Arthur Schopenhauer

[Josek]

Arthur Schopenhauer
(22 de febrero de 1788, Danzig, Gdańsk, República de las Dos Naciones — 21 de septiembre de 1860, Fráncfort del Meno, Alemania)



Filósofo alemán. Su filosofía, concebida esencialmente como un "pensar hasta el final" la filosofía de Kant, se siente también deudora de Platón y Spinoza, sirviendo además como puente con la filosofía oriental, en especial con el budismo e hinduismo. En su obra tardía, a partir de 1836, presenta su filosofía, además, en abierta polémica contra los desarrollos metafísicos post-kantianos de sus contemporáneos, y especialmente contra Hegel, lo que contribuyó en no escasa medida a la consideración de su pensamiento como una filosofía "antihegeliana".

Su trabajo más famoso, Die Welt als Wille und Vorstellung (El mundo como voluntad y representación), representa desde el punto de vista literario una obra maestra de la lengua alemana de todas las épocas. Supone además una de las cumbres del idealismo occidental, y el pesimismo profundo (que no profundo pesimismo) que destila perdura en la obra de escritores y pensadores de los siglos XIX y XX, de la talla de Sigmund Freud, Friedrich Nietzsche, Thomas Mann, Émile Cioran o Jorge Luis Borges, entre otros muchos.

Wikipedia

Obras - Wikipedia en alemán
Publicaciones en vida

• Sobre la cuádruple raíz del principio de razón suficiente (1813)
  Sobre la visión y los colores (Ueber das Sehen und die Farben) (1816)
  El mundo como voluntad y representación (1819; realmente diciembre de 1818)
  Sobre la voluntad en la naturaleza (Ueber den Willen in der Natur) (1836)
  Los dos problemas fundamentales de la ética (Die beiden Grundprobleme der Ethik, 1841) Incluye las memorias, Sobre la libertad de la voluntad (originalmente editado aparte en Noruega en 1840) y Sobre el fundamento de la moral (1860)
  Parerga y Paralipómena (1851)

Otras obras

• Aforismos sobre el arte de saber vivir (Die Kunst glücklich zu sein: Dargestellt in fünfzig Lebensregeln)
  La cuadruple razón...
  Los dos problemas fundamentales de la ética (Die beiden Grundprobleme der Ethik)
  La libertad el amor y otras pasiones
  Manuscritos berlineses
  Metafísica de las costumbres (Metaphysik der Sitten)
  El mundo como voluntad y representación
  Sobre la voluntad en la naturaleza (Ueber den Willen in der Natur)
  Cartas desde la obstinación
  Correspondencia escogida
  Epistolario de Weimar
  El arte de ser feliz (Die Kunst, Glücklich Zu Sein Oder, Eudämonologie)
  Dialéctica erística o El arte de tener razón, expuesta en 38 estratagemas (Eristische Dialektik: Die Kunst, Recht zu Behalten)
  El arte de tratar con las mujeres
  Ensayo sobre las visiones de fantasmas (Versuch über Geistersehn und was damit zusammenhängt)
  Escritos de juventud
  Senilia, reflexiones de un anciano (Senilia)
  Sobre la visión y los colores (Ueber das Sehen und die Farben)
  Diarios de viaje (ed. en castellano, 2012)

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Actualizado (Diciembre/2022)

[L'enfant terrible]

Schopenhauer es el faro por el que debería guiarse la Humanidad, a fin de no perder más y más siglos en decepcionarse ante aspectos de la vida cuya esencia él ya descifró en su momento.

El Amor, las Mujeres y la Muerte debería ser lectura obligatoria al cumplir los 16 años.
Eso y el Código penal.

A partir de la lectura de esas dos obras, nadie tendrá derecho a esgrimir un es que no lo sabía

[Moterialista]

Schopenhauer es el faro por el que debería guiarse la Humanidad, a fin de no perder más y más siglos en decepcionarse ante aspectos de la vida cuya esencia él ya descifró en su momento.

El Amor, las Mujeres y la Muerte debería ser lectura obligatoria al cumplir los 16 años.
Eso y el Código penal.

A partir de la lectura de esas dos obras, nadie tendrá derecho a esgrimir un es que no lo sabía

Totalmente de acuerdo, aunque yo más bien diría que Schopenhauer debe ser uno de los faros, pues no hay que olvidar a gente de la talla de Nietzsche, Freud, Sartre, Foucault o Cioran, entre otros muchos (no quiero remontarme hasta la Antigüedad, por no desempolvar ahora mi viejo manual de Historia de la Filosofía).

Schopenhauer, en efecto, es el antídoto definitivo (o casi definitivo) contra la desilusión, la decepción y los demás sentimientos nocivos surgidos de la esperanza, el deseo y el exceso de ego. Mucho mejores que cualquier manual de autoyuda actual, los libros de Schopenhauer son un instrumento formidable para vencer la tristeza, la desesperación, el enfado, la ira y todos los demás sentimientos destructivos nacidos de una visión excesivamente optimista de la vida y del ser humano. El pesimismo lúcido de Schopenhauer es un bálsamo para el alma.

Un saludo.

[Jorel]

¿Alguna recomendación para empezar con él? Y me refiero no sólo libros suyos sino a antecedentes necesarios, teniendo en cuenta que no he leído casi nada de filosofía.

[Josek]

Yo creo que lo bueno que tiene Schopenhauer es que se puede disfrutar igualmente sin tener mucha idea de filosofía aunque, claro, si conoces a Kant, Platón, Baltasar Gracián, conceptos del budismo y del induismo y también, como no, a Hegel, se entenderán mejor sus ideas.
Para acercarse por primera vez tal vez lo mejor, en mi opinión, sea el Parerga y Paralipómena que lo publicó, precisamente, con la idea, además de complementar sus otras obras, de acercar su pensamiento al lector llano y si no véase el prólogo al mismo:

Estos escritos complementarios, añadidos a mis obras más importantes y sistemáticas, constan, por una parte, de una serie de opúsculos sobre temas específicos y nuy variados, por otra parte de pensamientos aislados sobre temas aún más variados. Todo esto se ha incluido aquí porque la mayoría, debido a su temática, no podía encontrar acogida en aquellas obras, algunas cosas simplemente porque han llegado demasiado tarde para ocupar en ellas el puesto que les correspondía.
Como destinatarios de estas páginas he pensado en un principio en lectores que conozcan mis obras sistemáticas y sustanciales; incluso ellos encontrarán aquí alguna aclaración deseada; en general, sin embargo, también podrá comprender el contenido de estos volúmenes, con excepción de pocos pasajes, quien no traiga consigo ese conocimiento previo. No obstante, la persona que ya esté familiarizada con mi filosofía siempre tendrá algo a su favor, pues ésta siempre arrojará luz sobre todo lo que pienso y escribo, aunque sea desde la lejanía; así como, por otra parte, ella recibe alguna aclaración de todo lo que surge de mi mente.

El problema que hay es que hasta hace poco no se ha publicado completo (Trotta y Valdemar) y son caros. Fuera de esto hay infinidad de selecciones y antologias la mayoría sacadas, precisamente, del Parerga y Paralipómena pero que desvirtuan la imagen de su filosofía si realmente se está interesado en profundizar algo en su obra.
De todas estas creo que la más interesante sería la de los Aforismos sobre el arte del saber vivir o El arte del buen vivir o Eudomonología, según las diferentes editoriales ya que contienen, para mí, la mejor parte del los Parerga y Paralipómena.
Después, y si se quiere más Schopenhauer, ya habría que ir, directamente, a El mundo como voluntad y representación.

[fabian]

Una curiosidad relacionada con Schopenhauer:En el libro el Juicio universal , el escritor Giovanni Papini habla de un escritor llamado Philipp Mainländer .Este escritor llevó la filosófia de Schopenhauer con todas sus consecuencias.Arthur veía tres caminos para escapar de la voluntad:la estética,la ascética y el suicidio.Mainländer las siguió a rajatabla,fue poeta,aposto por la virginidad (que no es exactamente lo mismo que ascetismo) y acabó suicidandose.Aquí os dejo la página de este escritor poco (o nada) conocido.

http://es.wikipedia.org/wiki/Philipp_Mainl%C3%A4nder

[Jorel]

Gracias por los consejos, Josek. Veré si lo tienen en la biblioteca, porque sí es bastante caro.

[Protos]

Yo tengo varios de sus ensayos "El arte de...", y aún no me he decidido a leerlos, porque quería adquirir una buena base filosófica para afrontarlos. Pero, leído los comentarios, tal vez me decida a comenzarlos.

[Josek]

Protos, supongo que te refieres a los de El arte de tener razón, El arte de conocerse a sí mismo, El arte de insultar, El arte de hacerse respetar y El arte de tratar a las mujeres, de estos solo conozco El arte de tener razón llamado, también, en otras editoriales, Dialéctica erística, un curioso compendio de estratagemas para salir victorioso en las controversias dialécticas, todos ellos son escritos póstumos sacados de anotaciones personales o autobiográficas que Schopenhauer iba recogiendo en sus cuadernos a excepción del Arte de tratar con las mujeres que, además de escritos póstumos, incluye otros sacados de El mundo como v. y r. y del Parerga.
En general, estos pequeños tratados no necesitan grandes dosis de sabiduría ya que suelen ser traslaciones de su pensamiento aplicables a la existencia real y prosaica aunque conserven igualmente la caracteristica impronta de su autor.

[Protos]

En concreto: "El arte de ser feliz" de la editorial Herder, , "El arte de tener razón" de Alianza Editorial, "El arte de saber vivir", de El club Diógenes, Valdemar, y uno titulado "Parábolas, aforismos y comparaciones" de la editorial Edhasa.

[Josek]

Vale, Protos, estos dos no los conocía, El arte de ser feliz son tambièn póstumos de sus cuadernos privados y el de Parábolas aforismos y comparaciones es una selección sacada de sus obras editadas en vida hecha y traducida por Sanchez Pascual lo que representa toda una garantia de calidad.

Reseña:
Sorprende que a 140 años de la muerte de Schopenhauer aún existan textos inéditos de su obra y de tal valía como los que, en un trabajo minucioso y casi detectivesco, reconstituye el catedrático de filosofía Franco Volpi en un pequeño manual de filosofía práctica: El arte de ser feliz. Se trata de una auténtica joya hasta ahora escondida en el legado del filósofo, en la que se nos invita a educar nuestro carácter a través de reglas de conducta que nos ayuden a evitar las penurias y los golpes del destino.

Desde muy joven, Schopenhauer tenía una predilección por el género literario de los pequeños tratados de filosofía práctica. Ya durante el tiempo en el que residió en Berlín gustaba de redactar breves textos y apuntes para su uso personal; así nació, por ejemplo, El arte de tener razón (Erística), publicado póstumamente a partir de su legado.

Las cincuenta reglas para la vida que incluye se redactaron en diversos momentos y se encuentran dispersas en distintos volúmenes y carpetas. Su estado incompleto y el reconocido pesimismo de Schopenhauer son las razones principales por las que hasta ahora nadie sospechó un «Arte de ser feliz» entre los escritos del filósofo. Pero precisamente desde la convicción pesimista de que la vida de los seres humanos no depara más que decepciones, dolor y aburrimiento, el filósofo nos invita a servirnos de unas herramientas valiosas que nos brinda la naturaleza: los dones del ingenio y de la prudencia práctica. Aunque nuestro carácter no parece modificable, podemos educarlo con reglas de conducta que nos ayuden a evitar las penurias y los golpes del destino. En 1814, a los 26 años, el joven filósofo encontró una formulación casi definitiva para la intuición fundamental en la que basar su sabiduría de la vida, es decir, la concepción negativa de la felicidad entendida como mera ausencia del dolor. A las razones filosóficas para esta concepción se sumaron motivaciones de índole biográfica. Bajo la presión y las decepciones de sus primeros años en Berlín, Schopenhauer se dedicó con especial intensidad al problema de la sabiduría de la vida y, desde 1822, comenzó a apuntar con cierta regularidad sentencias y máximas.

El plan de concebir un «Arte de felicidad» en forma de catálogo de reglas de conducta surgió probablemente en relación con la lectura del Oráculo manual de Baltasar Gracián. Muchas de las reglas de Schopenhauer recuerdan las de la obra de Gracián e incluso se encuentran citas directas que demuestran que Schopenhauer, al redactar El arte de ser feliz, tenía en mente al maestro del conceptismo español. Con su descubrimiento, Franco Volpi ha ofrecido un generoso regalo especialmente a la cultura española y a la historia de la recepción del pensamiento barroco español por parte de Schopenhauer.

De interés para filósofos, para lectores interesados en el pensamiento de Schopenhauer y público en general que se sienta atraído por escritos sobre autoayuda, esta vez tratados desde el rigor de la filosofía.

[Josek]

Buen apunte Fabian, en efecto, Mainlander fué uno de los mayores apostoles de su filosofía, en cuanto a Papini, al cual no conocía, parece que se trata de un buen pájaro, lo digo por su proximidad al fascismo y tal.
No obstante, tengo que hacerte una pequeña corrección, has tenido un pequeño desliz sin importancia, aunque, para ser sincero, me ha extrañado un poco.
Comentas que Arthur veía tres caminos para escapar de la voluntad: la estética, la ascética y el suicidio, los dos primeros son correctos pero el suicidio no (al menos yo así lo entiendo), para él, el mundo, desde luego, era un lugar miserable pero el suicidio no podría librar al hombre del dominio de la voluntad, como fuerza motora de la vida, a sus palabras me remito:


Metafísica de las costumbres
Cap. 8
Los tormentos de la conciencia.

...Al margen del tiempo no mora sino la cosa en sí de Kant. Quien capte bien esto debe percatarse al mismo tiempo de que, ante el sufrimiento que acompaña a la vida, el suicidio no representa salvación alguna, pues atañe a una manifestación individual, mientras que el ser de la misma se representa en millones de manifestaciones bajo identicas condiciones y nunca puede dejar de existir...


El mundo como voluntad y representación
Libro cuarto
Sección LXIX

Hemos expuesto ampliamente, dentro de los límites de nuestra consideración, la negación de la voluntad de vivir, único acto de su libertad que se manifiesta en el fenómeno y que, por lo tanto, constituye, como Asmus la llama, el cambio transcendental. De ella nada se diferencia más que la supresión voluntaria del propio fenómeno individual: el suicidio. Muy lejos de ser negación de la voluntad, ese fenómeno supone una enérgica afirmación de la misma. Pues la esencia de la negación no consiste en aborrecer los sufrimientos sino los placeres de la vida. El suicida quiere la vida, simplemente está insatisfecho con las condiciones en que se le presenta. De ahí que al destruir el fenómeno individual no elimine en modo alguno la voluntad de vivir, sino solamente la vida...

...Precisamente porque el suicida no puede dejar de querer, deja de vivir, y la voluntad se afirma aquí justamente en la supresión de su fenómeno porque no se puede afirmar de otra manera. Mas el sufrimiento al que de ese modo se sustrae era lo que en cuanto mortificación de la voluntad le podría haber conducido a la negación de sí misma y a la salvación, por lo que en ese respecto el suicida se asemeja a un enfermo que tras haber comenzado una dolorosa operación que podría sanarle de raíz, no permite que concluya sino que prefiere mantener la enfermedad. El sufrimiento se aproxima y abre en cuanto tal la posibilidad de negar la voluntad; pero él lo rechaza al destruir el fenómeno de la voluntad, el cuerpo, para que la voluntad se mantenga sin quebranto...

[Hans Castorp]

Es un autor por el que siento mucha curiosidad pero nunca me he atrevido. Tengo el volumen I de su mundo como voluntad y representación, pero es la nueva edición de LOSADA y me han dicho que es una traducción bastante mala y la de Trotta son 36 billeticos.

Pero aún así he leído bastante sobre él en internet y lo cierto es que parece muy interesante.

[Josek]

Hola compañero, yo lo que te puedo decir es que no conocía esta edición de Losada, parece ser que, sino me equivoco, es muy reciente, del 2008 y del 2009, no sé, por tanto, que traducción tiene ni he podido tampoco averiguarlo lo que me hace sospechar, junto con que los libros de esta editorial, aunque están muy bién editados, suelen venir con traducciones antiguas, que se trate, probablemente, de la realizada por Eduardo Ovejero y Maury a principios del siglo XX que, aunque esté un poco desfasada, a mí me gusta bastante pero tiene el inconveniente que no están traducidas las abundantes citas que utiliza Schopenhauer en latín y griego lo que, como es lógico, supone un importante obstáculo para la total comprensión de la obra. Ya digo, todo esto son sólo suposiciones. Si no eres escrupuloso al respecto, se pueden conseguir los dos tomos con la mula en la versión de Trotta que, en mi opinión, esta bién trabajada.

[Hans Castorp]

Sí, la traducción es la que tú dices. En fin, le pegaré una ojeada y me bajaré la de Trotta a ver que pasa. Pero es que la de Trotta comprada, son 36 euros por cada tomo y son dos tomos. Es un pastizal para estos tiempos de crisis.