Voy por el capítulo 21, supongo que esta noche lo finiquitaré.
Estoy con muchas cosas en la cabeza y me cuesta horrores concentrarme en un libro, empiezo varios y los abandono, sabía que con Caroline March no me iba a pasar eso, siempre me engancha, con los tres, y no me permite dejar de leerlos, me encanta eso.
Aunque el argumento es diferente a los otros yo sí lo veo muy muy de la autora, que si no supiese quien lo escribió me recordaría mucho a ella. A ver como me explico sin soltar spoiler ni de este libro ni de ningún otro.
Trata temas duros pero que a la vez están a la orden del día, como en otras ocasiones, aunque los temas sean diferentes. Ocurren casualidades muy casuales, jajaja, en algún momento me hizo irme mentalmente a Mi alma gemela y sus casualidades que me resultan no muy creíbles. La historia de amor es fuerte pero la rodea de muchas cosas a su alrededor, sabe captar tu atención en todo momento. La protagonista es un poco "inestable" como sucede en Mi alma gemela (es que Búscame en tus sueños lo tengo más difuminado en la mente) y lo aliña con toques de humor de vez en cuando. El rival del absoluto protagonista suelen ser muy insípidos y no es rival alguno ante el lector,... Y le encanta liar las cosas, jajaja. También como en su otro libros te "encierra" en un espacio concreto y al final te hace sentir que estás ahí metida, ya se te torna un lugar familiar ese ático de Praga. Yo no dejo de ver marcas "made by Caroline March" por todo el libro, ahora lo escribo así groso modo según me viene a la cabeza pero si lo analizase tranquilamente seguro que vería muchas más cosas.
No puedo dejar de comentar esos guiños a Escocia ¡Cómo le gusta Escocia a esta mujer!, pero como a mí también me encanta, pues todos tan contentos.
Y por supuesto, tal y como hace siempre esta autora, me ha enganchado hasta las trancas. Siempre lo hace, tiene defectos en sus narraciones pero esa gran virtud hace que los demás quede totalmente anulado, tiene un talento especial para meterte en la historia y hacértela vivir junto a sus personajes.
A riesgo de hablar antes de finalizar el libro, tengo que decir que me está gustando mucho y que seguiré leyendo todo lo que vaya sacando porque nunca me ha defraudado.
Por cierto, no puedo soportar a Piero
Michael es demasiado perfecto, aunque me gusta que le haga meter la pata de vez en cuando para darle así más realismo al personaje y hacerlo más humano; y con Gabriela, no sé, me ha dado lastimilla en algún momento, le hubiese dado un tironcillo de orejas en algún momento pero nos deja ver el tormento de su alma, la pobre se merece ser feliz de una vez por todas.
Por otra parte, hay mucho sexo, que ahora es lo que está de moda y lo que vende, nos guste o no. Sexo, violencia, drogas y alcohol