Me ha fascinado. Lo mejor que he leído en mucho tiempo. Cosa rara, un éxito de ventas que coincide con su calidad literaria, creo yo. Señal de que si al público lector se le ofrece algo en condiciones, responde.
Y eso que lo he leído un tanto de rebote. Me llamó la atención que se hiciera una versión en cómic que se presentó a finales de 2016 –me enteré pero no acudí a la presentación, aún no la he leído- y a la vista de que las reseñas en blogs eran inmejorables me puse con el libro original.
Una historia aparentemente sencilla se aprovecha para reflexionar con infinidad de cosas incluido Dios. Y sin la menor acritud, cosa que da gusto. Hay infinidad de sugerencias, como cuando
| el chaval es acosado en el torreón igual que él hace con los conejos usando hurones o el viejo con la rata. |
La redacción, perfecta. A veces se abusa de términos rurales, pero bien es cierto que algo aprendes. No tenía ni idea de que los “rayos” en las cabezas de las imágenes se llamaban potencias y que tienen su historia.
Lo de que nunca conozcamos el nombre de los personajes va parejo con la dureza del terruño y de la violencia que siempre sobrevuela el relato. Todo es bastante español aunque no se cita un solo lugar de nuestra geografía, ni hay datos para ubicarlo en el tiempo. Muy nuestro ese fatalismo, lo del sentido de culpa asociado al pecado o al “algo habrás hecho”.
Me gustan estas historias de supervivencia. El tener que llegar a algún sitio sólo con lo puesto y apañártelas. Vaya dieta que siguen los protagonistas. El crío enseguida reflexiona cuando ve el molino oxidado. Vemos que es listillo. Que un buen maestro hubiera podido sacarle partido. También sabemos casi al comienzo cuál será su futuro
| prolongándose la miseria. |
No sé si el autor lo propone como metáfora de lo que espera a los jóvenes de hoy, tan desalentados. La novela nunca es pesimista. Hay lo que hay.
Se tienen innumerables reseñas del libro en Internet así que no es cuestión de repetirse. Cuántos libros se citan en las historias de la Literatura Española muy inferiores a este.
Blog
Entrevistas
Revista
Fotos
