Willian S. Burroughs
Título original: Junkie
Tradcción de Martín Lendínez y Francesc Roca
ISBN 978-84-339-2368-4
PVP sin IVA 9.83 €
PVP con IVA 10.22 €
Nº de páginas 224
Colección Contraseñas
William Burroughs publicó "Yonqui", en 1953, gracias a los buenos oficios de Allen Ginsberg, que se paseó con el manuscrito bajo el brazo por diversas editoriales hasta dar con Carl Solomon, un editor más valiente y más desesperado que otros, y que años después confesó que era tal el terror que le daba trabajar con semejante material que estuvo a punto de sufrir un colapso. Y así fue como apareció uno de los libros míticos de la literatura americana de nuestro siglo, pero también uno de los más prohibidos y subterráneos, en una editorial marginal, bajo el pseudónimo de William Lee. Burroughs aún no era el autor de "El almuerzo desnudo", ni se había constituido en el gran visionario de nuestra época, que ha inspirado a escritores, a músicos, a pintores y a cineastas, pero en esta descarnada, deslumbrante crónica de una adicción los vagabundeos en busca de droga, la avidez por el chute, la peculiar sexualidad y las no menos extrañas relaciones nacidas en la comunión de la droga estaba ya el fundamento de toda su obra posterior. Para Burroughs, un audaz explorador del lado más salvaje de la vida y la literatura, todo debe ser experimentado hasta el límite, aunque él nunca pierde la distancia de la inteligencia. Para llegar al paraíso de la droga hay que hundirse en su infierno, puesto que ambos son lo mismo, y la degradación nunca está muy lejos de la revelación. Porque la droga, finalmente, no es un medio para aumentar el goce ni un estimulante: es una manera de vivir.
editorial Anagrama
En primer lugar, un enlace para ver a Burroughs de abuelete. Da MAZO DE MIEDO:
Enlace
Relata parte de su vida. Aún no llega a la parte en que se pone a jugar con su mujer. Su primer libro publicado.
Al tipo éste, le gustaba jugar a ser Guillermo Tell con su señora esposa, que se ponía un vaso en la cabeza y él disparaba. Hasta que un día falló.... y le voló la cabeza. De ahí vino una depresión de pelotas y el amigo se fue a viajar por Europa, Asia y tal, para seguir drogándose como un condenado. Así salió El Almuerzo Desnudo, libro caótico donde los haya.
Es un libro bastante rapidito de leer, eso sí, te colocas de leerlo.
Extractos:
"Si las burbujas de aire mataran, no quedaría ningún yonqui vivo"
"Y es que Nueva Orleans es extraordinariamente ruidosa. Los conductores se guían sobretodo mediante el uso de los cláxones, como los murciélagos."
"Las zonas de droga no se reconocen por su aspecto, sino por algo que se siente, por un proceso semejante al del zahorí que busca y descubre agua subterránea. Va uno paseando, y de pronto, la droga contenida en las células se agita y se retuerce como la horquilla del zahorí: *¡Aquí hay droga!* ."
"Los fumetas no son como los yonquis. Un yonqui suelta el dinero , coge la droga y se las pira. PEro los fumetas no. Esperan que el camello les invite a unos canutos y a sentarse para charlar un rato. Y tienes que aguantar todo eso para vender dos dólares. Si vas directamente al grano, dicen que los deprimes porque los haces sentir miserables."
"La hierba no empuja a nadie a cometer delitos. Jamás he visto que nadie se pusiera agresivo bajo la influencia de la hierba. Los fumetas son muy sociables. Demasiado, para mi gusto. No puedo entender por qué la gente que asegura que la hierba induce al delito no exige que se prohíba también el alcohol. Todos los días se cometen delitos por borrachos que jamás habríian obrado así estando sobrios".
"Era el doctor Fredericks, jefe de psiquiatría del sanatorio.
Me hizo la pregunta que hacen todos:
-¿Por qué siente la necesidad de tomar droga, señor Lee?
Cuando se oye esta pregunta, se puede estar completamente seguro de que quién la hace no sabe absolutamente nada de la droga.
-La necesito para salir de la cama por las mañanas, para afeitarme y para tomar el desayuno.
-Quiero decir físicamente.
Me encogí de hombros. Lo mejor habría sido darle la respuesta que quería, para que se fuera: *Me causa placer* "
"El yonqui se pasa la mitad de su vida esperando."
Y mi preferida....
"a mi juicio, los fumetas son inescrutables"
editado por moderación
ajjajajajajajaja