CV6- El paso de un valiente - Prófugo (3°)

[kassiopea]

El paso de un valiente

Su vida ha dejado de ser próspera. Sus sueños han quedado aparcados, encerrados. Desea una vida diferente. Analiza y concluye que es necesario arriesgar y trazar un nuevo mapa, con estrategias diferentes a las habituales y ponerlas en marcha.

Cansado de sentirse atado, sin libertad, considera abrir sus alas y partir. Se siente anclado y estancado. Lo que hace años le causaba dicha y motivación, hoy en día le produce dolor y tristeza. ¡Cuánto ha cambiado todo! Él es el primero en verse totalmente diferente. Los años pasan y su mentalidad ya no es la misma, como tampoco su entorno.

Atrás quedarán familiares, amigos y recuerdos. Su decisión ha sido la de irse a lo desconocido. Se siente capaz y fuerte, lo cual no deja de generarle dudas, nervios y miedo, mucho miedo.

Anhela con volver a sentirse humano y poder crecer. Su meta es la de triunfar, abrirse un camino en donde el abanico de posibilidades permanezca siempre abierto. Sueña con formar un hogar, una familia y poder ofrecerle lo mejor que sea capaz de dar. Hoy siente que volverá a nacer y, por ello, marca con tinta roja esta fecha en el calendario: 31 de diciembre.

Lleva días, semanas enteras pensando y calculando. Ya tiene un plan, una ruta a seguir. Prefiere no comentar nada. No desea poner a nadie nervioso ni hacerlos sufrir aún más. Bastante tienen con luchar otro día más sin tener, en reiteradas ocasiones, con que llenar sus estómagos vacíos. Además, ¿por qué decirlo? Simplemente es su decisión y deben respetarla. Teme que alguien se entere y le convenza de lo contrario. Siempre ha sido de los que consideran que las cosas hay que hacerlas en secreto para que salgan mejor. Luego se verá si la sorpresa que produce es dulce o amarga.

Ha llegado el momento de partir. Intenta no retroceder para no llorar ni perder un ápice de valentía, pero la tentación es muy grande y echa la vista atrás por última vez. De ahora en adelante solo mirará hacia al frente, siempre con cautela pero con ilusión y optimismo. No hay espacio para las dudas o el arrepentimiento.

No tiene acreditación ni papeles, tampoco mucho dinero. Lo que llegó a poseer se le ha esfumado en intentar lo imposible: no escapar de sus raíces. Pero esas raíces, que antes eran firmes y largas, hoy ya no tienen las dimensiones ni fuerzas suficientes para mantenerle en pie. Ha sentido como se las han ido podando poco a poco hasta irse secando. Sabe que si no encuentra una solución inmediata terminará cayendo y la sociedad hará fuego con sus restos.

Corre, huye. A cuestas solo lleva una pequeña mochila con una gruesa y larga soga, ganchos, algunas prendas de ropa y ciertas fotos de valor incalculable. Hace un alto y se esconde tras un árbol. Afina la vista y el oído. Aún a lo lejos, vislumbra y calcula el objetivo a superar. Es de noche y cada suspiro se oye como si fuese un terrible huracán. Suda y respira entrecortado. Contempla sus manos cubiertas por unos desgastados guantes de cuero que le ayudarán en la escalada. Sabe que si logra atravesar ese muro sin ser visto será un hombre nuevo, sí, un hombre libre. No contempla nada más. Es consciente de que el miedo controlado es su mejor arma y su mentalidad positiva su mejor estrategia.

Decide rezar. Es una persona creyente. Ora a su señor como también a sus difuntos. Les pide llegar vivo y sano. Besa su crucifijo. Se siente valioso y de buen corazón. Se da ánimos asegurando que seres como él estarán protegidos por lo divino ante cualquier situación límite. La maldad y el dolor nunca lograrán estar por encima de la bondad y la felicidad.

Considera, por fin, que es el momento oportuno. Repasa mentalmente su plan y se arma de valor. Vigila hacia los lados, No hay moros en la costa. Aspira con fuerza mucho aire hasta llenar sus pulmones, cierra los ojos y, ahora sí, empieza a correr de nuevo con todas sus fuerzas. Se deshace de innumerables obstáculos hasta toparse con el gran muro. Empieza a escalarlo con la ayuda de la inmensa soga y los respectivos ganchos. Una luz blanca merodea y se mueve alrededor suyo. A su vez, una bocina estruendosa intenta penetrar y doblegar sus cinco sentidos. Suda a mares. Las pulsaciones son incontrolables. Ya no hay vuelta atrás. A pesar de todo se siente fuerte, sí, como también extremadamente motivado y decidido. Se sabe capaz de superarlo.

Cuando piensa que está a un paso de ver su nuevo mundo y que ha logrado su cometido, su vista empieza a tornarse borrosa hasta apagarse. Por su mente aparece un collage de imágenes en tiempo record que le hace recordar su infancia y juventud, sus buenos y malos momentos, su familia y amigos, su novia de toda la vida. Una ráfaga de centelleantes plomos diminutos ha atravesado el viento y algo más. Un dolor punzante en su pecho y un frío polar excavan cada centímetro de su cuerpo. Luego, poco a poco, el dolor empieza a amainar dando paso al comienzo de un oscuro sueño.

Ha vuelto a despertar. No sabe dónde se encuentra. Oye voces que logra reconocer. Lo han devuelto a su punto de partida. Sus esperanzas han quedado aparcadas. Reconoce que tendrá que afrontar el resto de sus días como uno más entre todos ellos. Impotente y aturdido observa y toca su cicatriz. Se sabe perdedor. De ahora en adelante, su meta ya no será la de labrarse un futuro victorioso, sino la de sobrevivir y disfrutar de esos momentos en que la vida le conceda una pequeña tregua. Su única misión: terminar sus días, en compañía de los suyos, de la manera más digna y normal, apreciando el valor de amar a su tierra que lo vio nacer y crecer. Willy ya ha asumido que no volverá a creer, ni mucho menos, a soñar.

[zilum]

Es un relato que me ha gustado y me ha generado emociones, sobre todo a partir de cuando nos desvelas que el protagonista no tiene papeles, momento en el que para mí cobra sentido la historia. Tal vez el personaje te ha quedado un poco genérico y podrías haberle asignado unas circunstancias más adversas y variadas, entrando más en detalle, para lograr con ello que el personaje se vuelva más cercano al lector y viva su drama.

Un final con la muerte del prota sería más impactante, pero no por ello es menos dramático el final que has elegido: la resignación. Sin embargo, también dejas un mensaje optimista y positivo, pues tiene a gente a la que ama y eso no es poco, ni mucho menos. Puede que lo que le ocurrió lo sirva para apreciarlo más y a partir de ahí recuperar la ilusión por la vida.

Mucha suerte!!

[Yuyu]

Muy bonito, me ha gustado, transmites. También te digo que una vez escrito lo mismo te hubiera dado conseguir que llegara al otro lado o que no y nos hubieras dado un respiro, pero querías el relato sin final feliz y es tu relato pero "t´odio".

[Edgardo Benitez]

Es el primer texto que leo y me llevo una buena sorpresa. Me agrada encontrar una historia como la de tantos que buscan la libertad y el progreso económico fuera de la tierra que lo vio nacer.
El final es demasiado bondadoso. Son pocos los que sobreviven a un viaje de esa envergadura.
Éxitos

[Seltima]

Me ha gustado más que los demás, sobre todo por cómo se ha narrado. Trasmite mucho con frases sencillas en un texto breve, y esto es muy muy difícil de conseguir.

[Sinkim]

Me ha gustado, una historia dura y muy acorde con los tiempos que vivimos, me parece que está muy bien escrito, se nota que hay una buena pluma detrás

[Isma]

Oye, ¿y por qué no dejar claro que el protagonista es un emigrante? Tengo la impresión de que ese hecho se oculta y no hay motivo. Un relato no necesita la sorpresa. Aún nos queda la intriga de saber si lo conseguirá o no, de lo que siente, del trayecto. Por otro lado, sobre todo al principio, se redunda mucho en lo mismo. Que está atado, anclado, estancado, encerrado, sin libertad...

Sin embargo, coincido con los compis en que transmite mucho. Es lo que pasa cuando el autor cree en lo que está escribiendo. Que se empapa de la atmósfera y de la sensibilidad necesaria para transmitirlo. El lector lo nota.

[Seltima]

En mi opinión no lo oculta, sino que lo muestra... la mayoría lo hemos deducido por lo que ha contado sin que haya dicho que es emigrante.

[prófugo]

Me ha gustado...he logrado identificarme con el personaje y sentirlo real.

Es un trabajo que quizás no sea muy complejo..que no diga mucho...pero que lo que dice transmite sensaciones, pensamientos, deseos, angustias...tiene alma y fluye.

Lástima que el final no fuese el deseado por Willy...pero quién sabe...quizás el destino le ha dado una nueva oportunidad...ha vuelto a nacer...y le ha dejado claro que quizás ese sueño no iba a ser lo mejor para él.

[Gavalia]

Tema polémico donde los haya. Migrar, mejorar, sobrevivir. El relato está bien escrito y desde el primer momento sabes de que va la historia. No es que sorprenda pero si te pones en la piel del sujeto te emocionas. El top manta le echará de menos, no tanto así el país que pudiera recibirlo. Puta vida.
Suerte

[Megan]

Autor/a.
Abordaste un tema muy complejo y lo hiciste muy bien.
El texto está excelentemente bien narrado.
Me hizo estremecer, porque es una cruel realidad actual.
Te felicito, supiste ponerle esa cuota de tristeza al protagonista,
que da ganas de llorar.
Sin duda vas a estar muy alto en mi podio.

Mucha suerte y gracias por compartirlo

[raumat]

Excelente retrato de... un emigrante subsahariano que intenta llegar a España, saltando la valla de Ceuta, por ejemplo...
Una historia muy emotiva, también.
Es terrible el drama de la inmigración, la verdad.
Gracias al autor por compartirlo y suerte en el concurso.

[Ratpenat]

Este está muy bien. Me ha gustado.

[Onomatopeya]

Un buen relato de mucha actualidad. Me gusta que no entre en grandes personalismos, pues es una historia aplicable a muchos. La forma de escribirlo, en frases cortas, directas y en presente creo que le va muy bien. Enhorabuena

[noramu]

Esta historia me deja con muchos interrogantes. Pero supongo que es la intención del autor/a que esté abierta a una idea muy genérica: el intento de liberarse. De donde sea. En primera lectura, quizá un tanto apresurada, pensé que de donde quería huir era de una cárcel en la que deja atrás a su pasado y su familia. Luego ya he visto que era una huída de una tierra sin futuro. Pero, en definitiva, no es tan diferente una cosa de la otra. Lo que siente el protagonista es un anhelo de libertad para poder ser él mismo. Y en su intento de huída frustrada deja atrás su fe, su rebeldía y se resigna a una suerte que le "obliga" a disfrutar de pequeños momentos de felicidad cotidiana.
Me ha dejado un poco liada que llevara un crucifijo y que antes hubiera vivido en prosperidad.
Espero con curiosidad las explicaciones del creador/a.

Edito, el nombre, Willy, que aparece solo al final, ¿debería darme una explicación a alguna de mis dudas y no he sabido reconocerlo?