Cartas - Rosalía de Castro

[salvatraca]

Edición: gratuita
año: 1861-1884

Cartas de Rosalía a su marido, Manuel Murguía; a José María Posada, Ángel Baltar y Ubaldo A. Insúa.
Esta edición tiene 17 páginas, la que yo tengo (de las Obras Completas) tiene 22

[salvatraca]

Rosalía contrae matrimonio con Manuel Martínez Murguía en octubre de 1858. Murguía era un intelectual y periodista de reconocido prestigio. Conoció a Rosalía en Madrid. Sobre las relaciones de este matrimonio existen diferentes versiones. Hay quien sostiene que Rosalía tuvo un amor anterior con Aurelio Aguirre y que nunca abandonó esta relación, lo cual le produjo una cierta mala conciencia y bastantes remordimientos. Pero también hay quien habla de ciertas infidelidades por parte de Murguía.

Lo que sí es cierto es que, a la muerte de Rosalía, Murguía quemó casi todas las cartas de su mujer. El propio Murguía decía:

Como ya se acercan los días de la muerte, he empezado por leer y romper las cartas de aquella que tanto amé en este mundo. Fui leyéndolas y renovándose en mi corazón alegrías, tristezas, esperanzas, desengaños, pero tan llenas de uno que en realidad, al hacerlas pedazos, como cosas inútiles y que a nadie importan, sentí renovarse las alegrías y dolores de otros tiempos.
Verdaderamente la vejez es un misterio, una cosa sin nombre, cuando he podido leer aquellas cartas que me hablaban de mis días pasados, sin que ni mi corazón ni mis ojos sangraran. ¿Para qué?, para que me decían. Si hemos de vernos pronto, ya hablaremos en el más allá.

Entre las hijas destruyendo obras de Rosalía y su marido quemando cartas y diarios...menuda familia.

Las cartas (las pocas que han quedado) están muy bien. Nos dan una idea de como era la gran escritora gallega; en ellas habla de amor, de cosas cotidianas y mundanas, de trabajo. La que más interesante me ha parecido es una en que dice que no piensa volver a escribir nada en el dialecto gallego ni sobre Galicia; profundamente dolida porque la habían acusado de no amar a Galicia ¡pero quién fue, o quienes fueron los imbéciles que escribieron semejante barbaridad!
Gran favor le hicieron a su tierra...

[natura]

Entre las hijas destruyendo obras de Rosalía y su marido quemando cartas y diarios...menuda familia.

Y lo que quedó ya se encargó doña Carmen Polo de quemarlo cuando se quedó con el Pazo de Meirás en 1938. Una vergüenza cómo se ha tratado a esta mujer y a su obra desde muy joven.

Por lo que veo en la ficha, este ejemplar es gratuito ¿alguna edición especial que se regalara en un organismo público o así? Vamos, que o vives en Galicia o no habrá forma de conseguirl, supongo.

[salvatraca]

Lo del Pazo de Meirás no tiene nombre; este tipo de cosas son las que me avergüenzan de ser español.

Y las cartas están puestas gratuitamente para todo el mundo que las quiera leer:
En línea en Cervantesvirtual Aquí
o puedes descargartelas en pdf de Aquí
y en epub de Aquí

[natura]

Gracias, salvatraca, siempre olvido que en Cervantesvirtual hay un montón de material descargable de autores clásicos Igual que, de vez en cuando, confundo escritoras gallegas de la talla de doña Emilia Pardo Bazán y doña Rosalía de Castro y suelto lo de la quema de las cartas de Pardo Bazán como si fueran las de Rosalía. Menos mal que hay amigos que me avisan de mis metepatas para que pueda corregirlas (gracias otra vez a élyasabequién).

En fin, que agradezco de nuevo el hilo y los enlaces. A ver si les echo un vistazo y comento ya sin equivocaciones.

[salvatraca]

Ni me había dado cuenta, pensé que relacionabas a Rosalía con la condesa de Pardo Bazán; a buenas horas la de Compostela hubiese podido comprar un Pazo señorial como ese (en las cartas verás como habla de estirar cinco duros para que le lleguen para pasar la semana.). Su familia tuvo uno pequeñito, pero lo perdieron y Rosa acabó sus días en una casita de Padrón (cerca de la de Cela), la famosa "La Matanza" que es ahora la casa museo (yo he estado y es preciosa,
igual que el lugar).

[Aben Razín]

Gracias por abrir el hilo, salvatraca

Habéis dejado mucha información al respecto y ¡muy interesante!,