Cuéntame un cuadro (Juego)
- Edgardo Benitez
- No tengo vida social
- Mensajes: 1090
- Registrado: 12 Feb 2017 14:10
- Ubicación: El Salvador
- Contactar:
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Tenía la cara asustada
Con el dinero que junté gracias a trabajar en la bocacalle, logré realizar algunas cosas: compré ropa, zapatos y no volví a dormir en el parque.
Renté una habitación pequeña situada a la orilla de la calle. La dueña era una mujer de alhajas y sonrisa agradable, claro que lo era solo conmigo. Con los demás inquilinos era antipática y mal hablada. Era dueña del block entero con catorce apartamentos, en la parte de atrás había construido un pequeño hotel al que administraba personalmente. sin la ayuda de nadie. Se dedicaba a sus negocios de manera inteligente y ordenada. Creo que nos caímos bien desde mi llegada y por las noches venía a mi habitación a platicar y hacerme compañía. Decía que mi manera de comportarme le inspiraba confianza y manifestaba su deseo de apoyarme. También decía que admiraba mi coraje, estaba segura que era una herramienta que debía usar y que me serviría más adelante para resolver mi vida.
Una noche de tantas, doña Josefa, me manifestó su confianza al ofrecerme la administración del Hotel y sus otros negocios, prometió no cobrarme la renta si aceptaba el nuevo empleo. Como yo le dije que sí sin pensarlo, a partir de ese día ya no visité la calle para buscar trabajo, y también tomé la decisión de alejarme de Andrés. No quería cargar con su vida y la mía.
Yo pensaba que ella cuando llegaba a mi departamento, hacía algunas cosas como jugar ajedrez o ver los programas nocturnos de MTV, porque deseaba matar el tiempo. Se me hacía imposible no pensar en mi futuro o en las tareas que necesitaba emprender para mañana. Pero lo hacía porque deseaba sentir mi amistad. Ella estaba sola, no tenía a nadie y se aseguraba de sostener mi amistad a base de regalos y estímulos. Anoche cuando vino a mi apartamento traía una bolsa grande, con una tarjeta en la cara anterior. Decía “Para el ser que más admiro”. Cuando vi el contenido del paquete me llevé una sorpresa, era un par de zapatos de plataforma. De moda. “Te vendrán bien”. “Sé que te gustará usarlos por las noches cuando venga a platicar contigo”. Tenía la cara asustada. No comprendí en realidad los alcances de aquella manera de mirar y sonreír al verme. Esa noche después de muchos argumentos nos besamos. Me fue imposible resistir a sus atenciones, a tanto gusto por servir a mis intereses y necesidades. “Ya no estamos solas”, me dijo, “ahora podemos vivir como lo soñamos”. Fue así que por primera vez dormimos juntas.
Con el dinero que junté gracias a trabajar en la bocacalle, logré realizar algunas cosas: compré ropa, zapatos y no volví a dormir en el parque.
Renté una habitación pequeña situada a la orilla de la calle. La dueña era una mujer de alhajas y sonrisa agradable, claro que lo era solo conmigo. Con los demás inquilinos era antipática y mal hablada. Era dueña del block entero con catorce apartamentos, en la parte de atrás había construido un pequeño hotel al que administraba personalmente. sin la ayuda de nadie. Se dedicaba a sus negocios de manera inteligente y ordenada. Creo que nos caímos bien desde mi llegada y por las noches venía a mi habitación a platicar y hacerme compañía. Decía que mi manera de comportarme le inspiraba confianza y manifestaba su deseo de apoyarme. También decía que admiraba mi coraje, estaba segura que era una herramienta que debía usar y que me serviría más adelante para resolver mi vida.
Una noche de tantas, doña Josefa, me manifestó su confianza al ofrecerme la administración del Hotel y sus otros negocios, prometió no cobrarme la renta si aceptaba el nuevo empleo. Como yo le dije que sí sin pensarlo, a partir de ese día ya no visité la calle para buscar trabajo, y también tomé la decisión de alejarme de Andrés. No quería cargar con su vida y la mía.
Yo pensaba que ella cuando llegaba a mi departamento, hacía algunas cosas como jugar ajedrez o ver los programas nocturnos de MTV, porque deseaba matar el tiempo. Se me hacía imposible no pensar en mi futuro o en las tareas que necesitaba emprender para mañana. Pero lo hacía porque deseaba sentir mi amistad. Ella estaba sola, no tenía a nadie y se aseguraba de sostener mi amistad a base de regalos y estímulos. Anoche cuando vino a mi apartamento traía una bolsa grande, con una tarjeta en la cara anterior. Decía “Para el ser que más admiro”. Cuando vi el contenido del paquete me llevé una sorpresa, era un par de zapatos de plataforma. De moda. “Te vendrán bien”. “Sé que te gustará usarlos por las noches cuando venga a platicar contigo”. Tenía la cara asustada. No comprendí en realidad los alcances de aquella manera de mirar y sonreír al verme. Esa noche después de muchos argumentos nos besamos. Me fue imposible resistir a sus atenciones, a tanto gusto por servir a mis intereses y necesidades. “Ya no estamos solas”, me dijo, “ahora podemos vivir como lo soñamos”. Fue así que por primera vez dormimos juntas.
¡Hay vida antes de la muerte!
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
La primera impresión fue buena, aunque luego nos quisiste liar, Edgardo
Sin, lo tuyo es muy señor de los Anillos
Sin, lo tuyo es muy señor de los Anillos
Nuestra editorial: www.osapolar.es
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Megan, me alegra mucho que te haya gustado tanto
Lucía, sí, sí que tiene reminiscencias a la fantasía clásica
Lucía, sí, sí que tiene reminiscencias a la fantasía clásica
"Contra la estupidez los propios dioses luchan en vano" (Friedrich von Schiller)
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Edgardo, está muy bien, pero no tengo idea a qué imagen hace referencia
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Ella tenía todo el poder sobre mí, con su mirada dañaba hasta lo más hondo de mi ser. Sólo cuando estaba bajo las sábanas de mi cama, con la puerta del dormitorio cerrada con llave, descansaba sin miedo a ser poseída por la maldad de sus ojos. Fue una noche, estaba acostada, cansada de un día lleno de dolor, cuando la ví, el terror se apoderó de mí, ella, sí ella, estaba en mi mano, me miraba desde allí. Ya no tendría más paz, ya no podría respirar tranquila ni siquiera en mi soledad. Grité como una loca, el pavor que sentía me hacía temblar de tal forma que no lograba controlar mi cuerpo. La miré otra vez y lo supe, se había apoderado totalmente de mí, su ojo ya no dejaría de mirarme y yo no sabía qué hacer. En el momento de mayor desesperación, corrí al escritorio, tomé una flecha con la que abría las cartas y la clave en mi mano con toda la fuerza que pude. Desde ese momento ella ya no pudo verme, y ahora estoy en paz, aunque camine en la oscuridad de la muerte.
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Qué historia más terrorífica, Megan, la última frase me gusta mucho Se nota que la imagen que has puesto no inspira historias normales
"Contra la estupidez los propios dioses luchan en vano" (Friedrich von Schiller)
- Edgardo Benitez
- No tengo vida social
- Mensajes: 1090
- Registrado: 12 Feb 2017 14:10
- Ubicación: El Salvador
- Contactar:
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Y ahora... ¡quién pondrá una nueva Imagen?Megan escribió:Ella tenía todo el poder sobre mí, con su mirada dañaba hasta lo más hondo de mi ser. Sólo cuando estaba bajo las sábanas de mi cama, con la puerta del dormitorio cerrada con llave, descansaba sin miedo a ser poseída por la maldad de sus ojos. Fue una noche, estaba acostada, cansada de un día lleno de dolor, cuando la ví, el terror se apoderó de mí, ella, sí ella, estaba en mi mano, me miraba desde allí. Ya no tendría más paz, ya no podría respirar tranquila ni siquiera en mi soledad. Grité como una loca, el pavor que sentía me hacía temblar de tal forma que no lograba controlar mi cuerpo. La miré otra vez y lo supe, se había apoderado totalmente de mí, su ojo ya no dejaría de mirarme y yo no sabía qué hacer. En el momento de mayor desesperación, corrí al escritorio, tomé una flecha con la que abría las cartas y la clave en mi mano con toda la fuerza que pude. Desde ese momento ella ya no pudo verme, y ahora estoy en paz, aunque camine en la oscuridad de la muerte.
¡Hay vida antes de la muerte!
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
El tuyo es el que mejor refleja el cuadro que pusiste, tocaya
Nuestra editorial: www.osapolar.es
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Aún falta el tercer micro que refiera a la imagen ¿quién se animará?
- Edgardo Benitez
- No tengo vida social
- Mensajes: 1090
- Registrado: 12 Feb 2017 14:10
- Ubicación: El Salvador
- Contactar:
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Ya estuvieron los tres... ¿O no piensas valer el mío?
¡Hay vida antes de la muerte!
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
¿Y por qué no me respondiste esto?:
Megan escribió:Edgardo, está muy bien, pero no tengo idea a qué imagen hace referencia
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Pongo imagen
- Mister_Sogad
- Tigretón
- Mensajes: 3601
- Registrado: 20 Dic 2009 10:04
- Ubicación: Perdido en mis pensamientos
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
LA PALETA
<<Ahí está. Justo eso>>. Enmarcó el conjunto formando un cuadrado uniendo los pulgares y los índices de cada mano. <<Sería perfecto para la película>>. Su película. El culmen de casi cuatro años de esfuerzo.
Un camino de tierra, con un tramo de pasamanos de madera, serpentea entre una arboleda repleta de color; verdes, rojos, amarillos; al fondo sobresale un castillo de cuento. No una fortaleza de esas medievales de formas rotundas y achaparrado, no, no; es un castillo de aire... germánico, teutón, con cierto estilo moderno; una construcción de ladrillo claro con multitud de vanos coronados de arcos. Del conjunto nacen algunas torres redondas, con tejados puntiagudos en azul.
Sacó el móvil y empezó a echar fotos. Ojalá hubiera cargado la cámara. <<Ese color tostado queda espectacular con el verde. Y aquellos naranjas con un cielo añil serían de un impacto muy importante para el clímax de la trama>>.
La oscuridad lo pilló de improviso, había estado repasando las fotos mientras en su mente se desarrollaba lo que quería plasmar. Con cierto fastidio guardó el teléfono en la mochila y se preparó para una buena caminata de vuelta. Echó un último vistazo al castillo y el hechizo de la imagen lo atrapó.
Una luna lechosa impregna su blanquecino aliento al azul oscuro que la rodea, cerca se perfilan un puñado de nubes de tonos morados que parecen acariciar las afiladas torres. Los sillares de piedra se niegan a mitigar su luminosidad nacarada, en contraste con la arboleda oscura que ofrece contornos de erizadas ramas y hojas.
Sobrecogido, una idea se abre paso en su mente. <<Si espero al amanecer...>>.
<<Ahí está. Justo eso>>. Enmarcó el conjunto formando un cuadrado uniendo los pulgares y los índices de cada mano. <<Sería perfecto para la película>>. Su película. El culmen de casi cuatro años de esfuerzo.
Un camino de tierra, con un tramo de pasamanos de madera, serpentea entre una arboleda repleta de color; verdes, rojos, amarillos; al fondo sobresale un castillo de cuento. No una fortaleza de esas medievales de formas rotundas y achaparrado, no, no; es un castillo de aire... germánico, teutón, con cierto estilo moderno; una construcción de ladrillo claro con multitud de vanos coronados de arcos. Del conjunto nacen algunas torres redondas, con tejados puntiagudos en azul.
Sacó el móvil y empezó a echar fotos. Ojalá hubiera cargado la cámara. <<Ese color tostado queda espectacular con el verde. Y aquellos naranjas con un cielo añil serían de un impacto muy importante para el clímax de la trama>>.
La oscuridad lo pilló de improviso, había estado repasando las fotos mientras en su mente se desarrollaba lo que quería plasmar. Con cierto fastidio guardó el teléfono en la mochila y se preparó para una buena caminata de vuelta. Echó un último vistazo al castillo y el hechizo de la imagen lo atrapó.
Una luna lechosa impregna su blanquecino aliento al azul oscuro que la rodea, cerca se perfilan un puñado de nubes de tonos morados que parecen acariciar las afiladas torres. Los sillares de piedra se niegan a mitigar su luminosidad nacarada, en contraste con la arboleda oscura que ofrece contornos de erizadas ramas y hojas.
Sobrecogido, una idea se abre paso en su mente. <<Si espero al amanecer...>>.
- Edgardo Benitez
- No tengo vida social
- Mensajes: 1090
- Registrado: 12 Feb 2017 14:10
- Ubicación: El Salvador
- Contactar:
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Sabía que Dante vendría pronto a recogerla, pero no deseaba presentarse en esas fachas. Con solo que a él no se le ocurra regresar al lugar de anoche, se dijo.
El vestido ocre seguía cautivando su deleite. Le parecía combinar muy bien su cabello largo. Caía como cascada sobre la cadera ancha. Al verse de espaldas en el espejo y notar su trasero ajustado sabía que era su arma letal para cautivar a quien ella deseara.
Ya esperaba el suave ring. Cuando lo vio parado allí en la puerta no pudo evitar lanzarse sobre él y besarlo. Con avidez subieron al coche y tomaron la carretera del Sur. Iban rumbo a la montaña, allí iban a encontrase con la noticia que tanto habían esperado. Sabían que no tardaría mucho tiempo para alcanzar su objetivo. El castillo al fin sería de los dos y nadie descubriría los cuerpos de la abuela y su peligroso joven amante.
El vestido ocre seguía cautivando su deleite. Le parecía combinar muy bien su cabello largo. Caía como cascada sobre la cadera ancha. Al verse de espaldas en el espejo y notar su trasero ajustado sabía que era su arma letal para cautivar a quien ella deseara.
Ya esperaba el suave ring. Cuando lo vio parado allí en la puerta no pudo evitar lanzarse sobre él y besarlo. Con avidez subieron al coche y tomaron la carretera del Sur. Iban rumbo a la montaña, allí iban a encontrase con la noticia que tanto habían esperado. Sabían que no tardaría mucho tiempo para alcanzar su objetivo. El castillo al fin sería de los dos y nadie descubriría los cuerpos de la abuela y su peligroso joven amante.
¡Hay vida antes de la muerte!
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni les importa.
Pero si te pego en el centro, será por filosofía.
Pero por poesía, serás mi centro.
Re: Cuéntame un cuadro (Juego)
Tigre, final demasiado oscuro para imagen tan luminosa.
Edgardo, le pega ese final fenomenal a la foto
Edgardo, le pega ese final fenomenal a la foto
Nuestra editorial: www.osapolar.es
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños