Shanghai, 1990, durante la gran mutación económica emprendida por Deng Xiaoping. El asesino de la joven Guan Hong Ying, una celebridad política trabajadora como modelo nacional, se convierte en un caso delicado para la imagen del Partido, un año después de los acontecimientos de la Plaza Tienamen. El recién asecendido inspector jefe Chen Cao, joven cuadro en auge y poeta de renombre, se muestra poco convencido por la máscara de perfección de la heoína roja, entregada a la causa del Partido, sin amigos ni amante. Con la complicidad de su ayudante el inspector Yu Guangming. Chen Cao inicia una investigación larga y minuciosa que lo llevará a descubrir el mundo secreto de Guan y una realidad muy alejada de la propaganda oficial sobre el viejo mito comunista. A imagen de aquella sociedad de los años noventa, confrontada a un cambio acelerado, llena de contrastes y contradicciones, dividida entre las tentaciones capitalistas y la hegemonía tambaleante del Partido.
Como dice la sinopsis, el libro es una novela de intriga policiaca, pero a mi me ha parecido más bien una ventana para ver el choque de la nueva y la vieja China a través de los diferentes personajes.
Desde aquí sorprende ver cómo la política interfiere y permea absolutamente todos los aspectos de la vida.
Otro de los puntos fuertes son los fragmentos de poemas de diferentes dinastías, remachando con su significado los hechos y sentimientos, principalmente, del inspector jefe Chen. Aunque debo reconocer que a algunas de las líneas no les encuentro ni pies ni cabeza
En definitiva, que me ha gustado mucho y os lo recomiendo
Una frase del libro que me encanta: Y, de pronto, su cuerpo se volvió suave, húmedo, insustancial como las nubes después de la lluvia.