Y terminé. Mucho mejor la última parte que los dos primeros tercios, en los que he tenido que poner una alta dosis de voluntad para pasarlos. No es una novela fácil, ni Goethe un escritor sencillo. En este caso se agradece el extensísimo prólogo y los pies de páginas, aunque a veces se hagan fastidiosos (yo tengo una manía particular a los traductores que no paran de inmiscuirse y este era de esos) pero me interesa Goethe y es imprescindible alguna que otra explicación para entender, aunque sea un poco, todo el tema.
Buena parte de la novela está dedicada al teatro. De hecho se narra al mínimo detalle la preparación de Hamlet en la compañía de Wilhelm, pero como digo al milímetro; los guiones (que si se debe ser fiel al original, que si no, bla bla); los actores (que como se debe representar, que quien está o no capacitado); los escenarios...; todo todito todo. Luego también el gran día de la representación (estaba yo ya de Hamlet...) En fin, que Goethe era gran admirador de Shakespeare, eso me ha quedado clarito como el mismo agua. Por otro lado hay gran parte de tema autobiográfico, las marionetas que le regalaron a Goethe en su niñez que por supuesto también tiene Wilhelm, la quema de esos primeros escritos de juventud. Y esa búsqueda vital sobre a que dedicarse, o sobre lo que uno está realmente dotado, que no tiene por qué coincidir con lo nos apasiona, todo ello está muy presente en la novela. No me ha quedado claro finalmente
hacia donde le llevan por fin esos años de aprendizaje, porque el final no es otro cosa que un matrimonio con un ser angelical (y de la nobleza).. ¿tanta búsqueda para eso? entiendo que Novalis criticara la novela en ese sentido, yo he tenido al final una reacción parecida. ¿Qué pasa entonces con sus inclinaciones hacia el arte? Parece ser que hay una segunda parte que escribió Goethe en su vejez, no sé si traducida al español, quizá allí se aclare algo más, o yo no he sabido encontrarle el significado... Por otro lado los personajes más espontáneos o más novelescos, esos personajes que enamoran por su peculiaridad, como son Mignon y el arpista, curiosamente los dos italianos y mucho más viscerales que el resto de personajes, terminan muriendo Me ha fastidiado la poca importancia que se le da Wilhelm a la muerte de Mignon, no sé, Wilhelm no me ha gustado en ningún momento la verdad |
Encantadora Mignon, el arpista, y toda su trágica historia (muy culebresca). Wilhelm, como he dicho en el spoiler, me ha gustado poco o nada. A ver si algún día termino de leer el Enrique de ofterdingen de Novalis que dicen que lo escribió como replica al Meister de Goethe.