Jezabel - Irène Némirovsky
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Leído.
Madre mía, qué barbaridad. Todos los personajes de esta mujer son intensos y exagerados, no hay término medio. No dudo que haya personas así, es lo malo, pero en algún momento me parecía sumamente ridícula Gladys, como una caricatura.
Siempre pienso que Nemirovsky para sus libros mira mucho a su alrededor, que toma cosas que ha vivido o conocido, y en este libro casi más, lo cual me da cierta curiosidad.
Por cierto que la portada de la edición inglesa le va mucho mejor que la de Salamandra.
Se me olvidaba, menudas perlas que suelta sobre las mujeres; sin faltarle razón por por otro lado, otra lástima.
Madre mía, qué barbaridad. Todos los personajes de esta mujer son intensos y exagerados, no hay término medio. No dudo que haya personas así, es lo malo, pero en algún momento me parecía sumamente ridícula Gladys, como una caricatura.
Siempre pienso que Nemirovsky para sus libros mira mucho a su alrededor, que toma cosas que ha vivido o conocido, y en este libro casi más, lo cual me da cierta curiosidad.
Por cierto que la portada de la edición inglesa le va mucho mejor que la de Salamandra.
Se me olvidaba, menudas perlas que suelta sobre las mujeres; sin faltarle razón por por otro lado, otra lástima.
Leyendo: Ensayos, George Orwell.
"Se dispersa y se reúne, viene y va", Heráclito.
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- Amaranta Úrsula
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Me encanta Irene, no hay ni una novela que no que haya gustado, de hecho ahora estoy releyéndolas.
Sus personajes son brutales, y los analiza de una forma que son perfectamente creíbles, esta novela en principio parecería una exageración pero la veo perfectamente posible. Imagino que las actrices de Hollywood tan superoperadas deben tener algún toque parecido al de Gladys.
También he estado escuchando un par de programas de radio sobre esta escritora y su vida es otra novela, casi de terror. Si su madre era algo parecida a Gladys, pobre niña... En definitiva, para mi es una escritora maravillosa con una capacidad de describir personajes y sus sentimientos impresionante. Me recuerda bastante a Stefan Zweig.
Por otra parte, he estado leyendo sobre el personaje de Jezabel y no logro descifrar la conexión entre Gladys y Jezabel (¿por qué el chico la llama así?) y la referencia que hay en el juicio:
— Es él quien lo «lamentó», como usted dice. ¿Qué contestó?
— Me recitó el sueño de Atalia, señoría.
— ¿Cómo?
— «Mi madre Jezabel ante mí se mostró...»
— Qué castigo... —dijo el magistrado mirando a la acusada.
No lo entiendo. ¿Conocéis algo de esta referencia?
Gracias
Sus personajes son brutales, y los analiza de una forma que son perfectamente creíbles, esta novela en principio parecería una exageración pero la veo perfectamente posible. Imagino que las actrices de Hollywood tan superoperadas deben tener algún toque parecido al de Gladys.
También he estado escuchando un par de programas de radio sobre esta escritora y su vida es otra novela, casi de terror. Si su madre era algo parecida a Gladys, pobre niña... En definitiva, para mi es una escritora maravillosa con una capacidad de describir personajes y sus sentimientos impresionante. Me recuerda bastante a Stefan Zweig.
Por otra parte, he estado leyendo sobre el personaje de Jezabel y no logro descifrar la conexión entre Gladys y Jezabel (¿por qué el chico la llama así?) y la referencia que hay en el juicio:
— Es él quien lo «lamentó», como usted dice. ¿Qué contestó?
— Me recitó el sueño de Atalia, señoría.
— ¿Cómo?
— «Mi madre Jezabel ante mí se mostró...»
— Qué castigo... —dijo el magistrado mirando a la acusada.
No lo entiendo. ¿Conocéis algo de esta referencia?
Gracias
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- gandolf
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Empiezo con este. Primer libro que leo de Irène Némirovsky. Libro que está en mi pila de pendientes y no tengo claro como ha llegado ahí. Juraría que @Ashling, por twitter, lo mencionó y lo valoró muy bien y por eso lo apunté, pero no lo puedo asegurar
Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Todos los libros de Nemirovsky, sin excepción, son buenos como mínimo, después están los excelentes.
En agosto nos vemos de Gabriel García Márquez.
Recuento libros leídos 2024
Recuento de libros adquiridos 2023
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
jajaja, qué memoria la tuya, gandolfo, seguro que le di muy buena puntuación.
- gandolf
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Llevo casi la mitad y me está gustando bastante. Es muy interesante toda la lucha interior de Gladys, como nos cuenta sus obsesiones, principalmente con su edad.
Estoy en la parte en la que aparece la hija
La verdad que no sé cómo se va a resolver el juicio inicial
Estoy en la parte en la que aparece la hija
y vemos el conflicto con la madre, Gladys. Le pide a la hija que retrase 2-3 años su felicidad, para contentarla y poder alargar su juventud lo máximo posible |
- gandolf
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Acabado! Qué barbaridad de personaje.
Novela muy recomendable con protagonista bastante odiosa.
Creo que la he llegado a odiar en muchas fases de la novela y me ha dado mucha pena en otras. No está bien de la cabeza. La obsesión que tiene con la juventud es enfermiza. En el momento que se relaciona que la víctima del asesinato inicial es su nieto, ya no he podido dejar de leer. Simplemente por confirmarlo. Qué locura! |
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Ahora que ya no haré spoiler os paso mi reseña.
No había leído nada de Irène Némirovsky (1903- 1942), una escritora judía francesa de familia ucraniana que falleció en un campo de concentración.
Una de sus obras más aclamadas es “Suite francesa”, pero no me apetecía adentrarme en el ambiente deprimente de la ocupación alemana durante mis vacaciones. Así que escogí “Jezabel”, una historia que tenía muy buenas críticas también.
Se trata de una novela clásica de una escritura impecable en el uso que hace la autora de los símiles y por su enorme habilidad para trabajar las imágener y crear vivas descripciones.
En cuanto al argumento, me ha recordado mucho a “El gran Gatsby” -por la forma tan fidedigna en que retrata el “dolce far niente” de las clases altas-, aunque se sitúe en Francia y parcialmente en otra época, antes de la Primera Guerra. Esta novela se publicó once años después que “El gran Gatsby”, así que ahí dejo la duda de si sirvió de inspiración a Irène Némirovsky, por si alguien quiere investigarlo.
La historia comienza “in media res”, en el juicio al que se somete a Gladys, la protagonista, por un asesinato, y retrocede a su juventud.
Llama mucho la atención el machismo del que hacen muestra tanto el público asistente y los testigos como el presidente del jurado. Comentan que las mujeres maduras deben tolerar el adulterio, que un hombre rechazado no tiene más salida que “entretenerse” -mientras que una mujer que “se entretiene” lleva una vida disoluta-, etc, etc. Esa mentalidad no resulta extraña para la época, pero sí porque se manifiesta de forma agresiva contra la acusada en un juicio, que debería ser un proceso más objetivo. Tal vez esta caracterización de los personajes fuese intencionada por parte de Irène Némirovsky, con el objetivo de darle tanto crédito a los chismes como al proceso para así trivializarlo todo. La propia narradora compara el juicio con una función de teatro.
Eso mismo tiene un efecto en el estilo: resulta muy moderno que la autora alterne el interrogatorio con los comentarios de parejas que forman parte del público sin previo aviso al lector.
A través del flujo de conciencia de Gladys totalmente obsesivo -vive exclusivamente para conservar su belleza y su juventud-, la protagonista se nos va desvelando como una viuda vanidosa y narcisista, que raya la psicopatía, cuya actuación sólo se justifica porque tuvo una madre fría y despreocupada. Como Atalía, reina tirana de Judea, hija de Jezabel. De ahí el título.
La relación entre la dócil hija de Gladys -Marie Thérèse, siempre a su sombra- y ella, una madre narcisista (que incluso la envidia), se trunca desde el momento en que la hija tiene su primer deseo.
El principal punto de giro llega cuando la hija le anuncia su intención de casarse justo cuando la madre acaba de ser rechazada por un amante. La madre se niega a que se case simplemente porque el hecho de ser suegra y abuela la envejecería.
Más tarde, el mayor conflicto de la novela, aunque brutal, se desencadena cuando la historia está ya demasiado avanzada, para mi gusto.
En definitiva, las estadísticas dicen que a un setenta por cien de los lectores les gusta este libro. Yo únicamente me atrevería a aconsejarlo a los aficionados a la novela clásica bien escrita y a los sociólogos y psicólogos interesados en la evolución de las relaciones machistas.
¿Y vosotros?
No había leído nada de Irène Némirovsky (1903- 1942), una escritora judía francesa de familia ucraniana que falleció en un campo de concentración.
Una de sus obras más aclamadas es “Suite francesa”, pero no me apetecía adentrarme en el ambiente deprimente de la ocupación alemana durante mis vacaciones. Así que escogí “Jezabel”, una historia que tenía muy buenas críticas también.
Se trata de una novela clásica de una escritura impecable en el uso que hace la autora de los símiles y por su enorme habilidad para trabajar las imágener y crear vivas descripciones.
En cuanto al argumento, me ha recordado mucho a “El gran Gatsby” -por la forma tan fidedigna en que retrata el “dolce far niente” de las clases altas-, aunque se sitúe en Francia y parcialmente en otra época, antes de la Primera Guerra. Esta novela se publicó once años después que “El gran Gatsby”, así que ahí dejo la duda de si sirvió de inspiración a Irène Némirovsky, por si alguien quiere investigarlo.
La historia comienza “in media res”, en el juicio al que se somete a Gladys, la protagonista, por un asesinato, y retrocede a su juventud.
Llama mucho la atención el machismo del que hacen muestra tanto el público asistente y los testigos como el presidente del jurado. Comentan que las mujeres maduras deben tolerar el adulterio, que un hombre rechazado no tiene más salida que “entretenerse” -mientras que una mujer que “se entretiene” lleva una vida disoluta-, etc, etc. Esa mentalidad no resulta extraña para la época, pero sí porque se manifiesta de forma agresiva contra la acusada en un juicio, que debería ser un proceso más objetivo. Tal vez esta caracterización de los personajes fuese intencionada por parte de Irène Némirovsky, con el objetivo de darle tanto crédito a los chismes como al proceso para así trivializarlo todo. La propia narradora compara el juicio con una función de teatro.
Eso mismo tiene un efecto en el estilo: resulta muy moderno que la autora alterne el interrogatorio con los comentarios de parejas que forman parte del público sin previo aviso al lector.
A través del flujo de conciencia de Gladys totalmente obsesivo -vive exclusivamente para conservar su belleza y su juventud-, la protagonista se nos va desvelando como una viuda vanidosa y narcisista, que raya la psicopatía, cuya actuación sólo se justifica porque tuvo una madre fría y despreocupada. Como Atalía, reina tirana de Judea, hija de Jezabel. De ahí el título.
La relación entre la dócil hija de Gladys -Marie Thérèse, siempre a su sombra- y ella, una madre narcisista (que incluso la envidia), se trunca desde el momento en que la hija tiene su primer deseo.
El principal punto de giro llega cuando la hija le anuncia su intención de casarse justo cuando la madre acaba de ser rechazada por un amante. La madre se niega a que se case simplemente porque el hecho de ser suegra y abuela la envejecería.
Más tarde, el mayor conflicto de la novela, aunque brutal, se desencadena cuando la historia está ya demasiado avanzada, para mi gusto.
En definitiva, las estadísticas dicen que a un setenta por cien de los lectores les gusta este libro. Yo únicamente me atrevería a aconsejarlo a los aficionados a la novela clásica bien escrita y a los sociólogos y psicólogos interesados en la evolución de las relaciones machistas.
¿Y vosotros?
Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Qué interesante esto que comentas.Paqui Bernal escribió: ↑18 Ago 2022 18:33 ...
En cuanto al argumento, me ha recordado mucho a “El gran Gatsby” -por la forma tan fidedigna en que retrata el “dolce far niente” de las clases altas-, aunque se sitúe en Francia y parcialmente en otra época, antes de la Primera Guerra. Esta novela se publicó once años después que “El gran Gatsby”, así que ahí dejo la duda de si sirvió de inspiración a Irène Némirovsky, por si alguien quiere investigarlo.
...
...
Y todo lo demás también, claro. Me la apunto.
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Gracias, ratonB
- Ceinwyn
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Acabado también esta mañana.
Esta autora es una apuesta segura SIEMPRE.
Sus novelas son tan elegantes, tan fluidas, es como tirar un pañuelo de seda y disfrutar viendo cómo lentamente dibuja formas en el aire y cae lleno de estilo y elegancia. Y belleza. Lleno de belleza.
Pero sus personajes, sus madre en general, son tremendas. La verdad es que es muy impactante hasta dónde puede llegar Gladys por no asumir una realidad, qué problema tan serio plantean estas páginas, cuántas vidas tristes provocan las personalidades patológicas, que en realidad lo son cada una a su manera, y que parten de esta premisa:
Ea.
Esta autora es una apuesta segura SIEMPRE.
Sus novelas son tan elegantes, tan fluidas, es como tirar un pañuelo de seda y disfrutar viendo cómo lentamente dibuja formas en el aire y cae lleno de estilo y elegancia. Y belleza. Lleno de belleza.
Pero sus personajes, sus madre en general, son tremendas. La verdad es que es muy impactante hasta dónde puede llegar Gladys por no asumir una realidad, qué problema tan serio plantean estas páginas, cuántas vidas tristes provocan las personalidades patológicas, que en realidad lo son cada una a su manera, y que parten de esta premisa:
Fantástico libro."En el fondo todas las pasiones son trágicas y todos los deseos están malditos, porque siempre conseguimos menos de los que soñamos."
Ea.
Silba la calandria y nos sorprende en vela, amuchados, con ganas de seguir.
- Ceinwyn
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Re: Jezabel - Irène Némirovsky
Gracias a ti.
La verdad es que ahora que lo has señalado, lo leo con una sonrisa.
Es un poco tonto, un poco ingenuo, no sé qué pensaba cuando lo escribí, pero es uno poco verdad
La verdad es que ahora que lo has señalado, lo leo con una sonrisa.
Es un poco tonto, un poco ingenuo, no sé qué pensaba cuando lo escribí, pero es uno poco verdad
Silba la calandria y nos sorprende en vela, amuchados, con ganas de seguir.