Bueno, tras no poderme resistir a no leer nada nuevo de Sapkowski y a la espera de La Dama del Lago, probé con el inicio de esta Trilogía de las Guerras Husitas, una serie de novelas que han catalogado de históricas/fantásticas. Las Guerras Husitas (wikipedia dixit) fueron las cruzadas contra los partidarios de Jan Hus en Bohemia entre 1420 y 1434.Titulo: Narrenturm
Autor: Andrzej Sapkowski
Traducción: J.M. Faraldo
Reseña por corp
Lo primero, el Titulo, ¿Qué coño es Narrenturm?
Pues no es ningún secreto, la palabra es alemana y significa “La torre de los locos”, y el sentido de la traducción no es figurativo en ningún caso, por que la Narrenturm es precisamente eso: una especie de sanatorio/loquería donde meten a la gente a la que le faltan algunas luces. Además, la Narrenturm hace las veces de prisión de la inquisición cuando sus centros de reclusión están llenos de huéspedes.
Lo segundo, ¿Qué encontramos en Narrenturm?
Nos son narrados los devenires de Reinmar de Bielau (Reynevan), un sanador y herbolario silesiano (que tiene un pasado misterioso pero que desconocemos al no tener referencias en el libro) al que no se le ocurre otra cosa que beneficiarse a la mujer (una francesita borgoñesa) de un Sterz, un noble local cuya familia tiene bastante mala leche cuando de temas de cornamenta se trata.
La cosa no puede acabar bien, y cuando les sorprenden en el licito desarrollo de sus actividades nocturnas, Reynevan huye y los cuñados de la chavala (que son muchos y con muy mala saña) salen en su persecución, con tan mala suerte que el benjamín sufre un accidente y muere trágicamente.
Esto complica las cosas, y los tipos deciden no solo perseguir personalmente a Reynevan para someterle a todo tipo de torturas y vejaciones, si no que también contratan a media Silesia para que salga en su búsqueda y le capturen vivo.
Tras esta breve sinopsis, el siguiente punto es: ¿Cómo se estructura la novela?
Se trata de capítulos muy cortos precedidos de un breve resumen de lo que va a suceder, en este sentido me recuerda, aunque parezca extraño, a El Quijote, de hecho hay una referencia directa al final del libro.
La mayoría de los capítulos presentan una situación, que se desarrolla y concluye (en casi todas los casos excepto uno, que expongo mas adelante). En este sentido me recuerda vagamente a “El ultimo deseo” de la Saga de Geralt de Rivia, donde los capítulos son independientes y no siempre conexos temporalmente. En todo caso en su conjunto es una historia, de modo que lo de la sensación de falta de conexión es solo eso: una sensación.
Y aquí llegamos al punto principal de la reseña, y es que cuando pensaba en como definiría la novela, se me vio a la cabeza un adjetivo: es “atropellada”.
Para mí la definición es clara, pero para vosotros supongo que no, y ahora viene lo difícil: explicar por que.
Catalogar a Narrenturm de “Novela atropellada” viene del hecho de que los acontecimientos suceden rápidamente y sin pausa, uno tras otro, en capítulos cortos, en cada uno de ellos ocurre una cosa distinta, y concluye. Parece que se va pisando la acción de un capitulo a otro por lo frenético de la historia. Y claro, nos da la sensación de que se nos “atraganta” tanta peripecia.
A esto se le suma un efecto paralelo (tela también para explicar esto) que es el de la sensación de falta de continuidad de las situaciones (toma ya), nada es inmutable: me da igual que apresen a Reynevan en el capitulo por que al capitulo siguiente estará seguramente libre precisamente por que ninguna situación (estar en la prisión) dura mucho y acaba ahogada (o atropellada) por la situación siguiente (estar en libertad).
A todo este atropellamiento contribuye el primer punto señalado: capítulos cortos con sensación de cierta independencia. Supongo que una cosa es consecuencia de la otra, aunque no estoy del todo seguro que es causa y que efecto.
En fin, que todo este frenetismo, rapidez y avance continuo se ve complicado a su vez por otro detalle: coño, los nombres en polaco me vuelven tonto. No es fácil acordarse de nombres como Velek Chrasticky (¿a este no lo ha fichado el Barca?) Brázda de Klinstejn, Jan Hvezda Von Vicemilice, Bohuslav von Svamberk, Mlada Vozice, Stietencron, Puta de Czastolovice, Blazej Poraj Jakubowski, o de localizaciones como Vizmburk, Trebechevice, Sciborowa Poreba, Klodzko, Scinawka, Hradec Králové, etc. y como suceden tantas cosas, si en el capitulo 2 Reynevan huyo del temido Buko Krossig cuando en el capitulo 10 se lo vuelve a encontrar, te preguntas: ¿y quien cojones era este? ¿Conocido? ¿Amigo o enemigo?
Será debido a la falta de familiaridad del Polaco/Checo/Alemán, pero a mi se me hacia difícil seguir a los personajes, y cuando hablamos de las tropas de las diversas facciones (se enumeran los nombres de los señorines que van persiguiendo al protagonista), ni te cuento.
Tampoco ayuda el que el libro este ***lleno*** de frases en latín, checo, polaco, alemán, francés y algo de ingles. Confunden aun más al lector y hacen la lectura más lenta al tener que ir mirando continuamente las referencias al final del libro, donde (menos mal) aparecen todos los términos y su traducción.
Y es justo tras 400 páginas de vorágine, frenesí, desenfreno y frenética huida cuando todo se para de repente. ¡Quietos paraos! ¿Que ha pasado? Pues que han metido a Reynevan y a su compinche Scharley en la Narrenturm y es como el frenazo de un coche a 200 Km/h que para en seco.
¿Por qué ya no ocurre nada? Por que esto es la Narrenturm, la torre de los locos, aquí hay tranquilidad y sosiego, y quien se menee, le meto con el mechero.
Pues bien, aquí Sapkowski se tira 2 capítulos enteros en la tranquilidad del sanatorio. Como pasar de los rápidos de un rio a un remanso. Son los únicos 2 capítulos que tienen “continuidad” clara. Eso si, una aburrida tranquilidad de 50 paginas en las que no pasa absolutamente nada: charlan amistosamente de buen (y no tan buen) rollo con unos cuantos personajes (en resumen, o los locos del sanatorio o los presos de la inquisición), comen (relativamente) bien, descansan y curan sus heridas. ¿Y qué sentido tiene este descanso? Solo Sapkowski lo sabe.
Sin embargo, tras este reposo llegan las 100 mejores páginas del libro, cuando los héroes se unen al ejercito husita y asaltan Bardo. Solo por esta parte merece la pena leer el resto. Aquí Sapkowski retoma su mejor vena y por fin las cosas parecen comenzar a tener sentido, por fin vemos un futuro de los personajes, algo que pueden hacer en la novela, algo hacia donde avanzar, hacia donde progresar.
Y es justo cuando mejor pinta tiene la trama, cuando Reynevan se dispone a ir con los husitas a Bohemia, cuando se encuentra con Wolfhan Stelz y le jura por Dios y por la Patria que volverá para hacer justicia con su nombre y con su hermano (y de paso recoger a la nueva damisela de la cual se ha enamorado) es justo ahí, en ese punto, donde se acaba la novela.
Ya, bueno, pero ¿y la trama?
Pues bien, tras leer el libro, no tengo claro casi nada de la trama. Se que existen algunas facciones en el libro que luchan por el poder (supongo, en todos los libros se lucha por el poder de algún modo), pero no tengo claro quienes son ni a quien representan, bien por el batí burrillo de nombres polacos, bien por la confusión de las facciones y es que no son demasiadas las veces en las que nos ponen en el pellejo de los malos y sus maquinaciones y planes.
Por ejemplo, en el prometedor inicio de la novela, sale el padre de los Sterz, y su figura es imponente, un viejo impedido pero malvado y astuto hasta lo indecible. El MALO en letras mayúsculas, la mosca cojonera detrás de la oreja, el anticristo. Esa noche no pude dormir solo pensando en las perrerías que ese ser diabólico podría hacer a mi personaje principal. Pues bien, el malo maloso desaparece de la narración, se ha esfumado. No le han dado ni un solo plano principal. Y como a media película uno de los hijos: un simplón, un piltrafilla, un inútil entra en su dormitorio y se lo carga sin parafernalias, dos grititos ahogados y listo. ¿Es manera esta de morir el MALO maloso de la peli? ¿Por qué me lo presentan como el adalid del mal y luego tiene tan poco protagonismo y muere tan fácilmente que me siento estafado? Mi no comprender.
Y en este sentido creo que la novela acusa de cierta falta de complejidad, el 90% de la novela narra la aventura de Reinevan, pura y dura, no existen tramas paralelas, los personajes principales no se separan demasiado tiempo (recuerda, no hay situación que dure demasiado), de modo que la narración es única y no alterna entre unos y otros (como hace, por ejemplo, George Martin). No, aquí solo se narra desde la piel de Reinevan, no hay más frentes abiertos, y salvo un par de flashbacks de duración minúscula, no hay complicación en la estructura de la novela.
Si somos estrictos, la novela es un constante huir de algo y encontrarse con alguien, y volver a huir. A veces mirando el mapa parece que van en círculos por que te sientes “cansado” de tanto frenesí y sin embargo no han avanzado ni 20 millas en total (te das cuenta cuando llegan a Frankenstein y te dicen que hay 20 millas hasta Opala). Y entre tanto, de vez en cuando salen algunas facciones que se reúnen en secreto para hacer planes siempre relacionados con Bohemia y la herejía husita, pero como tampoco te puedes fiar, por el efecto “MALO MALOSO” descrito mas arriba, pues nada, a no tenerlos demasiado en cuenta.
Este efecto “malo maloso” vuelve a suceder con Kirieleison y sus compinches: resulta que llevas 200 paginas leyendo lo muy cabrones que son, los muchos pedos que se tiran y lo mucho que escupen Kunz Aulock (Kirieleison), Sybko de Kobelau y Walter de Barby y te haces a la idea de que son una especie de Conan de Cimmeria, Elric de Melnibone y Drizzt do Urden de excursión. En fin, para nada recomendable cruzarse con ellos. Pues bien, cuando estas tan tranquilo leyendo como el prota huye de los malos, de repente llegan unos tipos de los cuales no has oído hablar hasta ahora (y dudo que sus abuelas sepan que son caballeros) y se los cargan a los tres sin mas: a los tres, a Conan, a Elric y a Drizzt. Mmmm…
- Esto, oye, que se han cargado a ELRIC DE MELNIBONE …
- Ya, ¿y que? ¿Qué es inmortal o que?
- Pero… es que, es ELRIC, tío, ELRIC, el príncipe albino, NADIE puede con el.
- ¡Pues han podido! ¿acaso no sabes leer? “Y le sacaron las tripas y murió entre estertores”. ¿Ves? Ha muerto.
- Pero, pero… ¿y Conan?
- También, le pillaron cagando y le metieron un virote por el culo.
- Y Drizzt, ¿el de la suboscuridad?
- Se resbalo con la sangre de Elric y se clavo la cimitarra en el ombligo.
- Joer… la fantasía ya no es lo que era…
Bueno, y ¿Que tal el personaje principal?
Aun ahora no sabría definirlo si como genio o como un estúpido supino. Eso si, es de lo más anodino que me he encontrado.
- Reinevan estulto est: En múltiples ocasiones me encuentro diciéndome “pero que cojones hace este gilipollas”. Y es que en una huida que aparentemente es fácil “coge el caballo y corre”, Reynevan tiene una asombrosa habilidad para cagarla de manera incompresible y volverse a meter en problemas, como cuando los Caballeros de rapiña mencionan el tesoro de 1000 gúldenes que se les acaba de escapar y Reynevan comenta indiferente “no eran 1000, eran 500”. Todas las miradas sobre el “¿y tu que cojones sabes de ese tesoro que se supone que nosotros conocíamos y tu no, señorito?”, o como cuando delante de su traicionera amada borgoñesa, cuando es mas que evidente que ya “se ha echado a otro noviete” y encima de la nobleza, le suelta “y que es de nuestro amor”. Claro, la cara del nuevo pretendiente es de cine (¡será que la chavala era virgen!), ella lo niega y Reynevan acaba en prisiones por infamias y calumnias.
- Efecto confusión: parece que Reynevan siempre esta confuso (la noche lo confunde) y que es un sin sangre. No sabe si ama a Adela o a Nicoletta. Ni lo sabe ni se decide, deja escapar oportunidades y siempre acaba ciego por la pasión. Parece un bobo que solo tiene por cerebro la cabeza que hay por debajo del ombligo.
- Es un cruce extraño entre Mr. Bean y McGiver. Mr. Bean por que es un incompetente y siempre le acaban partiendo la cara, siempre le humillan y parece el más tonto del barrio, el chavalín del que todos se ríen. Y McGiver por que cuando la cosa se complica hasta el punto extremo, saca el chicle, hace cuatro pases, ata cuatro ramas de olivo y algo raro le saca del apuro. Esta dualidad contradictoria no acaba de convencerme.
Tras leérmela, no tengo dudas: es fantástica. Esto puede ser por dos motivos: por que no tenga ni idea de historia medieval de Europa del este (que es cierto) o por que realmente sea una novela fantástica ambientada en una época histórica. Me inclino mas por la segunda opción, pero lo que es innegable es que la novela esta repleta de elementos fantásticos, por lo que denominarla histórica no es demasiado correcto.
Un último detalle: ¿Cómo se traduce del polaco al castellano?
Pues despacito y por las piedras… mmm, esto.. No, no es así, se hace usando al mejor: Jose Maria Faraldo, que de nuevo hace una labor increíble, que ya vimos en los últimos libros de Geralt de Rivia y que reproduce aquí con gran maestría, para mí es todo un acierto el “ruralizar” a los silesios incultos que pueblan la novela.
En definitiva, ¿se puede leer?
Si, claro. Es Sapkowski: su estilo, su forma de narrar, su prosa, sus diálogos: todo.
Aunque creo que le sobran cosas y le faltan otras, la novela cumple su función y entretiene. No diría exactamente que engancha, por que al menos a mi no lo hizo, pero no aburre, desde luego, ni te da la sensación de que es un truño. Y las ultimas 100 páginas son ciertamente esperanzadoras, después del frenesí parece que Sapkowski encuentra el rumbo de la novela, si consigue que su barco no se tuerza, será una buena trilogía.
Personalmente, yo recomendaría la novela a los incondicionales de Sapkowski, por que tendremos parte de la esencia de la que estamos huérfanos desde que se dejó aparcada la traducción de La Daga del Lago, pero no la recomendaría ni a los amantes de la novela histórica ni a los de la novela fantástica, por que ni unos ni otros van a encontrar lo que buscan en este tipo de novela: en el caso de los primeros el contenido histórico es mas bien escaso (al final aparece lo mejor, diría yo) y tiene demasiados elementos extraños y en el de los segundos la épica queda por el camino (solo con ver la inutilidad del protagonista le dan ganas a un de coger la cimitarra y saltar a la novela a meter unos tajos al mas puro estilo Conan, aunque también es cierto que al final de la novela, el propio inútil de Reynevan coge un arma y se pone a dar tajos con gran acierto).
Esperaremos a la continuación, y continúe justo en el punto donde lo dejo el primer volumen, si es así, merecerá la pena la espera.