Ethel Krauze
Moderadores: Tessia, lunallena
Ethel Krauze
Amoreto
Te di, amor, mi nube y su coartada,
su aguacero de ramas en tu cuello
sin pensar que amarías el destello
que en mi sombra intuías como espada.
Fue la espada, amor, su luz nublada
lo que en agua trocaste como bello,
inasible fulgor de tu cabello
cuando pienso en la crin de la enramada.
Fue la malva nacida de tu dicho
cuando dices, amor, que tú me amas
ya no quiero escuchar ningún aviso
más que el alma que suena en este nicho
donde tú me descubres y me llamas
y es la llama que avisa dónde piso.
1
Re: Ethel Krauze
Amoreto V
Quiero ver en tus ojos el destello,
la inquietud de mi fibra, el rocío
en tus manos asidas a mi río,
el recodo en que habita lo más bello.
Quiero ser en la sangre de tu sello
hoja nueva en el vaso antes vacío,
ser, amor, tu sabor en el estío,
la delicia en el pulso de tu cuello.
Quiero andar tu sudor y tu saliva,
atreverme a probar el agua viva
que en tu beso refleja la dulzura
del estanque aromado y su tersura;
agua rauda y ardiente que cautiva
brillo de agua que colma mi hendidura.
1
Re: Ethel Krauze
Amoreto II
Me llevarás, amor, al alarido
de la yedra que canta en la ventana,
al donaire del silbo y de la grana
me llevarás, amor, que te lo pido.
Recorrerás el verso guarnecido
de cadencias y aromas, caravana,
aprenderás la voz de la campana
que apacienta en su vértice el sonido.
Y encontrarás el ápice del fuego
que recorre en su ruta la cigarra,
volverás a la orilla del sosiego
cuando vibre en tu lecho sin amarra
y mi vena se yerga con el juego
apacible que surge de tu parra.
1
Re: Ethel Krauze
Amoreto XL
Qué sombra puede más que tu memoria,
qué distancia te marca, amor, la duda
de mi entrega sin límite que exuda
sólo formas recíprocas de gloria.
Sólo formo la luz de nuestra historia
con la marca asombrada que desnuda
la indudable y gloriosa sed aguda
del amor entregado sin escoria.
Un racimo de luz, amor, espero
encontrar en tus manos y en tu cerco
para arder sin medida entre tu pecho.
Qué cercado calor de cuerpo entero
qué inmensa flor cuando a tu luz me acerco
qué indeleble esperanza en nuestro lecho.
1