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Título original:The J. M. Barrie Ladies' Swimming Society
Joey Rubin es una joven arquitecta y decoradora que vive en Nueva York. En un entorno tan competitivo y dominado por los hombres, su adicción al trabajo la ha llevado a descuidar tanto sus antiguas amistades que al único ser a quien se siente realmente unida es a su perra Tink. Pero su vida dará un vuelco cuando Joey viaja a la campiña inglesa para supervisar la reforma de la vieja mansión donde el mismísimo J. M. Barrie escribió Peter Pan. Cuando Joey llega al pequeño pueblo se siente totalmente desubicada. Pero su mundo vuelve a tener sentido cuando conoce a las chicas del Club Femenino de Natación J. M. Barrie, un grupo de octogenarias que, además de la amistad que mantienen desde jóvenes, comparten una curiosa pasión: bañarse todos los días del año en las aguas de un lago cercano al pueblo. Estas sirenas de carne y hueso, cargadas de historia y de humanidad, ayudarán a Joey a descubrir el verdadero sentido de la vida y la importancia de la auténtica amistad.
Fecha de publicación: 01/06/2012
320 páginas
ISBN: 978-84-08-10983-9
Formato: 14,5 x 21,5 cm.
Presentación: Rústica con solapas
Traductor: Ana Belén Fletes Valera
Pues se lee muy rápido. Llevo como un 75% leido y se hace muy ameno.
Una historia agradable.
Joey, no empieza con buen pie su aventura en Inglaterra pero poco a poco comienza a sentirse más integrada en el pueblo y creo que en parte gracias a las chicas del Club.
Comienza una relación con Ian, el guardés de la casa que está reformando aunque la noticia no es bien recibida ni por Sarah, su amiga de la infancia que vive en Londres y a la que hacía 15 años que no veía, ni por Lilia, suegra de Ian y miembro del Club de natación.
La única que parece alegrarse es Lily que creo que necesita una madre aunque no sé hasta qué punto está dispuesta Joey a comprometerse.
Ya lo he terminado.
Pues me ha gustado mucho . Es una historia muy amena y que se lee un un momento.
Al final, la estancia en Inglaterra cambia toda la vida de Joey; no sólo recupera su amistad con Sarah y hace nuevas amigas sino que encuentra el amor.
Un bonito final para una bonita historia.
A mí también me ha gustado mucho. La novela es la personificación de la sencillez, la elegancia, el savoir-faire, con unos personajes entrañables e inolvidables y una trama que pasa a estar en un segundo plano. Lo importante es la interacción entre los protagonistas y cómo se desarrollan las amistades.
Es una preciosa oda a la amistad y a las segundas oportunidades. La ambientación en Inglaterra, por otro lado, me ha parecido soberbia, y en todo momento he visualizado la casa de James M. Barrie, el autor de Peter Pan, y sus alrededores.
Cuando llego a la última página sin que se sepa nada más de la relación entre Joey e Ian, estaba cabreadísimo. Cuando él aparece en la puerta de la casa de ella en Nueva York, no he podido evitar un suspiro de "¡Qué bonito!".
¿Y qué decir de las cinco ancianitas? A cual más entrañable (salvo al principio Lilia, la madre de Cait, la esposa fallecida de Ian) y con una vitalidad y una energía envidiables.
Una novela recomendable, bien hilada y muy ágil, que hará las veces de una brisa de aire fresco entre lecturas más densas.
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