acabado
Muy buena novela. A pesar de no ahondar todo lo esperado en su vertiente más negra, es una novela policiaca muy superior a muchas otras. Todos los delitos relatados en los primeros capítulos quedan un poco descolgados, si bien es cierto que, sin embargo, apunta muchos de los actos delictivos que, más si cabe, en la época actual, asolan nuestra sociedad. De este modo, la corrupción urbanística, política y judicial, reflejan sin ambages lo que está sucediendo en esta España nuestra, donde los yernísimos cometen todo tipo de fraudes económicos amparándose en ONGs (sorprendente dado su carácter no lucrativo, y también aberrante ya que son , en estos casos concretos, organizaciones centradas en la infancia), los políticos se agencian sueldos que no les corresponden, dietas que no proceden y provocan desfalcos por cuantías bochornosas que harían enrojecer al mismísimo Fabra, y donde los jueces consideran o no punible lo que les viene en gana siempre que haya un buen fajo de billetes de por medio (veáse el reciente caso de Publio Cordón). Ni que decir tiene que la trata de blancas, unida al abuso de menores o la prostitución, constituyen una lacra que, por desgracia, no sólo afecta a esta España grande y libre, este país de pandereta en el que unos pocos se lucran, delinquen y putean al resto sin cargo alguno. No obstante, este libro plantea una visión positiva a este respecto y nos ofrece esa esperanza tan ansiada de "el que la hace la paga", algo que no se ajusta a la realidad. Pero bien es cierto que a veces conviene engañarse y no observar la realidad tal cual es, amén de ser menos desgraciado o al menos intentarlo. Esa ansia de ignorancia que tanto nos caracteriza, más aún en los tiempos que corren. Tiempos que también se ven reflejados en este relato, en el que la crisis tiene ciertamente escaso protagonismo, pero no por ello menos relevante. Así otorga ciertas cavilaciones al lector que son, cuanto menos, interesantes. Pero repito, no estaría mal ahondar en mayor grado en este tema. Pero en este aspecto, el libro es fiel a esta sociedad que conformamos, donde much@s no quieren ver lo que se nos viene encima y cierran los ojos, como si con ello evitasen que un rescate invasivo cierna sobre nuestras cabezas o el corralito no llegase jamás, y menos tan pronto como se le espera. Pero bueno, tampoco vamos a dar más trascendencia a esta estupidez humana que tanto prolifera.
En lo que respecta a la vertiente policiaca, cuenta con una gran trama, que posee alguna sorpresa grata incluso después de haber "acabado" y que raya a gran altura, con unos personajes bien perfilados, incluso en lo que a secundarios se refiere.
cinco estrellitas para una novela realmente buena, a la que añadiría más extensión para tratar como conviene su faceta más negra, pero que no adolece por ello de ningún fallo reseñable. Muy muy recomendable. Hasta pagar por ella merece la pena, a pesar de que te cobren por la misma tres veces más de lo que vale (como hacen con todas) y tus ahorros vayan destinados a ampliar esos "chaletes" que los magnates (por supuesto no los escritores) del sector se regalan a costa de esas personas "pudientes" que son los lectores. Pero bueno, al fin y al cabo me uniré a la masa y obviando la realidad que aprieta diré: "España va bien".