El día de todas las almas - Cees Nooteboom

[nosequé]

El día de todas las almas
Cees Nooteboom



Título original: Allerzielen. (1998)
Autor: Cees Nooteboom
Tapa blanda: 352 páginas
Editor: Siruela; Edición: 1 (1 de octubre de 2000)
Colección: Libros del Tiempo
Idioma: Español
ISBN-10: 8478445234
ISBN-13: 978-8478445233
Traducción de Julio Grande.

Arthur Daane, un reportero neerlandés que ha perdido a su mujer y a su hijo en un trágico accidente aéreo, vaga con una cámara de vídeo por un Berlín transfigurado por la nieve buscando imágenes para su película, de momento sólo fragmentos sin coherencia aparente. En esta ciudad tiene tres amigos: un intelectual, un artista y una científica, con quienes conversa elocuentemente sobre los pequeños detalles de la vida que le interesan. Un día conoce a Elik, una mujer joven llena de secretos por la que Arthur siente una poderosa y oscura atracción. Ella le hace el amor pero no le habla, ni le permite cruzar sus límites. Y, fascinado, la seguirá hasta Madrid. El día de todas las almas es una novela de amor filosófica sobre los cambios de la historia reciente y las dimensiones metafísicas de la vida, narrada magistralmente por una de las voces más interesantes y sólidas de la narrativa europea.

Fuente

[nosequé]

He leído de este autor dos novelas más y fue un descubrimiento gracias a Madison que me lo dio a conocer.
Esta semana he tenido la suerte de asistir a una tertulia en Fundación MAPFRE, junto a Paul Theroux, (otro autor que no conozco aunque buscaré sus libros) y de moderador Juan Cruz.
Fue una charla entre amigos.
Cees vive temporadas muy largas en Menorca, habla perfectamente español y es un tipo que rezuma paz y sosiego. Gran viajero y creo que gran filosofo.
Lo he empezado y seguramente me guste tanto como los otros dos que leí.

[Babel]

Yo sólo he leído de él un libro de relatos que me gustó mucho: Los zorros vienen de noche, y me quedé con ganas de leer algo más largo. Estoy pendiente de lo que digas.

[nosequé]

Mejor que decir yo, que hable Cees

... y, por lo demás, simple dinero, vulgar y apestoso dinero por todas partes, una capa de mierda sustentada por las mentiras y los intereses personales que, además, no parecía sorprender a nadie. Quizá fuera ésa la razón por la que amaba España, porque toda esta locura parecía formar parte de la vida cotidiana.

Este hombre ama España y pintaba hace 20 años este paisaje y creo que hemos cambiado poco.

[Babel]

Caray, pues sí que salimos guapos en el retrato.
Espero que también se haya fijado en alguna cosilla positiva.

[nosequé]

Este hombre sigue todo positivo...

No pararán hasta que el mundo entero coma lo mismo y, por lo demás, no sólo es la comida, porque todo esto se halla íntimamente relacionado entre sí. Comer lo mismo, oir lo mismo, ver lo mismo y luego, por supuesto, pensar también lo mismo, si es que se puede hablar todavía de pensar. Fin de la diversidad. Para entonces habremos convertido esto en un tenderete de hamburguesas.

Igual hasta tiene razón. Sólo hay que ir a cualquier ciudad del mundo y entrar en una calle comercial, son todas iguales y todas tienen las mismas tiendas

[Des Esseintes]

Llevo 45 páginas de este libro. Ya me ha atrapado, incluso me está fascinando. Es el tipo de lectura que me gusta: impregnada de una leve y quieta melancolía y presentando referencias continuas a la cultura y la historia europea -buena maestra-, el autor parece vaciarse de sus preocupaciones y recuerdos grises. De sus sombrías experiencias. Por momentos me recuerda -salvando las distancias y teniendo siempre en cuenta que se trata de dos libros muy diferentes- a El pintor de batallas, de Pérez-Reverte. Esa es al menos mi impresión tras 45 páginas, y sólo una impresión, nada más. Veremos qué hay más allá, pues no se me escapa que es pronto para sacar conclusiones.

Un saludo.

[nosequé]

No he leído ese libro de Reverte, pero comparar a estos dos autores me parece difícil.
En mi opinión no tienen nada que ver.
Cees es un gran viajero que se dedica a reflejar una sociedad y una realidad, que no nos olvidemos que es la suya, su mirada.
Lo he dejado aparcado por otras lecturas, pero vuelvo otra vez. Os contaré

[Des Esseintes]

Estimado nosequé.

Cierto es que Noteboom y Reverte no tienen nada que ver, de ahí que yo en ningún momento haya comparado a ambos escritores. Ni siquiera he comparado ambos libros: me he limitado a indicar -con un claro inciso entre guiones- que el libro del que aquí tratamos, sencillamente, por momentos me recuerda al otro de Reverte. Y no tiene nada que ver con el estilo, el ritmo o el tema; me parece así por el modo en que el autor se hace preguntas y refleja en el protagonista experiencias propias. Tal vez para entenderlo haya que leer del de Reverte, su libro más personal y difícil. Aunque sin duda que cada cual pensará una cosa diferente, de ahí también que yo me refiriera a mi opinión como producto de una impresión.

Por cierto:

Cees es un gran viajero que se dedica a reflejar una sociedad y una realidad, que no nos olvidemos que es la suya, su mirada.

Eso es totalmente aplicable, además de a cientos de escritores, al Pérez-Reverte de El pintor de batallas, con sus experiencias propias y su mirada personal, marcada a base de esas vivencias profesionales y no profesionales en territorios, como él mismo diría, hostiles. Para mí es un muy buen libro, el menos vendido del autor.

Pero dejemos esta deriva -disculpadme- y sigamos hablando del libro que da título a este hilo, que me está pareciendo maravilloso.

Un cordial saludo.

[nosequé]

Sigo en los pensamientos y en los ojos de este hombre que sigue viajando por paises y por la historia.
Es capaz de reunir en una historia, la caída del muro, el reino de Dª Urraca y los problemas actuales de los griegos (el libro fue escrito entre el 96-98)

¿Sabes cuántos euros cuesta?
Todavía no hay euros que valgan. Y si de nosotros (habla un alemán) dependiera, tampoco los habría jamás. Vamos a tirar nuestro preciado dinero, ahorrado con tanto esfuerzo, a una panda de timadores griegos e italianos. Y luego vendrán además también los polacos y los checos...

Como viajero observador cuidadoso, es un gran conocedor de las sociedades pasadas, presentes y casi futuras.

[nosequé]

Siempre que leo a este escritor tengo la sensación que sus libros son conversaciones interiores que él necesita compartir.
Me siento dentro de algo muy personal.
Miedos, dudas, reflexiones, todo lo amalgama con viajes y una historia, que hace una delicia leerle.
Historias de amores y muertes, de pasado y presente. Nada nuevo. Sólo cambia la forma de envolvernos para conocer esos mundos vividos.
¿Cómo puede unir en la misma narración el budismo y el asesinato de Miguel Ángel Blanco, pasando por Dª Urraca y el muro de Berlín? Pues lo hace y de manera maravillosamente discreta y prudente, con un respeto a cada opinión que van saliendo por bocas de sus personajes. Como un notario de palabras.
Es gratificante leer al ritmo de este viajero, un paso lento, observando con su cámara y desde su pensamiento.
Es el tercer libro y seguiré buscando más vivencias de este escritor.

[Babel]

Un notario de palabras....

Voy a intentar hacerme con este libro. Gracias, nosequé.

[nosequé]

Babel , en la biblioteca de casa, hay por lo menos cuatro. Los tres que he leído me han gustado mucho.

[Des Esseintes]

¡Hola a todos!

Una de las cosas que más me ha sorprendido y gustado de este magnífico libro es el curioso empleo que hace el autor de la vieja figura del coro, traída de la tragedia griega. Introducido siempre entre dos capítulos, en una o dos páginas, aparece ese coro que no deja de observar durante toda la novela a los protagonistas y al lector, advirtiendo y sentenciando, cerca pero distante. Por ejemplo:

«En un tiempo, las vicisitudes de reinas y héroes eran el tema de los mitos, de las tragedias. Había un Edipo para el castigo, una Medea para la venganza, una Antígona para la resistencia. Todas vuestras historias son historias sin importancia, salvo para vosotros mismos. Episodios aislados, faits divers, culebrones. De vuestra pena ya nunca se sacará partido con palabras que sean válidas para los demás, para la limitada eternidad de que disponéis. Eso os hace más volátiles, y, si nos lo preguntáis, más trágicos. Vosotros no tenéis ningún eco».

Lo considero un libro muy bueno, con atmósferas melancólicas espléndidas y rebosante de cultura. Un placer de lectura.

Un cordial saludo.

[Ivanovich]

Qué libro tan interesantísimo y cómo se te va metiendo adentro según avanza. Pero mejor seguir la lectura tranquila y pausada ahora que estoy en su ecuador. Y disfrutarla, que ya habrá tiempo para comentar.