CP XIII - Como flotando - Berlín (3° Jurado)

[Berlín]

Un día hablando con nuestro amigo cárabo me dijo que él suele tener madurando una historia en su cabeza durante mucho tiempo, mucho, y que hasta que no la tiene encajada de los pies a la cabeza no la plasma en papel. Yo envidio mucho a todo aquel que funciona así, porque me parece el modo más sensato y correcto de escribir. No como yo, que suelo comenzar la casa por el tejado. He comenzado a veces a escribir por el título. No es el modo, ya lo sé, pero a estas alturas ya no sé si sabré cambiarlo. Luego esta forma mía de escribir se resiente, porque no tiene la coherencia necesaria, ni el cuerpo y el lector lo nota. A estas alturas ya me he dado cuenta de que no solo se necesita la poesía para escribir una historia, el cuento necesita su encabezamiento, su nudo y su desenlace para llegar al lector, porque el lector no vive en mi cabeza y no ve lo que yo veo. Cuando Abbul Abbas mira la constelación de Berenice no solo está mirando estrellas, ve la melena de Berenice, que es así como se la conoce y se acuerda de Sinergia, pero esa constelación no es fácil de ver a simple vista y ahí cualquier lector más documentado me hubiera metido otro zasca. Eso me falta y lo sé. Salir de mi cabeza y meterme en la del lector. En cuanto a la fecha de la muerte de Paracelso, Meiko estuvo muy acertada y se lo agradezco. El caso es que anoté que debía comprobarla y no me acordé. Bien por ella, avezada y lista muchacha.
Terminé de leer Bomarzo en navidad. Sí Mario, la he leído y me ha parecido grandiosa. Se me quedaron miles de imágenes de esa obra de arte que no se iban. ¿Dónde estaba el negro Abul que no apareció más después de que el duque jorobado lo mandara a matar a su hermano? El duque, un hombre de gustos muy variados lo refiere muchas veces y me encantó como personaje. El elefante. Mientras leía la novela me fui a investigar un poco sobre ese Bosque de los monstruos sito en Viterbo y me encontré con la imagen de un elefante de piedra, monstruoso, enorme, que reduce o ataca a un guerrero. Ya, es muy loco y rebuscado, ya sé que es raro de entender, pero yo vi a Abbul aplastado por esa mole. Y ahí quise comenzar con el cuento, porque la imagen me encantó. Es el único papel del elefante, morir de viejo que es como deben morir los animales y en su caída aplastar al negro para que cuente su historia. El paquidermo no tiene ningún otro papel porque jamás lo hubiera puesto a actuar. Es el marco de la foto. El nombre de Sinergia, si Kass, lo elegí con cuidado.
En cuanto al final, me dio muchos quebraderos de cabeza, puede que por eso se vea precipitado, es que lo retoqué mil veces. En un principio quise que Abbul se marchara del circo, en la madrugada, sin despedirse de Sinergia, dada la imposibilidad de ese amor, pero luego recordé esa escena de Los inmortales en la que Sean Connery le dice a Cristopher Lambert que le hará daño a la chica si se casa con ella pero él no le hace caso porque está muy enamorado y la sigue viendo preciosa hasta el final, hasta su muerte. Recuerdo cuánto me conmovió esa historia (y con la banda sonora de Queen detrás) así que lo dejé en un roce de dedos que no era solo eso sino una promesa de más charlas en más madrugadas azules, esa hora azul, como la de Meiko.
Os doy la razón en cuanto a la fragilidad del cuento que por momentos no se sostiene, pero cómo se va a sostener saliendo de mi cabeza desordenada.

Gracias a todos por sufrirme.

[prófugo]

Muchas felicidades, gatita.

Siempre estás en lo más alto..y eso que eres bajita

Un beso..nunca faltes

[Berlín]

Muchas felicidades, gatita.

Siempre estás en lo más alto..y eso que eres bajita

Un beso..nunca faltes

No sabes que espinita la de no darte más puntos, amigo, lo digo en serio, pero mi corazón decía una cosa y mi honestidad gritaba que no, que la lista era la correcta, aunque me perjudique. En esto tampoco cambiaré jajaja

Iremos luchando juntos en esta ardua tarea de la escritura ¿vale? Mira, un dia yo haré un relato que no será frágil y tú harás uno que conseguirá que me parpadeen los tatuajes de alegría.

Un abrazo despachurrador.

[prófugo]

Berlín..a ver...


Hay un par de cosas que quiero aclarar...quizás este no sea el lugar indicado pero..aquí voy:

En este concurso no tenía ni idea de qué escribir, pero después de dos concursos sin participar, tenía ganas de volver a compartir con vosotros. Ya ves lo que escribí...no se puede comparar en nada con lo de vosotros. Demasiados puntos conseguí y agradezco mucho a los que me los dieron...pero yo ya sabía a lo que iba y las consecuencias que tendría.

Por otro lado, me encanta escribir, es cierto...pero también es verdad que no lo vivo tanto como la mayoría de vosotros. Yo tengo otras aficiones que me llenan más y en las que soy más competitivo. Además, no puedo compararme contigo, con Nini, Isma, Tolo, Meiko, Iliria etc...no tengo vuestras tablas, conocimientos, destreza, dedicación e imaginación. Solo tengo ilusión, deseos de siempre estar con vosotros e intentar escribir algo digno.

Bueno...ya me desahogué

Un besazo y enhorabuena!

[Isma]

Felicidades por ese podio, gata. A ti también te lo he dicho todo. Si no fuera por ti, quizás no habría participado. Te late el corazón muy fuerte y ese latido nos motiva a todos.

[Meiko]

Berlín Muchas gracias por contarnos cosillas de tu relato, lo de la melena de Berenice lo pensé pero creí que me equivocaba al suponer que por eso pensaba en Sinergia.

Que no me hagas ni caso, que está muy bien eso de meterse en la cabeza del lector pero ante todo tenemos que volcarnos nosotros en nuestras criaturas, y eso a veces es de un modo y otras de otro, y a veces conectamos y otras no, qué se le va a hacer. Pero ya sabes, donde el corazón te lleve, como a Abbul

Yo tampoco sé escribir de otro modo

En fin, ya me has enamorado otras veces con tus historias, y esta no me pasaste desapercibida tampoco. Siempre aprendo alguna cosa de ti, y siempre eres en cualquier caso mil veces más original de lo que yo seré

[Berlín]

Berlín Muchas gracias por contarnos cosillas de tu relato, lo de la melena de Berenice lo pensé pero creí que me equivocaba al suponer que por eso pensaba en Sinergia.

Que no me hagas ni caso, que está muy bien eso de meterse en la cabeza del lector pero ante todo tenemos que volcarnos nosotros en nuestras criaturas, y eso a veces es de un modo y otras de otro, y a veces conectamos y otras no, qué se le va a hacer. Pero ya sabes, donde el corazón te lleve, como a Abbul

Yo tampoco sé escribir de otro modo

En fin, ya me has enamorado otras veces con tus historias, y esta no me pasaste desapercibida tampoco. Siempre aprendo alguna cosa de ti, y siempre eres en cualquier caso mil veces más original de lo que yo seré

Que bueno que te fijaras en la fecha, Meiko. He estado investigando y Abul entró a ser paje del duque jorobado de Bomarzo cuando este último tenia unos catorce o quince años más o menos y como nació en 1512, pues habría que retocar la primera fecha a 1527. Y en cuanto a Paracelso, creo que anduvo por Venecia en 1532 o así.
Lo anoto aquí, que se me olvida.

[lunaroja]

Fuiste uno de mis relatos preferidos durante este tiempo! Qué alegría saber que es tuyo mi Berliniña!
Como siempre es un placer leerte y disfrutar de cada frase que escribes, siempre con tu buen hacer.
Una gozada.

[Megan]

Berlinesa querida, como te dije antes de saber que era tuyo, es el mejor escrito, me maravilló como uniste esas palabras y lograste algo tan bello. Pero... no te voté, ¿sabés por qué? también te lo dije: no te entendí, y hasta te aclaré de alguna forma, que debía ser tan excelente que mis neuronas no daban para eso y es todo.
Una maravilla que no voté pero que me encantó aún sin entenderlo, ¡gracias por estar genia y felicitaciones por ese merecido premio!

[Tolomew Dewhust]

Ya te dije de todo antes de saber que era tuyo, ¿verdad?

Pues entonces nada más.

Solo que, me gustaría que por mp me dijeras cómo estás, . Si en unos días no sé nada de ti al respecto, te mando yo uno y charlamos.

[Paraná]

¡Joder, Berlín! Aun si lo hubiera leído antes de conocer la autoría te habría visto, despejada de cualquier duda, escondida ahí tras el telón del circo. Ese amor -y ese dominio- por el realismo mágico te delata. El Gabo y Manucho Mujica, acuclillados uno en cada uno de tus hombros, han andado susurrándote cosas al oído (mis dos amados, mis dos ingratos que no me visitan a mí como los visito yo a ellos). Y el resultado no podía ser otro sino este relato como un estallido del caleidoscopio. Brillante. Tus monstruos encajan en Viterbo a la perfección; casi esperaba que Abbul los asociara, estupefacto, con los otros. Esos de piedra en el jardín dantesco de su amo, azarosamente cercano. Aunque la geografía es raramente azarosa.
Lo único que me deja vacilante, gata de mi alma, es el final. Creo que le ha faltado lustre; me ha dado la impresión de no estar bajo la misma luz de lo que lo precede. O serán ñañas de mis quisquillosidades. Chi lo sa...

P/D: Me voy, recién ahora, a leer los comentarios de los cumpis sobre tu criatura. Como le dije a Isma, he preferido leer sin influencias estos que me habían quedado pendientes cuando me enfermé.

[Berlín]

¡Joder, Berlín! Aun si lo hubiera leído antes de conocer la autoría te habría visto, despejada de cualquier duda, escondida ahí tras el telón del circo. Ese amor -y ese dominio- por el realismo mágico te delata. El Gabo y Manucho Mujica, acuclillados uno en cada uno de tus hombros, han andado susurrándote cosas al oído (mis dos amados, mis dos ingratos que no me visitan a mí como los visito yo a ellos). Y el resultado no podía ser otro sino este relato como un estallido del caleidoscopio. Brillante. Tus monstruos encajan en Viterbo a la perfección; casi esperaba que Abbul los asociara, estupefacto, con los otros. Esos de piedra en el jardín dantesco de su amo, azarosamente cercano. Aunque la geografía es raramente azarosa.
Lo único que me deja vacilante, gata de mi alma, es el final. Creo que le ha faltado lustre; me ha dado la impresión de no estar bajo la misma luz de lo que lo precede. O serán ñañas de mis quisquillosidades. Chi lo sa...

P/D: Me voy, recién ahora, a leer los comentarios de los cumpis sobre tu criatura. Como le dije a Isma, he preferido leer sin influencias estos que me habían quedado pendientes cuando me enfermé.

¡Ay, tucu de mi vida! Tu comentario era para mi el más esperado y ansiado, ya que tú fuiste la que introdujo Bomarzo en mis venas. Creo que he salido mucho más loca de su lectura, de ese modo mágico de narrar la historia, de ese vocabulario excelso. No hay manera de sacarme de la cabeza ese momento en que el David de Miguel Angel fue transportado por las calles de Florencia, o ese otro, casi al final, de la construcción del Bosque Sacro, uno a uno los monstruos de piedra fueron tomando vida, inmortalizando con su piedra, el interior del corazón del duque giboso, ese duque contrahecho, sensible, torturado, de las manos de alabastro y el rostro hermoso. Diana Orsini, su abuela protectora, los hermanos asesinados, Pantasilea la cortesana del cabello de fuego, Nuncia, la gran mujer que lo estrenó como hombre con sus carnes inabarcables, el elefante y Abul, su sirviente negro, al que mandó para asesinar a su hermano y no volvió más, la arpía con piernas de ofidio, que luego se convirtió para mi en Sinergia, de algún modo; el bifronte Jano con su rostro medio masculino y femenino, inseparables, que mostraban la dualidad de Eros, tan importante y definitorio del duque.

No me cansaré de darte las gracias, tucu. En cuanto al final del relato, sí, supongo que queda algo deslucido en cuanto al resto, me faltó espacio -una palabra más y me salgo de las seis páginas- y supongo que me faltó maestría y pericia para sopesar qué borrar o cómo gestionar el desenlace de esos impares.

Gracias, Paraná.

[Paraná]

Gracias a vos, gata mía. Por todo.

[jilguero]

Me ha gustado mucho tu relato. Un gustazo leerlo .

Me ha traído ecos de tus Palabras de amor, sencillas y tiernas, que ya sabes también me gustó mucho. Pero este es más universal al no estar construido con kekos. También allí teníamos una mujer de piernas infinitas, que deduzco es el súmmum del atractivo femenino para ti (o para ellos, según tú) . Y me gustan los distintos guiños a mitología, literatura, etc. Esa mano de Sinergia, la mujer serpiente, ofreciéndole a él una jugosa manzana para que coma "del fruto prohibido"; o ese duque de Bomarzo que me ha hecho ver, aunque no esté en tu texto, la llegada de la imagen gigantesca de David a Loggia della Signoria; o descubrir que en los ojos de Sinergia hay constelaciones que hablan de su origen tal como hay en los ojos de los gorriones nacidos en Orión .

Sí, me ha gustado mucho y ha sido un placer leerlo. Si me pongo el botón critica "on", te diría que le queda a uno la vaga sensación de que nos has regalado un bonito árbol navideño del que cuelgan multitud de bolas y adornos que nos dejan "como flotando" y que, justo por eso, el árbol que hay debajo se desdibuja un poco. Pero ¿a quién le importa no ver bien la estructura de un árbol de Navidad por haberse quedado embobado con sus adornos ? A mí, desde luego, no .

Por cierto, el arranque me ha encantado y creí que iba a tener otro final, que iba a terminar tal cual empezaba. Me refiero a qué pensé que Abbul era inmortal porque veía venir la muerte. Pero que esta vez, con el elefante, no la vio venir y, tras caerle encima y recordar todo lo que nos cuentas, creí que se iban a convertir en compañeros inseparables e iban a poner rumbo juntos hacia ese lugar que hay, más allá de las estrellas, para los animales dormidos . Con ese final a este jilguero lo habrías dejando todavía más "como flotando". Pero con el elegido por ti seguramente habrás dejado flotando a mucha más gente, que ya sabes que no hay nada como el magnetismo irresistible de una mujer.

Lo dicho, un placer .

[Ororo]

A ti te dejo para el final.