Mayo de 2010
La protesta Henry James
Colección Narrativas del Olivo Azul
Traducción Pablo Sauras
Un huracán asola Dedborough Place: las deudas de juego contraídas por Kitty, la hija mayor. Con las arcas vacías, el viudo Lord Theign descuelga La bella duquesa de Waterbridge para venderlo al multimillonario norteamericano Breckinridge Bender; y se desatan las iras, los enredos, las protestas. Con lenguaje exuberante y manía de meter el dedo en la llaga, James describe un ambiente en que las apariencias valen más que cualquier cheque.
La protesta ejerce como oráculo: ¿convencerá la transacción a Lady Grace, la sensata hija pequeña, entre el honor familiar y el amor por un plebleyo? ¿Y el crítico Hugh Crimble, callará o impedirá el expolio del patrimonio británico? ¿Lady Sandgate, también viuda y también coleccionista, qué pensará?
Preguntas con o sin respuesta en un texto que parte de una obra de teatro, y de ahí la agilidad de sus diálogos, la supremacía de la acción.
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La protesta es la última novela de Henry James. Breckenridge Bender, un millonario norteamericano, llega a Inglaterra con el propósito de adquirir obras de arte, y se dirige a Dedborough, mansión del endeudado Lord Thingn. Pero la plutocracia y la aristocracia entran en un conflicto inesperado cuando un joven connaisseur, que busca establecer su propia reputación como especialista, declara que una famosa pintura de la colección del lord es en ralidad una obra más rara y aún más valiosa de lo que se había pensado.