Título: El hombre sentado en el pasillo
Título original: L'Homme assis dans le couloir
Autora: Marguerite Duras
Subgénero: Erótica
Editorial: Tusquets
Colección: La sonrisa vertical
Publicación: Barcelona, 1996 (1980), 34 páginas
Sinopsis:
Ver en AmazonCon la mirada indiscreta de la cineasta que también es, a la vez distante y comprometida en la acción, Marguerite Duras se las ingenia para sosprender a ese hombre sentado en el pasillo oscuro y a esa mujer acostada al sol en sus desgarrados encuentros amorosos, que se desarrollan en un apoteósico escenario romántico. De esta incursión de voyeuse, de «mirona» descarada, en la actividad sexual de una pareja a la que ve, cree ver o imagina, obtendremos nosotros, los lectores, una pequeña pero no menos soberbia obra maestra del género.
La aparente frialdad y el tono lacónico de quien fija su atención en algo que le sobrecoge, el voluntario despojamiento de las palabras que se presentan semidesnudas, como los cuerpos a los que refieren, la deliberada contradicción de términos paradójicos y repetición de «instantáneas» y expresiones que las «fijan», otorgan, contrariamente a lo que podría creerse, tal intensidad a las secuencias eróticas, provocan tal estado de sensualidad que desafiamos a los lectores a que recuerden cuándo, en tan breves páginas, se han deleitado tanto.
No conocía aún esta faceta tan erótica de Duras, y no me ha desagradado para nada. Es un libro muy recomendable, ya no sólo para los amantes de la narrativa erótica, sino para todos aquellos que aprecien la prosa de esta genial autora, una prosa casi poética, inusual en este tipo de relatos (por lo menos los que yo he leído), con su estructura fragmentaria fruto de uno de sus delirios psíquicos producidos por el alcohol, y el modo de narrar aquello que ve desde no se sabe muy bien donde... Es cortito y bueno. Muy recomendable