- Ingredientes:
- Unas cuatro tazas de harina de trigo normal
- Unos dos vasos de agua.
- 25 gramos de levadura fresca.
- Una cebolla
- Aceitunas negras sin hueso.
- Sal
- Aceite de oliva
- Orégano
- Preparación:
- Templamos el agua en el microondas y disolvemos la levadura en ella.
- En un recipiente, mezclamos la harina con una cucharada de sal y añadimos la levadura. Tiene que quedar una masa, pero sin que llegue a formar bola. No hace falta amasar mucho, con que queden todos los ingredientes bien mezclados es suficiente.
- Cortamos la cebolla en juliana y las aceitunas en rodajas y las añadimos a la masa, reservando unas cuantas aceitunas para después.
- Dejamos que la levadura haga efecto y pasamos la masa a un recipiente para horno que habremos cubierto con papel de horno y untado con un poco de aceite de oliva. Nos tiene que quedar con un grosor como de dos dedos, más o menos.
- Añadimos por encima unas rodajas de aceituna, un chorrito de aceite y orégano.
- Dejamos que repose una media hora o así y horneamos a unos 200 grados. Yo la tuve como veinte minutos a esa temperatura y luego la subí para que se tostara un poco la corteza. Al final estuvo como una media hora, pero mi horno es regulero, así que no os fiéis de esto.
Otro día probaré con otros ingredientes porque es facilísima de hacer. Lo único malo que tiene es que hay que esperar a que la masa fermente.