Hija de un general del zar, Sacha Savarof abraza los principios revolucionarios y se entrega a la defensa de la justicia y de la libertad, y, tras diversas peripecias por Suiza e Italia, se casa en segundas nupcias con el pintor español Juan de Velasco. En España, sin embargo, tampoco encuentra la felicidad, pues a un nuevo fracaso conyugal se une el choque con la mentalidad cerrada y retrógrada que advierte en las gentes durante sus viajes por el norte de la Península, Madrid y Andalucía, y que contrasta con el carácter, costumbres y formas de vida de otros pueblos europeos.
Esta novela pertenece a una trilogía llamada "Las ciudades", que la componen César o Nada, El mundo es Ansí y La sensualidad pervertida, pero se pueden leer de forma independiente.