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Sufro, sufro mucho que nadie quiera compartir conmigo esta maravillosa novela comentandola

julia escribió:Sufro, sufro mucho que nadie quiera compartir conmigo esta maravillosa novela comentandola

pues a mi me has tentado Julia, pero me da un poco de miedo que pueda resultar un poco ¿deprimente, frustrante?

No imation, esta tiene un tono muy ironico y divertido mas que melancolico o triste.

Tiene un humor corrosivo, hay personajes que son casi parodias, otros se burlan de la protagonista.

No se el desenlace, de momento lo que predomina es el sentido del humor.

La reucupero un rato a ver si me la acabo esta tarde.

Julia, no sabía que lo estabas leyendo .
El problema es que no puedo comentar mucho, porque hace bastantes años que lo leí. Lo que sí recuerdo es que me dejó una sensación rara, no se me hizo agradable... Sí recuerdo que había mucho humor, pero como dices, corrosivo. Y los personajes femeninos me dejaron mal cuerpo . Lo tengo que volver a leer.

Pues me esta encantando.

Me dejó mas descolocada Resurgir, esa si es como una losa.

Pero es que con esta estoy con una sonrisa en la boca todo el rato.

Supongo que los personajes me resultan afines.

Uf, Resurgir fue una losa, tú lo has dicho.
Me alegro de que te esté gustando. Yo lo tengo que volver a leer, definitivamente.

Es que Resurgir es una novela muy angustiosa, pero me gusto que conste.

Me da que voy a acabar el año alternando a estas dos mujeres, Oates y Atwood.

Me reconforta saber que a ti también te angustió, porque yo estaba pensando por aquella época que era porque lo estaba leyendo en un mal momento. Yo lo pasé muy mal leyéndolo, qué ganas tenía de acabarlo. Y no es que no me gustara, pero la protagonista me dejó fatal.
Y a esa Oates de la que habláis tendré que incarle el diente .

Es que la novela es oscura de narices.

Sorprende el contrate de registros de esta autora.

Fijate que cuando leia Orix y Crae pensaba en lo que me costaba asimilar que estaba escrita por una mujer.

Lo que mas me gusta es que te va dejando un regusto para rumiar mucho tiempo.

Creo que la proxima sera Doña Oraculo,

Sí, oscura de narices .
Pues Doña Oráculo es otra novela que me hizo revolverme en el asiento, eh? No tanto como Resurgir, pero también. La leí justo antes que Resurgir, una detrás de otra. Así que me dejaron hecha polvo. Pero no es tan oscura, ni de lejos. Ya tengo ganas de ver qué te parece a ti. Tiene unos personajes muy particulares .

pues sigo con ella con el susto en el cuerpo que casi la pierdo, me la deje olvidada en el gimnasio con lo que me costo localizarla.

sigo con ella, no estoy segura si el tono que predomina es el ironico y sarcastico, empiezo a creer que no.

Mariam se deja llevar por la situacion: parte de una vida estable, de una situacion que controla, creo que podriamos decir que esta satisfecha con su situacion. Conforme la historia avanza, y se hace realidad el compromiso de boda, a la que de momento se alude poco, se deja llevar, se disuelve. Hay un mayor distanciamiento en la mirada que transmite de la realidad que es su existencia, las personas que la rodean son poco mas que caricaturas, esbozos casi cosificados, en las que se destacan las partes mas grotescas. Hasta de Peter el novio perfecto, solo se sale de los esquemas Ducan, la irracionacionalidad entro de ese dejarse llevar, el es el presente, lo inesperado.

Casi acabada, me falta muy poquito.

Creo que hay una distancia entre la realidad que nos envuelve como lectores y la de la autora al escribir y que eso es lo que desconcierta.

El salto de la realidad del a mujer de los años sesenta, en el que la mujer ocupa un rol tan definido, en el que el cambio de mujer soltera, independiente a mujer casada, es tan diferente del actual, que es lo realmente hace que nos cueste conectar con Mariam y su entorno.

Ese elemento es clave, para la protagonsita la boda implica una ruptura completa con lo que es, con su realidad, por mas que nos la transmita distorsionada. Pasa de ser una mujer independiente a convertirse en un accesorio de Peter, en un esquema en el que encajaran los hijos, la vida de mujer casada, con una habilidades que se le atribuyen como un elemento casi genetico por el hecho de ser mujer.

En el fondo la mirada es muy convencional, Mariam no consigue huir de un camino trillado de lo que se espera de toda mujer normal, porque ella es la esencia de normalidad bajo que la esconden las dudas y la incertidumbre que solo asoma en esa mirada ajena somatizada con la anorexia que desarrolla en este proceso de adaptacion que son los meses previos a la boda.

Me queda la traca final,

Pues acabada,

Me gusta el final,

el que se reencuentre y vuelva a recobrar el equilibrio.

El final,

el que una vez roto el compromiso, se recupere de su falta de apetito, que comience a limpiar su espacio es como si limpiara tambien su vida, que se va cubriendo de mugre.

Cuando acabas un libro de esta mujer siempre deja un poso, es como si fuera una lectura de reaccion secundaria. Necesita rumiarse y comentarse. Lastima que haya sido una lectura en solitario.