependen de la creación sino de la reproducción de ‘formas’ preestablecidas, porque son una empresa de simplificación (es decir, de mentira), cuando la novela es arte de la verdad y (es decir, de complejidad), porque al apelar a nuestro automatismo adormecen nuestra curiosidad, y finalmente, y sobre todo, porque el autor no se encuentra en ellas, así como tampoco la realidad que pretende describirnos.
En suma, una literatura del “prêt a disfrutar”, hecha en moldes y que querría meternos en un molde.
No creamos que estas idioteces son un fenómeno reciente, vinculado a la industrialización del libro. En absoluto. La explotación de lo sensacional, de la obrita ingeniosa, del estremecimiento fácil en una frase sin autor no es cosa de ayer. Por citar únicamente dos ejemplos, tanto la novela de caballerías como, mucho tiempo después, el romanticismo se empantanaron ahí. Y como no hay mal que por bien no venga, la reacción a esta literatura desviada nos dio dos de las más hermosas novelas del mundo: “Don Quijote” y “Madame Bovary”.
Así pues, hay ‘buenas’ y ‘malas’ novelas.
Las más de las veces comenzamos a tropezarnos en nuestro camino con las segundas […]. Durante cierto tiempo leemos indiscriminadamente las buenas y las malas […]. Y después, cierto día, sin darnos cuenta, nuestros deseos nos llevan a la frecuentación de los buenos. Buscamos escritores, buscamos escrituras. La mera anécdota ya no nos basta. Ha llegado el momento de que pidamos a la novela algo más que la satisfacción inmediata y exclusiva de nuestras sensaciones.
Imagen
Responder