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julia escribió:
Fue adaptado al cine por el hijo de Luis Buñuel, en Leonor aludiendo al germen de cuento que encontramos en Lenore (1774), la balada vampírica de Gottfried August Bürger y es un tema recurrente. A mi la pelicula, me gusta aunque hace mucho que no la veo y no se que tal habrá pasado el tiempo por ella.

Me autocito,

Estos primeros relatos, tienen antecedentes claros y rasteables, Lenore parece ser que se inspira en un personaje real a quien se asocio con el vampirismo, real: la princesa Leonor Isabel Amalia Magdalena de Schwarzenberg, Hay una entrada en la Wikipedia sobre ellahttps://es.wikipedia.org/wiki/Leonor_de_Schwarzenberg

El poema se relaciona también con la Christabel de Coleridge, es un poema inconcluso, pero esta muy desarrollado y comentado en la web Espejo Gótico, Christabel . estaría también como fuente de Carmilla, ya que esta claramente sugerida una relación lésbica,

http://elespejogotico.blogspot.com.es/2 ... ridge.html

Ay, perdona, Julia, no te había leído!

nada, nada,

Cada vez que comentas algo es diferente, y no sabes si va a interesar o no.

Me encanta que lo hayas localizado y puesto aqui. Son poemas con una estética y una sensibilidad que se supone desfasada y nunca sabes si va a apetecer, a mi me gustan,

Ay, chicas, que no había leído los últimos comentarios

Fernweh escribió: Con todo, lo he disfrutado,

sobretodo porque al final Walter acaba mal

A mí me ha pasado igual, eso es lo que me ha gustado más
Ya me estaba temiendo que Walter

saldría indemne después de ser responsable de tantas muertes (vale, ya sé que el amor puede cegar, pero estar tan, taaaan ciego y haberse portado tan mal con la santa de Swanhilda y sus propios hijos no tiene perdón)

Lo que no me ha gustado mucho, porque me ha parecido estereotipado y retrógrado, es que una mujer sea taaaan buena (casi una santa) y la otra taaaan requetemala.

La buena, devota esposa que obedece las órdenes del marido y regresa a casa de su padre sin rechistar, incluso dejando a sus propios hijos, y la malísima mujer fatal, manipuladora y sin escrúpulos. La otra moraleja final, aparte del "deja a los muertos en paz", sería: "aléjate de las mujeres fatales, jamás conseguirás olvidarlas y regresarán para vengarse"

Walter es un bobo. Punto.


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Pero el cuento es precioso, y cada personaje, juega su papel.

julia escribió:Pero el cuento es precioso, y cada personaje, juega su papel.

sí. Además yo lo que le entiendo a Walter es su deseo de

revivir a su amada... Yo también lo haría. Pero es lo único que le excuso

¡Y qué ganas de leer el próximo!


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Aviso que el siguiente va con extras,

Primer cuento leído: me ha encantado. Un historia de amor romántico con todos los ingredientes clásicos: la sublimación del amado, el torbellino de la locura, el sacrificio por el otro, la fusión con el otro, y el olvido de la propia vida. Todo ello lo tiene Walter.

Yo más que resaltar las cuestiones morales, sobresaldría las estéticas: el tema de la muerte unido a la belleza. Decía Poe que "la muerte de
una mujer bella es, sin duda alguna, el tema más poético que existe en el mundo". Y parece que Brunilda lo es y mucho.

Aún con todo lo anterior, la referencia explícita al título como advertencia, - esta vez sí moralizante-, nos ilumina. Dejar a los muertos en paz, no remover la tierra (nunca mejor dicho), no mezclar el mundo de los vivos con el de los no vivos. Walter es un enamorado pero también un insensato al querer trascender estos límites. Sus consecuencias, en parte, son previsibles: se espera lo peor sea ello de la forma que sea. Muy interesante, y original, la de este cuento.

La mujer convertida en un ser amorfo y macabro del que nadie que haya osado invertir las leyes naturales, podrá jamás escapar.

La fatalidad como el mejor de los personajes posibles.

Pero es que es muy difícil resistirse a no resucitar a alguien amado tenindo la oportunidad. Evidentemente es peligroso jugar con esas cosas, pero estando en esa situación yo tengo claro que no hubiera dicho que no.


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artemisa27 escribió:Pero es que es muy difícil resistirse a no resucitar a alguien amado teniendo la oportunidad.

Sí, cierto, una situación nada sencilla o simple. El amor y la muerte se dan la mano, son indiscernibles (las dos pulsiones de las que luego hablará Sigmund Freud). Pero insisto: transgredir, en ese contexto, las leyes divinas tiene sus repercusiones. Y vaya si en el caso de Walter y alrededor no las tiene.

Altamente recomendable la lectura.

Acordaros de la versión del tema de King en Cementerio de Animales, o del genial cuento de La pata de mono deW.W. Jacobs ( os dejo enlace para que lo leaís si os apetecehttp://ciudadseva.com/texto/la-pata-de-mono/ . )

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