Felicidad - Katherine Mansfield
- Sue_Storm
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Felicidad - Katherine Mansfield
FELICIDAD
Katherine Mansfield
Nuevo relato del miniclub de Katherine Mansfield, del año 1918. Comentaremos a partir del viernes 23 de marzo, aquí, en este hilo
- jilguero
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
De los relatos de Mansfield que leí hace muchos años, sé que este me pareció de los más sugerentes, con una bella imagen de un peral en flor. Pero también recuerdo que tenía ciertas dudas sobre si lo comprendía o no en toda su profundidad. En esta nueva lectura, con ayuda de todos vosotros, seguro que lo desentraño mejor .
¿Qué me está pasando? Las cavilaciones de Juan Mute
El esfuerzo mismo para llegar a las cimas basta para llenar un corazón de hombre (A. Camus)
Re: Felicidad - Katherine Mansfield
"No es oro todo lo que reluce" "Ojos que no ven corazón que no siente" |
En fin, es el típico relato que cualquier comentario que uno haga es un spoiler. En principio las 3/4 partes del relato se limitan a exponernos el estado de felicidad, de éxtasis diría yo de la protagonista, tiene la mejor vida que puede uno desear, y así lo explica ella misma, no tiene problemas de dinero, está casada con un hombre al que quiere, tiene una hija estupenda, pero en ese momento en especial, "algo" hace que sea tan feliz que la desborda, puede ser la primavera, o que está enamorada, o que está loca, pero esto hace que lo vea todo a través de ese prisma especial que le dice que ese día es especial.
Pero si leemos entre líneas vemos que hay nubes
en realidad ella no está criando a la niña, es como si tuviera una muñeca con la que jugar cuando quiere, al marido no lo desea sexualmente, es como un compañero ideal pero como podría serlo un amigo, de hecho en ese éxtasis de felicidad que tiene se da cuenta de que desea al marido, lo cual le hace darse cuenta de que hasta ese momento no lo ha deseado, y tiene una nueva amiga estupenda con la que tiene una especial conexión. La sorpresa final viene cuando descubre que su amiga y su marido están liados y su marido la desea como nunca la ha deseado a ella, hay pasión en lo que le dice cuando la amiga se marcha. |
?Y ahora qué va a pasar? |
Bajo tierra seca de César Pérez Gellida.
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Coincido con Jilguero en que es éste el relato más sugerente de los que le llevamos leídos a esta autora. Me gusta la reflexión con la que arranca porque es cierto que, si bien son entendibles las normas sociales que persiguen no molestar al prójimo, no lo son tanto aquellas otras que suelen ser autoimpuestas y que se resumen en "no hacer el ridículo". En el fondo es un poco absurdo tener que reprimir la expresión de un momento de dicha simplemente porque van a pensar que está uno loco o ebrio.
El relato me ha parecido interesante y sugerente, aunque no estoy seguro de haber llegado al fondo. Me ha parecido una reflexión sobre el estado emocional que denominamos "sentirse feliz". Una reflexión que explora qué proporción de dicho estado tiene base objetiva y qué proporción la tiene subjetiva, inclinándose el texto -según creo- por la preponderancia de lo subjetivo. Desde el inicio comprobamos que Berta Young está eufórica, se siente dichosa y con ganas de expresarlo, el mundo entero se torna bello ante su positiva mirada. Existen razones "objetivas" para ello (su vida parece perfecta según se nos indica en un párrafo) y sin embargo... eso no es explicación suficiente. Es fácil adivinar que, aun con esas mismas circunstancias de vida, Berta no siempre se siente tan feliz como en este día. ¿Estará un poco enamorada de su nuevo "hallazgo", la señorita Fulton? Este estado de enamoramiento podría explicar el momento de euforia y de exaltación de la belleza por el que pasa.
Un detalle interesante viene dado por el hecho de que Perla Fulton se convierte en una especie de catalizador que hace nacer -¡por primera vez!- el deseo sexual de Berta hacia su marido. En este punto imagino a Freud frotándose las manos y diciendo: ¡claro, por eso se siente Berta así de bien, ha dejado de reprimir la libido!
Pero al final del relato, Berta...
¿Qué va a pasar a partir de este descubrimiento? ¿Seguirá Berta sintiéndose igual de feliz? Es fácil adivinar la respuesta, a no ser que Berta sea una persona realmente singular y nos sorprenda. Y, sin embargo, el peral con toda su belleza (símbolo de todo lo demás) sigue estando en el mismo sitio, su adorable hijita sigue en la cuna, su desahogo económico no ha cambiado, seguro que...
Es decir, ¿supone el descubrimiento de Berta algún cambio real en las circunstancias objetivas de su vida?, ¿no constituían entonces estas circunstancias la base de la felicidad que sentía?, ¿se trataba pues de un pasajero estado emocional de raíz subjetiva? Éstas son las preguntas que parece lanzarnos la escritora.
El relato me ha parecido interesante y sugerente, aunque no estoy seguro de haber llegado al fondo. Me ha parecido una reflexión sobre el estado emocional que denominamos "sentirse feliz". Una reflexión que explora qué proporción de dicho estado tiene base objetiva y qué proporción la tiene subjetiva, inclinándose el texto -según creo- por la preponderancia de lo subjetivo. Desde el inicio comprobamos que Berta Young está eufórica, se siente dichosa y con ganas de expresarlo, el mundo entero se torna bello ante su positiva mirada. Existen razones "objetivas" para ello (su vida parece perfecta según se nos indica en un párrafo) y sin embargo... eso no es explicación suficiente. Es fácil adivinar que, aun con esas mismas circunstancias de vida, Berta no siempre se siente tan feliz como en este día. ¿Estará un poco enamorada de su nuevo "hallazgo", la señorita Fulton? Este estado de enamoramiento podría explicar el momento de euforia y de exaltación de la belleza por el que pasa.
Un detalle interesante viene dado por el hecho de que Perla Fulton se convierte en una especie de catalizador que hace nacer -¡por primera vez!- el deseo sexual de Berta hacia su marido. En este punto imagino a Freud frotándose las manos y diciendo: ¡claro, por eso se siente Berta así de bien, ha dejado de reprimir la libido!
Pero al final del relato, Berta...
sufre un mazazo: su marido la engaña con la señorita Fulton, la displicencia de él hacia ella era completamente fingida. |
su marido está dispuesto a seguir dándole a Berta esa amistad (exenta de atracción sexual) que para ella era en realidad lo importante... |
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
A mi este cuento me gusto mucho, deja muchas cosas en el aire como decis ya que casi la historia empieza cuando termina el cuento y estoy de acuerdo con lo q ha dicho Arden.
Ya al principio cuando decia q era muy feliz yo veia k realmente no era feliz sino que ella intentaba convencerse de eso, yo creo q no es feliz porque a pesar de tener la vida perfecta hayt matices q no le gustan como por ejemplo lo de su hija q casi no pasa tiempo con ella, q no desea a su marido y luego se le suma q el le es infiel, yo creo q este hecho no cambiara nada, ella seguira con su vida como hasta ahora porque como dijo el es el marido perfecto |
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- jilguero
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
La relectura me ha reafirmado mi recuerdo: un relato muy sugerente, lleno de guiños, de símbolos, que no sé si capto en toda su profundidad. Creo que tiene detalles buenísimos, y cargados de belleza, como ese de que Bertha cae en la cuenta de que se ha vestido como si fuera su peral en flor y el párrafo siguiente, al menos en mi traducción (he visto otra en la que no), arranca diciendo “Sus pétalos crujieron suavemente al entrar en el vestíbulo...”, como si Bertha se sintiera peral. Igual es un error de traducción, pero me ha encantado el efecto. En su conjunto, yo diría que el mensaje principal del relato es: ¡Cuan frágil y subjetiva es la felicidad!
Y si la protagonista se hubiera llamado Laura, os diría que es la misma persona de La fiesta en el jardín, una vez crecida y casada. Tiene la misma sesnsibilidad ante las pequeñas cosas, las mismas ganas de vivir, la misma incapacidad para expresar eso que siente dentro y que la hace sentirse distinta del resto.
Antes de que la gente empiece a llegar, cuando contempla el peral, Bertha advierte que no tiene ni un solo pétalo marchito, es la perfección, esa felicidad perfecta que ella cree disfrutar, pero ve entonces a un gato gris arrastrando su panza, avanzando sigilosamente, y justo detrás, como si fuera su sombra, un gato negro. Esa imagen le estremece, pues le parece que esa manera solapada de moverse de los gatos es inquietante. Podriamos pensar que ese desasosiego era como una premonición de que ese estado de beatitud estaba amenazado, a punto de derrumbarse. Es decir, un símbolo de la manera taimada que
En pocas palabras, un buen relato, lleno de guiños, sugerente, que me ha vuelto a gustar mucho.
En cuanto a que ocurrirá a partir de ahora, pues Jilguero, que le gusta ser positivo y vital, se inclina por una solución tipo Primavera con una esquina rota de Benedetti, donde el protagonista nos dice que la primavera es como un espejo, y que su espejo tiene una esquina rota. Mas luego añade que, pese a estar roto, el espejo sirve: la primavera sirve. O lo que es lo mismo, el peral sigue ahí, donde siempre, cargadito de flores, si bien algunos capullos se van a marchitar a partir de ahora.
Y os planteo algunas de las dudas de Jilguero. Son detalles tal vez triviales en la historia, pero que su curiosidad le demanda os los pregunte:
Por un lado, no me aclaro que quiere decir al frase de la señorita Fulton cuando están mirando el peral. Por otro,
Y de momento lo dejo aquí para no cansaros.
Y si la protagonista se hubiera llamado Laura, os diría que es la misma persona de La fiesta en el jardín, una vez crecida y casada. Tiene la misma sesnsibilidad ante las pequeñas cosas, las mismas ganas de vivir, la misma incapacidad para expresar eso que siente dentro y que la hace sentirse distinta del resto.
Antes de que la gente empiece a llegar, cuando contempla el peral, Bertha advierte que no tiene ni un solo pétalo marchito, es la perfección, esa felicidad perfecta que ella cree disfrutar, pero ve entonces a un gato gris arrastrando su panza, avanzando sigilosamente, y justo detrás, como si fuera su sombra, un gato negro. Esa imagen le estremece, pues le parece que esa manera solapada de moverse de los gatos es inquietante. Podriamos pensar que ese desasosiego era como una premonición de que ese estado de beatitud estaba amenazado, a punto de derrumbarse. Es decir, un símbolo de la manera taimada que
la señorita Fulton tenía de atraer a sus presas, puesto que había fascinado tanto a él como a ella. |
En pocas palabras, un buen relato, lleno de guiños, sugerente, que me ha vuelto a gustar mucho.
En cuanto a que ocurrirá a partir de ahora, pues Jilguero, que le gusta ser positivo y vital, se inclina por una solución tipo Primavera con una esquina rota de Benedetti, donde el protagonista nos dice que la primavera es como un espejo, y que su espejo tiene una esquina rota. Mas luego añade que, pese a estar roto, el espejo sirve: la primavera sirve. O lo que es lo mismo, el peral sigue ahí, donde siempre, cargadito de flores, si bien algunos capullos se van a marchitar a partir de ahora.
Y os planteo algunas de las dudas de Jilguero. Son detalles tal vez triviales en la historia, pero que su curiosidad le demanda os los pregunte:
Por un lado, no me aclaro que quiere decir al frase de la señorita Fulton cuando están mirando el peral. Por otro,
si la historia se supone venía de antes, o si surge sobre la marcha, porque esa noche todo era mágico, y la señorita Fulton con su luminosidad de luna cambia de golpe los sentimientos de él. Me inclino a lo priemero pro el detalle d e que ambos llegan tarde, como si previamente ya hubieran celebrado un encuentro. |
Y de momento lo dejo aquí para no cansaros.
¿Qué me está pasando? Las cavilaciones de Juan Mute
El esfuerzo mismo para llegar a las cimas basta para llenar un corazón de hombre (A. Camus)
Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Respecto a las dos dudas que plantea Jilguero:
1) Supongo que con la frase de Fulton mirando el peral te refieres a "Sí, eso es". La propia Berta duda de si Fulton la ha dicho realmente o si, por el contrario, ha sido imaginación de ella (Berta). Así que pienso que esa frase vendría a ser algo así como una confirmación por parte de Fulton de que es cierto todo lo que ha estado pensando Berta mientras contemplaban ambas el peral, es decir, que la compenetración entre ambas era tan fuerte que no necesitaba de palabras, ambas tenían sensibilidades gemelas...
2) En cuanto a lo otro, yo pienso...
Por otro lado, veo que tanto Arden como Pink dicen que en realidad la felicidad de Berta no era tal porque se vislumbran nubarrones: que si no está mucho con la hija, que si la relación con su marido... Pero es que yo creo que una de las ideas que este relato quiere subrayar es precisamente que eso que llamamos "felicidad" no depende tanto de las circunstancias objetivas de nuestra vida como de nuestra actitud ante la vida. Dicho de otro modo, la felicidad es una cuestión más subjetiva que objetiva. Precisamente por eso, tal como he oído decir alguna vez, no existe la felicidad sino "momentos de felicidad". Y esos momentos de felicidad a veces responden a una causa inmediata, pero otras veces parecen depender del pie con el que te has levantado. Probablemente, aunque resulte poco poético, hay mucho de bioquímica, de niveles de neurotransmisores, de genética,...
1) Supongo que con la frase de Fulton mirando el peral te refieres a "Sí, eso es". La propia Berta duda de si Fulton la ha dicho realmente o si, por el contrario, ha sido imaginación de ella (Berta). Así que pienso que esa frase vendría a ser algo así como una confirmación por parte de Fulton de que es cierto todo lo que ha estado pensando Berta mientras contemplaban ambas el peral, es decir, que la compenetración entre ambas era tan fuerte que no necesitaba de palabras, ambas tenían sensibilidades gemelas...
2) En cuanto a lo otro, yo pienso...
que Fulton y el marido de Berta ya tenían su rollito de antes. Él hace teatro ante su mujer, simula que Fulton le parece una rubia descerebrada, pero en realidad tiene un rollo con ella. O sea, que no creo que sea algo que haya nacido esa misma noche. Pero tampoco veo necesario que los dos amantes hubiesen estado juntos precisamente ese mismo día antes de llegar a la reunión, a pesar de que ambos lleguen tarde. |
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- jilguero
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Gracias, Primo, por responder a las dudas de Jilguero
PD: el alegato me ha quedado un poco cursi , pero es primavera, día de fiesta, el sol está fuera...etc.
Totalmente de acuerdo, de ahí que yo dijera que el principal mensaje del relato era:¡Cuán frágil y subjetiva es la felicidad! Y, por supuesto, que la bioquímica tiene mucho que ver. Pero, en la modesta opinión de Jilguero, esa bioquímica la podemos nosotros manejar en parte. Porque, si uno se esfuerza y se lo propone, aprende a disfrutar esos momentos de felicidad sin esperar nada más, asumiendo que la vida es así, que la felcidad es así de efímera; y que, pese a ello, o precisamente por ello (esto nunca me queda claro), vivir es apasionanteprimopons escribió: Por otro lado, veo que tanto Arden como Pink dicen que en realidad la felicidad de Berta no era tal porque se vislumbran nubarrones: que si no está mucho con la hija, que si la relación con su marido... Pero es que yo creo que una de las ideas que este relato quiere subrayar es precisamente que eso que llamamos "felicidad" no depende tanto de las circunstancias objetivas de nuestra vida como de nuestra actitud ante la vida. Dicho de otro modo, la felicidad es una cuestión más subjetiva que objetiva. Precisamente por eso, tal como he oído decir alguna vez, no existe la felicidad sino "momentos de felicidad". Y esos momentos de felicidad a veces responden a una causa inmediata, pero otras veces parecen depender del pie con el que te has levantado. Probablemente, aunque resulte poco poético, hay mucho de bioquímica, de niveles de neurotransmisores, de genética,...
PD: el alegato me ha quedado un poco cursi , pero es primavera, día de fiesta, el sol está fuera...etc.
¿Qué me está pasando? Las cavilaciones de Juan Mute
El esfuerzo mismo para llegar a las cimas basta para llenar un corazón de hombre (A. Camus)
Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Leído el relato. Me han gustado mucho vuestras reflexiones Para mí el mensaje que quiere transmitir es que la felicidad es efímera, a la par que subjetiva.
Berta lo tiene todo para ser feliz, como ella misma nos cuenta, y sin embargo no se había sentido antes en tal estado de dicha como esa noche. Ahondando un poco más nos explica las razones: tiene el marido ideal pero no lo desea, tiene una hija pero apenas pasa tiempo con ella... Sin embargo, esa noche se encuentra con que de repente se siente feliz, y esto sólo le dura hasta que se da cuenta de que su marido le engaña con su nueva amiga. |
Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Es curioso como suelo discrepar de Primopons o Jilguero , me aportan mucho precisamente por eso ya que los relatos que me suelen gustar mucho a ellos no, y yo veo cosas que ellos no ven y ellos ven cosas que yo no veo.
En este relato me ocurre lo mismo, a mí es el que menos me ha gustado de los relatos de esta autora, excepto el posible enamoramiento de la protagonista de la rubia de la Srta. Fulton, pero sin que la protagonista sea consciente de ello,que me pareció interesante porque explicaría esa repentina felicidad que hace que el día sea más soleado, el peral esté como nunca y ella estalle de felicidad, porque por lo demás todo es igual que el día anterior o que el de hace una semana, no es que ella le haya tocado la lotería, su vida es desahogada desde siempre, con el marido no se casó ayer sino que lleva casada años,..., es decir que las circunstancias que ella repasa para ser feliz ya existían anteriormente, y sin embargo ella está especialmente feliz ese día, ella incluso da una explicación, la primavera, pero me da que la Srta. Fulton tiene mucho que ver, sin embargo cuando ve que
Por lo demás el tema no me ha parecido tan interesante como en los demás relatos.
En este relato me ocurre lo mismo, a mí es el que menos me ha gustado de los relatos de esta autora, excepto el posible enamoramiento de la protagonista de la rubia de la Srta. Fulton, pero sin que la protagonista sea consciente de ello,que me pareció interesante porque explicaría esa repentina felicidad que hace que el día sea más soleado, el peral esté como nunca y ella estalle de felicidad, porque por lo demás todo es igual que el día anterior o que el de hace una semana, no es que ella le haya tocado la lotería, su vida es desahogada desde siempre, con el marido no se casó ayer sino que lleva casada años,..., es decir que las circunstancias que ella repasa para ser feliz ya existían anteriormente, y sin embargo ella está especialmente feliz ese día, ella incluso da una explicación, la primavera, pero me da que la Srta. Fulton tiene mucho que ver, sin embargo cuando ve que
ella y su marido están liados su mundo se le cae encima ¿Y ahora qué?, pero ¿lo dice por su marido o por la Srta. Fulton? No lo sabemos. |
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- jilguero
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Es verdad, Arden . Te partías de risa con El espíritu moderno y la verdad es que Jilguero se quedó con cara de tonto después de leerlo. Y este, en cambio, lo ve lleno de detalles, de matices. Por ejemplo, la escena de los gatos, donde el uno avanza y el otro le sigue como si fuera su sombra me parece una metáfora magnifica. Y la del peral en plena floración y ella vistiéndose como su peral, pues también. Imagino que estas diferencias tienen que ver con la distinta manera que tiene cada cual de percibir lo que nos rodea. Y, por eso, compartir los distintos puntos de vista en el miniclub me parece tan interesante.Arden escribió:Es curioso como suelo discrepar de Primopons o Jilguero , me aportan mucho precisamente por eso ya que los relatos que me suelen gustar mucho a ellos no, y yo veo cosas que ellos no ven y ellos ven cosas que yo no veo.
En este relato me ocurre lo mismo, a mí es el que menos me ha gustado de los relatos de esta autora, excepto el posible enamoramiento de la protagonista de la rubia de la Srta. Fulton, pero sin que la protagonista sea consciente de ello,que me pareció interesante porque explicaría esa repentina felicidad que hace que el día sea más soleado, el peral esté como nunca y ella estalle de felicidad, porque por lo demás todo es igual que el día anterior o que el de hace una semana, no es que ella le haya tocado la lotería, su vida es desahogada desde siempre, con el marido no se casó ayer sino que lleva casada años,..., es decir que las circunstancias que ella repasa para ser feliz ya existían anteriormente, y sin embargo ella está especialmente feliz ese día, ella incluso da una explicación, la primavera, pero me da que la Srta. Fulton tiene mucho que ver, sin embargo cuando ve quePor lo demás el tema no me ha parecido tan interesante como en los demás relatos.
ella y su marido están liados su mundo se le cae encima ¿Y ahora qué?, pero ¿lo dice por su marido o por la Srta. Fulton? No lo sabemos.
Por cierto, para ser domingo, todavía faltan muchos por comentar. Espero que Neke se haya recuperado ya del drama belga...
¿Qué me está pasando? Las cavilaciones de Juan Mute
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Arden,
estoy de acuerdo en que una de las cosas que hace atractivas estas tertulias es que no coincidamos en todo. De todas formas, hay una cosa en la que sí estoy de acuerdo contigo respecto al relato de esta semana: en que ese "momento efímero de felicidad" que experimenta Berta se debe a...
Y en cuanto a discrepancias en general, yo observo que suelen venir ligadas a lo que nos resulta divertido o no. En tu caso, creo que valoras mucho que un relato te resulte divertido. Y como ya hemos comentado otras veces, a mí no siempre me resulta divertido lo que a ti sí. Un buen ejemplo de tal situación es Mark Twain, que a ti te gusta mucho, y que a mí sin embargo me resulta en general pesado.
En cuanto a por qué me gusta a mí este relato de Mansfield más que todos los anteriores, en parte es por lo que comenta Jilguero de los detalles (aunque creo que Jilguero tiene más sensibilidad para éstos, por ejemplo no me había fijado yo en los gatos), pero sobre todo es porque plantea un tema "filosófico" que me resulta interesante, y lo hace desde los primeros párrafos: ¿por qué se siente uno un día tan feliz y al día sguiente ya no tanto, cuando sin embargo las circunstancias objetivas que envuelven nuestra vida apenas han cambiado? ¿Por qué nuestra "mirada" sobre lo que nos rodea está tan influida por nuestro estado de ánimo?...
La verdad es que me doy cuenta de que yo a los relatos breves les pido cosas distintas que a las novelas. Argumentalmente es difícil que un texto breve me llene. Así que, tal vez por ello, prefiero que sea un instrumento que me interpele, que me haga reflexionar sobre algún aspecto de la vida.
estoy de acuerdo en que una de las cosas que hace atractivas estas tertulias es que no coincidamos en todo. De todas formas, hay una cosa en la que sí estoy de acuerdo contigo respecto al relato de esta semana: en que ese "momento efímero de felicidad" que experimenta Berta se debe a...
su enamoramiento, lo sepa ella o no, de la Srta. Fulton. |
En cuanto a por qué me gusta a mí este relato de Mansfield más que todos los anteriores, en parte es por lo que comenta Jilguero de los detalles (aunque creo que Jilguero tiene más sensibilidad para éstos, por ejemplo no me había fijado yo en los gatos), pero sobre todo es porque plantea un tema "filosófico" que me resulta interesante, y lo hace desde los primeros párrafos: ¿por qué se siente uno un día tan feliz y al día sguiente ya no tanto, cuando sin embargo las circunstancias objetivas que envuelven nuestra vida apenas han cambiado? ¿Por qué nuestra "mirada" sobre lo que nos rodea está tan influida por nuestro estado de ánimo?...
La verdad es que me doy cuenta de que yo a los relatos breves les pido cosas distintas que a las novelas. Argumentalmente es difícil que un texto breve me llene. Así que, tal vez por ello, prefiero que sea un instrumento que me interpele, que me haga reflexionar sobre algún aspecto de la vida.
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- jilguero
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
primopons escribió:Arden,
estoy de acuerdo en que una de las cosas que hace atractivas estas tertulias es que no coincidamos en todo. De todas formas, hay una cosa en la que sí estoy de acuerdo contigo respecto al relato de esta semana: en que ese "momento efímero de felicidad" que experimenta Berta se debe a...Y en cuanto a discrepancias en general, yo observo que suelen venir ligadas a lo que nos resulta divertido o no. En tu caso, creo que valoras mucho que un relato te resulte divertido. Y como ya hemos comentado otras veces, a mí no siempre me resulta divertido lo que a ti sí. Un buen ejemplo de tal situación es Mark Twain, que a ti te gusta mucho, y que a mí sin embargo me resulta en general pesado.
su enamoramiento, lo sepa ella o no, de la Srta. Fulton.
En cuanto a por qué me gusta a mí este relato de Mansfield más que todos los anteriores, en parte es por lo que comenta Jilguero de los detalles (aunque creo que Jilguero tiene más sensibilidad para éstos, por ejemplo no me había fijado yo en los gatos), pero sobre todo es porque plantea un tema "filosófico" que me resulta interesante, y lo hace desde los primeros párrafos: ¿por qué se siente uno un día tan feliz y al día sguiente ya no tanto, cuando sin embargo las circunstancias objetivas que envuelven nuestra vida apenas han cambiado? ¿Por qué nuestra "mirada" sobre lo que nos rodea está tan influida por nuestro estado de ánimo?...
La verdad es que me doy cuenta de que yo a los relatos breves les pido cosas distintas que a las novelas. Argumentalmente es difícil que un texto breve me llene. Así que, tal vez por ello, prefiero que sea un instrumento que me interpele, que me haga reflexionar sobre algún aspecto de la vida.
¿Tampoco de Borges te llenó ningún argumento?
Fíjate, Primo, en esto diferimos, pues yo a las novelas, salvo honrosas excepciones, casi siempre le veo "paja", texto innecesario. Por eso, cuando un cuento es bueno de verdad, me parece la producción literaria más perfecta: contando una historia con las plabras, precisas, ni una más, ni una menos. Claro que dar con el cuento perfecto cuesta...
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Jilguero,jilguero escribió:
¿Tampoco de Borges te llenó ningún argumento?
Fíjate, Primo, en esto diferimos, pues yo a las novelas, salvo honrosas excepciones, casi siempre le veo "paja", texto innecesario. Por eso, cuando un cuento es bueno de verdad, me parece la producción literaria más perfecta: contando una historia con las plabras, precisas, ni una más, ni una menos. Claro que dar con el cuento perfecto cuesta...
yo soy mucho más de novela. Si me gusta la forma de narrar de un autor, yo quiero que se enrolle, que cree ambientes, que avance poco a poco, que retarde el desenlace, que me vaya definiendo a los personajes con una situación y con otra, en un diálogo y en otro, que yo me vaya a la cama intrigado sobre la evolución que va a tener la historia, que al día siguiente esté deseando retomar el libro, etc., etc., en fin muchas cosas que son incompatibles con un relato breve.
Lo que es o no "paja" en una novela es una cuestión bastante subjetiva. Es probable que, si eres un jilguero exigente y tienes muchas lecturas sobre tus plumas, a ti te sea especialmente difícil encontrar obras que mantengan a lo largo de muchas páginas un nivel que te llene.
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- jilguero
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Re: Felicidad - Katherine Mansfield
Lecturas sobre las alas tengo unas pcoas, por ser pájaro viejo, porque nunca he tenido tanto tiempo disponible como para leer al ritmo de algunos conocidos foreros. Y exigente, lo que no puedo evitar, pues me encantaría disfrutar plenamente con cada libro que abro, mas no siempre es así.primopons escribió:Jilguero,jilguero escribió:
¿Tampoco de Borges te llenó ningún argumento?
Fíjate, Primo, en esto diferimos, pues yo a las novelas, salvo honrosas excepciones, casi siempre le veo "paja", texto innecesario. Por eso, cuando un cuento es bueno de verdad, me parece la producción literaria más perfecta: contando una historia con las plabras, precisas, ni una más, ni una menos. Claro que dar con el cuento perfecto cuesta...
yo soy mucho más de novela. Si me gusta la forma de narrar de un autor, yo quiero que se enrolle, que cree ambientes, que avance poco a poco, que retarde el desenlace, que me vaya definiendo a los personajes con una situación y con otra, en un diálogo y en otro, que yo me vaya a la cama intrigado sobre la evolución que va a tener la historia, que al día siguiente esté deseando retomar el libro, etc., etc., en fin muchas cosas que son incompatibles con un relato breve.
Lo que es o no "paja" en una novela es una cuestión bastante subjetiva. Es probable que, si eres un jilguero exigente y tienes muchas lecturas sobre tus plumas, a ti te sea especialmente difícil encontrar obras que mantengan a lo largo de muchas páginas un nivel que te llene.
Respecto a la "paja", por supuesto, es algo subjetivo. Yo le llamo paja a todo aquello que, no siendo esencial a la historia, contribuye a bajarle el nivel a la novela. Si no se lo baja, lo no esencial se conviertre en gratas divgaciones (eso de lo que tú me hablas). Afortunado de ti, Primo, si siempre es grano lo que hallas en tus lecturas
¿Qué me está pasando? Las cavilaciones de Juan Mute
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