La terrible historia de los vibradores asesinos - M. A. Buj
Moderadores: magali, Ashling, caramela
La terrible historia de los vibradores asesinos - M. A. Buj
84-8465-392-7 / 978-84-8465-392-9
Edición:Zaragoza, 2011
Colación:240 p. ; 23 cm. - (Sueños de tinta, 14)
Comentario:
Ajonio Trepileto, un convicto en libertad condicional al frente de un sex shop con licencia de tablao flamenco, vende una noche tres vibradores —modelo Big Julius— a una despampanante mujer llegada a bordo de un lujoso automóvil. Al día siguiente averigua que proceden de una partida defectuosa: el calor del motor puede hacerlos explotar. Temiendo regresar a prisión, el estrafalario protagonista emprende la búsqueda de la mujer para recuperar los vibradores antes de que ocurra algo irreparable.
De la mano de Claudita —la más oronda y cariñosa camionera jamás vis- ta—, Ajonio sigue el increíble rastro de los artilugios por Madrid, Zaragoza, Sitges y Barcelona, infiltrándose en sepelios, restaurantes de postín, ca- prichosos niditos de amor, solemnes despachos y hasta mansiones. Poco a poco, sin pretenderlo, se ve envuelto en una loca aventura donde no juega un papel menor la extraña manía de un acaudalado hombre de negocios. La debilidad de su propia carne y su irreflexiva osadía, lo arrastrarán a un final sorprendente.
La terrible historia de los vibradores asesinos es una magnífica novela de humor, donde los recursos cómicos tradicionales, la desenfadada trama y el pintoresco lenguaje con el que el protagonista se dirige al lector, forman un todo hilarante e inolvidable.
Editorial Mira
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Desde luego el título llama muuuuucho la atención
Todo arde de Juan Gómez-Jurado.
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Y el texto...creo que vamos a pasar un buen rato leyendolo
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- neftis
- osita
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
La verdad es que tiene buena pinta
Neftis
Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
¡¡¡Vaya título!!!
¿Es para mayores de...? No sé si estoy preparada para estas lecturas
La felicidad es un sillita al sol
Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Bueno, una chica como tú debe estar al día, así que leéltelo con nosotras no?
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Por lo menos tiene pinta de pasar un buen rato y echar unas risas mientras se lee, que ya es algo
Nuestra editorial: www.osapolar.es
Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Bueno, yo ya lo tengo. Ayer paseando por la Feria del Libro me encontré el libro y al autor que me lo firmó religiosamente. Amabilísimo y yo encantada de conocerlo. Por cierto, la dedicatoria con dibujito incluído me encantó
También me encontré con Julia que andaba de cháchara con él, pero ella no me firmó nada
¿Se vislumbra MC?
También me encontré con Julia que andaba de cháchara con él, pero ella no me firmó nada
¿Se vislumbra MC?
Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
¿ a la de ya?
si nos damos prisa lo leemos antes de la presentacion asi luego le discutire matices en directo
si nos damos prisa lo leemos antes de la presentacion asi luego le discutire matices en directo
Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
No te había visto, Julia. Yo no puedo ahora, estoy con un MC y tengo otro(s) a la vista
Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Hola chicas.
Este fin de semana empiezo con los vibradores asesinos. Si alguna de vosotras se quiere animar.....
Este fin de semana empiezo con los vibradores asesinos. Si alguna de vosotras se quiere animar.....
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
yo tambien tuve el honor de acudir a la presentación, aunque comparó la novela de humor con la histórica diciendo que no es lo mismo que presentar una momia.
Miguel Angel: Mis momias son unas cachondas.
dicho esto, espero tener un rato para leer este libro que tanto promete.
un fuerte abrazo y mucha suerte
Miguel Angel: Mis momias son unas cachondas.
dicho esto, espero tener un rato para leer este libro que tanto promete.
un fuerte abrazo y mucha suerte
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- neftis
- osita
- Mensajes: 23642
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Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
A ver que os parece. Yo me rei un monton leyendolo
Neftis
Re: La terrible historia de los vibradores asesinos.- M. A.
Hola a todos.
Voy por el capítulo X.
A estas alturas ya me encuentro inmersa en una vorágine de personajes variopintos sacados desde lo más profundo de las alcantarillas hasta lo más florido de la jet-set, en un mar de Dom Perignon, gaseosa y Johnny Walker Blue Label.
Es verdad lo que se dijo de este Ajonio en la presentación que tiene mucho de Quijote, en cuanto que se lanza a una aventura, más que aventura una empresa en la que va a poner todo su empeño en recuperar los malogrados vibradores, en ese eje Madrid- Zaragoza-Barcelona-Sitges, pero también atesora mucho de Sancho en cuanto a su sentido práctico de la vida (su propósito, sin duda, es no terminar de nuevo con sus huesos, y nunca mejor dicho en la cárcel). Pero también es un ser casposo, miserable, sucio y repugnante en su atuendo y en sus costumbres. Pero con todo le coges cariño y te alías en su causa.
En la novela me resulta muy atractivo la cantidad de palabras que Miguel Angel rescata de un lenguaje arcaico y de infinidad de argots y que pone en boca de Ajonio cuando va relatando sus aventuras.
La historia está repleta de situaciones inverosímiles que mezclan el glamour con la cutrería. Imaginarse a una despampanante rubia en un pedazo de Jaguar dirigirse a una chabola, que además es un sex shop en mitad de una carretera nacional, que entra en una atmósfera espesa cargada de efluvios malolientes a aceite rancio y huevos fritos, a comprar tres vibradores a un tipo que es como Torrente salido de la Buchinger, cuanto menos tiene que hacernos reir un buen rato.
El humor está presente en cada página, en la naturalidad con la que Ajonio se desayuna un par de huevos fritos con gaseosa, que es la misma con la que levanta una cartera en un funeral de postín o reduce a una pandilla de skins a planchazo limpio. Te lo imaginas al pobre derrengado después de tan violenta lid, arrastrando los pies por caminos polvorientos y de su mano el cordón de una plancha que pasea cual perro faldero, y te partes de risa .
Todo héroe, o antihéroe en este caso, tiene que tener su Louise Lane. Pero como no podía ser de otra forma, deformada por una lente cóncava y convertida en un mojón de más de tres quintales, aparece Claudita en la novela. Tampoco podía ser periodista ni fanática de la dieta macrobiótica. El universo de Ajonio sintoniza mucho mejor con una camionera adicta a las golosinas y los Doritos, y a cabalgar con frenesí sobre sus apisonados amantes.
Ya seguiré contando
Voy por el capítulo X.
A estas alturas ya me encuentro inmersa en una vorágine de personajes variopintos sacados desde lo más profundo de las alcantarillas hasta lo más florido de la jet-set, en un mar de Dom Perignon, gaseosa y Johnny Walker Blue Label.
Es verdad lo que se dijo de este Ajonio en la presentación que tiene mucho de Quijote, en cuanto que se lanza a una aventura, más que aventura una empresa en la que va a poner todo su empeño en recuperar los malogrados vibradores, en ese eje Madrid- Zaragoza-Barcelona-Sitges, pero también atesora mucho de Sancho en cuanto a su sentido práctico de la vida (su propósito, sin duda, es no terminar de nuevo con sus huesos, y nunca mejor dicho en la cárcel). Pero también es un ser casposo, miserable, sucio y repugnante en su atuendo y en sus costumbres. Pero con todo le coges cariño y te alías en su causa.
En la novela me resulta muy atractivo la cantidad de palabras que Miguel Angel rescata de un lenguaje arcaico y de infinidad de argots y que pone en boca de Ajonio cuando va relatando sus aventuras.
La historia está repleta de situaciones inverosímiles que mezclan el glamour con la cutrería. Imaginarse a una despampanante rubia en un pedazo de Jaguar dirigirse a una chabola, que además es un sex shop en mitad de una carretera nacional, que entra en una atmósfera espesa cargada de efluvios malolientes a aceite rancio y huevos fritos, a comprar tres vibradores a un tipo que es como Torrente salido de la Buchinger, cuanto menos tiene que hacernos reir un buen rato.
El humor está presente en cada página, en la naturalidad con la que Ajonio se desayuna un par de huevos fritos con gaseosa, que es la misma con la que levanta una cartera en un funeral de postín o reduce a una pandilla de skins a planchazo limpio. Te lo imaginas al pobre derrengado después de tan violenta lid, arrastrando los pies por caminos polvorientos y de su mano el cordón de una plancha que pasea cual perro faldero, y te partes de risa .
Todo héroe, o antihéroe en este caso, tiene que tener su Louise Lane. Pero como no podía ser de otra forma, deformada por una lente cóncava y convertida en un mojón de más de tres quintales, aparece Claudita en la novela. Tampoco podía ser periodista ni fanática de la dieta macrobiótica. El universo de Ajonio sintoniza mucho mejor con una camionera adicta a las golosinas y los Doritos, y a cabalgar con frenesí sobre sus apisonados amantes.
Ya seguiré contando
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