El problema viene cuando, como estamos viendo en este mismo hilo (pero tenemos evidencias en muchos otros sitios), la gente se toma lo que evidentemente es propaganda como si fuese documento, y se traga todo lo que la serie cuenta como si se tratara de un estudio científico o un libro de Historia.
Efectivamente, en la serie hay diversas mentiras que se sueltan con el mismo tono y forma que si fueran evidencias contrastadas, en la línea de "basado en hechos reales" que recubre todo un producto que, como no podía ser de otra forma en una gran producción anglosajona, tiene entre sus principales preocupaciones demonizar el socialismo.
La serie a mí me gustó bastante, por cierto. Pero sin perder nunca de vista que es una ficción, no un documental.