La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Grandes clásicos de la literatura mundial.

Moderador: LizzyDarcy

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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

Acabó de terminar el capítulo III y algo está claro, este hombre dominaba el tema de una manera asombrosa o se tuvo que documentar de manera muy, pero que muy exhaustiva para escribir este libro, me tiene anonadada. Lo mejor de todo es que Flaubert es tan grande —aunque lo de grande a mí ya se me queda corto para referirme a él—, que lo que en manos de otro podría haber sido un rollo macabeo en las suyas se convierte en poesía.

Cortito, pero muy intenso y sugestivo este primer tête à tête entre San Antonio e Hilarión.
Da que pensar que la respuesta de San Antonio ante las contradicciones que Hilarión le muestra sobre los evangelios sea que él siempre ha tenido esos pensamientos pero que intenta acallarlos.

Me llama mucho la atención que Hilarión vaya creciendo ante los ojos de San Antonio, ¿será que el primero crece al mismo tiempo que crecen las dudas del segundo?

Estaba leyendo sobre el Concilio de Elvira, y hay algo en él que parece casi una broma, aunque no lo es.
Wikipedia escribió:Entre los últimos cánones, el canon 33 ordena el celibato a todos los clérigos, fuesen casados o no, y a todos los que ministraban en el altar (éste es el canon más antiguo sobre el celibato).
Por cierto, parece que Hilarión también tuvo sus tentaciones :lol::
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Sue_Storm
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por Sue_Storm »

Muy sexy la tentadora de Hilarión, sí señora :mrgreen: A mí también me llamó la atención ese agigantarse de la figura de Hilarión: es algo muy propio del mundo onírico, ¿no crees?, o más aún, de las alucinaciones.

Bueno, por fin terminé el capítulo IV. Sería maravilloso poder interpretarlo personaje por personaje, pero para mí es imposible: hacen falta unos conocimientos de historia de la filosofía y de historia de la Iglesia, y de las religiones en general, que yo no tengo. Me conformo con leerlo como un gran poema y maravillarme con las imágenes y las historias. Tengo que confesar que el gymnosophiste me ha dejado impresionada :shock: yo sólo conocía a los estilitas y estos ya me parecían bastante... digamos originales, pero esto otro ha superado mi imaginación :shock: :shock: :shock: Y yendo a la wiki encuentro que son de la India y se corresponden con los que hoy conocemos como yogis. Madre mía.

Y el lenguaje. Qué maravilla.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

Yo todavía no he empezado el IV, así que no he leído sobre el gimnosofista —sadhu o yogi— , pero por lo poco que sé de ellos me parecen asombrosos :D.

Para interpretar este libro como se merece haría falta leerlo a la velocidad de un caracol y dedicarse a él en exclusiva, por lo menos en mi caso, porque hay cosas que sé pero hay muchísimas que no, y buscar tanta información retrasaría la lectura siglos, de todas maneras sí que voy buscando algunos datos sobre cosas que me llaman la atención, pero en esta primera lectura prefiero disfrutarlo más, como tú dices, por la historia en sí, por la forma de contarla de Flaubert, en una segunda lectura ya seré más concienzuda.

Pues sí, creo que es exactamente lo que tú dices, Sue, algo propio del mundo onírico, y creo que es algo que Flaubert utiliza, aunque puedo estar equivocada, para representar que las dudas de San Antonio aumentan mientras conversa con Hilarión, porque él considera que lo que dice, al menos parte, es cierto.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por Sue_Storm »

Sigo avanzando por el Capítulo V, sin prisa pero sin pausa, porque si lo dejara temo que me costaría retomarlo, y sería una lástima.

De lo que llevo leído del Capítulo V, me han encantado los paralelismos entre las vidas de Buda y Cristo. Y el deslumbrante desfile de dioses paganos: las deidades de la India (a las que tú, Mil, seguro que conoces mucho mejor que yo :wink: ), Oannes el hombre-pez de los caldeos:
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y Ormuz, dios de los persas, al que Flaubert nos describe exactamente como aparece aquí:
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y la fabulosa Diana en su templo de Éfeso:
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El pobre San Antonio a estas alturas está ya :loco: :loco: :loco: , pero sigue resultando admirable la enorme fortaleza de su fe.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

Sue_Storm escribió:El pobre San Antonio a estas alturas está ya :loco: :loco: :loco: , pero sigue resultando admirable la enorme fortaleza de su fe.
Cómo promete lo que viene :meparto:; yo me quedé en el III, pero mañana te alcanzo.
¡Qué chulas las imágenes que has puesto, Sue! Me gusta mucho Ormuz.
Sue_Storm escribió:De lo que llevo leído del Capítulo V, me han encantado los paralelismos entre las vidas de Buda y Cristo.
Y no sólo hay similitudes entre ellos dos, sino entre algunos más. Desempolvaré Gárgoris y Habidis, que una parte del libro se dedica a hablar de esto, y copiaré algunos fragmentos.
Y creo, si la memoria no me falla, que en Zeitgeist también se mencionaba, aunque no estoy del todo segura de si era en este documental.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

He escaneado sólo la historia de Krishna porque son bastante extensas, pero también se cuentan las historias de Mitra, Zaratustra y Buda; y juraría que alguno más hay.

Krishna y Radha
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Gárgoris y Habidis escribió:Krishna, avatar de Vishnú y padre del hinduismo tal como hoy lo entendemos, obró en la Península del Indostán sucesos muy parecidos a los que Cristo desencadenaría luego en tierras del Sinaí: reformar con sacro respeto una antigua religión, expulsar del templo a los sacerdotes, instruir a un grupo de adeptos y volar las bocanas cegadas del misticismo. Ambos personajes llevan por nombre un mantra bisílabo (correspondiente al segundo estadio de la iniciación yoga) que empieza con la misma raíz. Sus respectivas leyendas hagiográficas parecen forjadas en un troquel común y anterior.

La historia de Krishna comienza en Mathura, la ciudad de las cien puertas, los doce palacios y las diez pagodas. El rey Kansa, que aspiraba a dominar el mundo, se entera por un augur de que será un hijo de su hermana Devaki, y no su primogénito, quien se siente en el trono universal. Decidido a impedirlo, condena a muerte a la madre del futuro usurpador, pero la doncella consigue huir, gracias a la ayuda del purohita o sumo sacerdote de los sacrificios, y llega al bosque donde un asceta vive desde hace sesenta años alimentándose de hierbas. Vasichta, que tal es su nombre, ordena a los demás eremitas que se postren ante la forastera y exclama: he aquí a nuestra madre común. De su vientre nacerá el espíritu regenerador. Devaki se instala en aquellos parajes. Una tarde, reclinada bajo el árbol de la vida, cae en éxtasis mientras el Ser esencial se cierne sobre ella y queda encinta. Al cabo de siete meses, cuando ya el niño alabea su abdomen, Vasichta la llama y dice: ¡Salve, virgen y madre! Tu hijo será el salvador del mundo. Pero huye ahora, porque tu hermano te busca para matarlo. Refúgiate en el Himavat y alumbra un varón al que impondrás el nombre de Krishna, que significa «el sagrado».

Todo sucede según las palabras del venerable. Kansa ordena una degollina de inocentes. Su sobrino, al margen de ella, se cría entre rebaños y pastores hasta cumplir los quince años. Devaki desaparece entonces en el éter y el joven, abrumado por el dolor y la soledad, bordonea durante varias semanas entre los riscos. Son días intensos, gastados en la meditación y escandidos por las iluminaciones. Al volver del monte, armado de arco y flechas, se convierte en capitán de una partida que expulsa del bosque a los animales salvajes, se enfrenta a los poderosos y ayuda a los oprimidos. Pero el adolescente, aquejado de una extraña tristeza, resiste a la tentación de la política, abandona a sus hombres, y vuelve a la soledad. Otras dos tentaciones le acechan en ella: el arte y el amor carnal. Krishna prepara instrumentos musicales, los afina, tañe, sopla y percute. Escribe versos. Compone ragas. Danza entre los árboles. Un grupo de mujeres, esposas e hijas de pastores, acuden al reclamo del hermoso rapsoda. Dos hermanas, Sarasvati y Nichdali, lo cercan, lo acosan, lo inquietan, lo envuelven. Krishna, en otro arrebato de pureza, jura que sólo amará de amor eterno. Y para eso -añade- es necesario que la luz del día se apague, el rayo aniquile mi corazón y el alma se me escape a lo más profundo de los cielos.

El joven desaparece, dejando tras de sí una herencia de sagas y epopeyas. Mientras tanto, el rey Kansa no ceja en su empeño de encontrarlo. Alguien le habla de un guerrero y poeta cuya fama repiten todas las lenguas. El monarca lo busca y le nombra jefe de sus ejércitos sin saber que se está convirtiendo en instrumento de su propio destino. Entre merodeos y cacerías, Kansa y su paladín llegan a la choza del sabio Visichta. Éste revela la identidad del joven. Su tío lanza una flecha contra él, pero yerra el blanco y. mata al monje. Krishna, fulminado por una luz cegadora, se derrumba. Ante él aparece un gigantesco mandala celestial con Devaki en su centro. Sólo en ese momento comprende Krishna que es «el hijo, el alma divina de todos los seres, el verbo creador que está por encima de la vida y penetra en ella por la esencia del dolor, el fuego de la plegaria y la felicidad del sacrificio».

El rey huye y Krishna pasa siete años en la montaña meditando sobre la Doctrina. Luego convoca a los santos del yermo y se la expone. Uno de ellos, Arjuna, se convertirá en apasionado amigo del gurú. Bajo los cedros del monte Meru, frente a la mole soberbia del Hirnavat, Krishna habla de la inmortalidad del alma, del matrimonio místico con Dios, del dominio de las pasiones, del modo de conquistar la ciencia de la unidad... Es el Baghavad Gita: el diálogo entre Krishna y Arjuna, destinado a convertirse en evangelio del nuevo hinduismo. No existe en toda la literatura sagrada de la India texto más revelador ni más reverenciado. Krishna se levanta, menciona al Ser de innumerables ojos, formas y caras, y en ese instante un rayo se libera de su rostro mientras los discípulos se prosternan a sus pies. Allí mismo contraen todos el solemne compromiso de seguir al Ungido. Éste cierra el episodio con las siguientes palaras: estabais ciegos y yo os he hecho partícipes del gran secreto, pero reveladlo sólo a quienes sean capaces de entenderlo. Vosotros sois mis elegidos y podéis ver el fondo de las cosas, mientras los demás a duras penas distinguen la primera curva del camino. Pongámonos en marcha para enseñar a las gentes la vía de la salvación.

Empieza entonces la vida pública de este Cristo: vagabundeos, milagros y predicaciones. Olor de multitud. Krishna y sus apóstoles bajan a las tabernas, a los burdeles, a orillas de los ríos, a las ágoras donde los iluminados gritan y los paisanos beben té. Sarasvati y Nichdali oyen hablar del Hijo de Dios y van a su encuentro. La primera se ha convertido en prostituta; la otra, en sierva. Ambas se redimen por amor a Krishna, en quien reconocen al bailarín solitario de la montaña, y se incorporan a su séquito. También Kansa se entera del fervor popular que su antiguo capitán despierta y envía una patrulla a detenerlo. Krishna no ofrece resistencia, pero expone su doctrina a los soldados y éstos deciden quedarse con él. El rey se atrinchera en su palacio, mientras el Maestro llega triunfalmente a Mathura, cuyos habitantes le reciben con palmas, ramos y flores. Huye el déspota, se instala Arjuna en su trono y Krishna, presintiendo la inmolación, se aleja hacia el páramo en compañía de las dos mujeres. Pasa una semana entre plegarías y abluciones. Al séptimo día, los arqueros de Kansa encuentran a los penitentes, atan al Redentor y tensan sus armas hacia él. Sintiendo el mordisco de la primera flecha, Krishna exclama: Vasichta, victoriosos son los hijos del sol. Traspasado por la segunda, invoca a Devaki: Madre, haz que cuantos me aman entren conmigo en tu luz. Al recibir la tercera, musita uno de los nombres de Brahma: Mahadeva. Y expira. Un viento huracanado desgarra el crepúsculo, mientras se desata la cellisca y grandes aludes se desprenden del Himavat. Una tromba de aire cárdeno confunde desfiladeros y montañas. El horizonte es un áspero fragor. Calla el sitar en las ciudades, enmudecen los tablas, el aguador ahoga su grito y, como una mariposa herida, se detienen en los antiguos templos las manos de las bayaderas. Surge entonces un clamor de bronces y campanas que eran ya viejas cuando las razas de Europa ramoneaban el sílex entre los ventisqueros.

El cuerpo de Krishna fue quemado por sus discípulos y las dos santas mujeres se inmolaron en la hoguera. Todos, discípulos y profanos, vieron salir de las llamas al Hijo de Dios, transformado en un vórtice luminoso, que ascendió a los cielos llevándose con él a sus esposas.

He citado sólo los pasajes indispensables para seguir el hilo de esta antigua fábula. Muchos personajes cabalgan en ella hacia el evangelio. Mencionados es casi ocioso: Herodes, la Virgen, Simeón, el Espíritu Santo, los apóstoles, Juan, Marta y María, la Magdalena... En cuanto a los episodios, ¿quién no habrá reconocido la anunciación, la huida a Egipto, las tentaciones, el Sermón de la Montaña, la transfiguración, el domingo de Ramos, Getsemaní, el calvario, las siete palabras y la ascensión? A Krishna, que llevaba el sobrenombre de divino pastor, se le creía manifestación humana de Vishnú, segunda persona en la trinidad del hinduismo. Los hechos narrados provienen del Mahabbharata, los Purana, el Cita Covinda y otros poemas o fabularios. El más moderno tiene veintiséis siglos de antigüedad. El advenimiento de Krishna se sitúa cinco mil años antes de que su paredro cristiano reencarnara en una cueva de Belén.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

¡Flaubert es maravilloso! ¡Si hasta habla de la clasificación de los planetas por su naturaleza! Por un momento hasta creí que hablaba de los tres Gunas del Jyotish, pero no.
Estoy con los dioses hindúes ♥, supongo que las dos parejas de tríadas —una masculina y otra femenina— a las que se refiere son éstas:

Brahma, Vishnu, Shiva...
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... y Sarasvati, Lakshmi, Kali.
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Brahma está casado con Sarasvati, Vishnu con Lakshmi, y Kali es la esposa de Shiva.

Pobre San Antonio :lol:, dice después de hablar con Apolonio: «¡Éste vale por todo el infierno junto! Nabucodonosor no me había deslumbrado tanto. La reina de Saba no consiguió hechizarme tan profundamente. Su manera de hablar, cuando se refiere a los dioses, inspira deseos de conocerlos».

Por cierto, me llamó la atención el juego de las tabas y busqué a ver qué era, y resulta que una taba es un hueso del tobillo :shock:, se juega con huesos.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por Sue_Storm »

¡Qué guapos todos! Preciosas imágenes, muchas gracias.

¿No sabías lo de las tabas?, pues es un juego tradicional que ha llegado prácticamente hasta nuestros días en las zonas rurales. En los años 60 todavía se jugaba en muchos sitios. Creo que los huesos en cuestión son astrágalos de cordero.

Yo ahora estoy con la gran madre Isis:
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

Sue_Storm escribió:¿No sabías lo de las tabas?, pues es un juego tradicional que ha llegado prácticamente hasta nuestros días en las zonas rurales. En los años 60 todavía se jugaba en muchos sitios. Creo que los huesos en cuestión son astrágalos de cordero.
Las tabas no me sonaban de nada —puede que lo leyera alguna vez pero no lo recuerdo—, los astrágalos sí, pero no sé por qué yo tenía la convicción de que se utilizaban para otra cosa.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

Pues sin darme cuenta lo he terminado :shock:, pensaba que me quedaba todavía bastante y es que se me había olvidado que gran parte del libro es un léxico de nombres mitológicos e históricos.
1452 escribió:Había leído que era un libro corto pero denso pero a mí, de momento, me parece lo menos denso que he leído de Flaubert.
Cuando leí que era denso pensé que se referían al estilo de Flaubert —que a muchas personas se lo parece—, pero ahora sé que se referían al contenido, y es cierto, creo que no he leído nunca un libro que en tan pocas páginas tenga tanta información; hay una cantidad de trabajo impresionante invertida en este libro.

Una vez hecha la rectificación tengo que confesar que es el libro de Flaubert, de los que he leído, que menos me ha gustado, lo que no quiere decir que no me haya gustado, quizás sea porque el tema, a priori, no es que me interesara en exceso —de hecho si no lo hubiera escrito él jamás lo hubiera leído—, pero también es verdad que una vez que uno va entrando en materia y se deja llevar por la narración se vuelve todo de lo más interesante, a veces incluso apasionante, y hay varios pasajes que son de una belleza casi indescriptible. Ahora bien, como Flaubert para mí es especial, decir que es el que menos me ha gustado en su caso no supone más que mi valoración sea un 8,5 en lugar de un 9 o un 10, porque en el fondo da igual sobre lo que escriba, lo escribe como nadie más puede hacerlo.

Voy a poner una última imagen de uno de los dioses que más me gusta de todos los que aparecen en el libro.

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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por Sue_Storm »

Anda, lo has terminado :shock: Yo sigo en el Capítulo V, en el momentazo del panteón romano, cuando San Antonio reza el Credo y la sombra de la Cruz se proyecta sobre los dioses, y Júpiter y compañía empiezan a lamentarse porque ya de dioses nada, hasta se les ha acabado la ambrosía, vaya. Esta parte me está gustando mucho, será porque las figuras que aparecen son más conocidas para mí, y además es más dinámica.

Esta obra es una rareza, que no creo que pueda compararse con el resto de trabajos de Flaubert, ni con los de sus contemporáneos. Es como es: el autor invirtió en ella muchísimas horas de investigación y de esfuerzo a lo largo de su vida, llegó a hacer tres versiones sucesivas, y el resultado es para mí un gran poema en prosa, cuya riqueza de lenguaje lo hace ya válido por sí solo, de modo que si además pensamos en toda la información que lleva dentro, pues ya es la pera :D Cierto que a veces puede hacerse un poco árida la lectura; yo creo que si lo estuviera leyendo traducido al español me cansaría mucho más, pero disfrutar de la adjetivación y de la construcción de las frases en el original e ir descubriendo vocabulario nuevo, para mí es un estímulo adicional y me ayuda mucho a avanzar en la lectura.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

Sue_Storm escribió:Anda, lo has terminado :shock:
Así me quedé yo también cuando lo terminé, pensaba que me quedaba lectura para un par de días más y llegar al final tan pronto fue una desilusión.
Te espera una gran sorpresa más adelante :448:.
Sue_Storm escribió:Esta obra es una rareza, que no creo que pueda compararse con el resto de trabajos de Flaubert, ni con los de sus contemporáneos. Es como es: el autor invirtió en ella muchísimas horas de investigación y de esfuerzo a lo largo de su vida, llegó a hacer tres versiones sucesivas, y el resultado es para mí un gran poema en prosa, cuya riqueza de lenguaje lo hace ya válido por sí solo, de modo que si además pensamos en toda la información que lleva dentro, pues ya es la pera :D Cierto que a veces puede hacerse un poco árida la lectura; yo creo que si lo estuviera leyendo traducido al español me cansaría mucho más, pero disfrutar de la adjetivación y de la construcción de las frases en el original e ir descubriendo vocabulario nuevo, para mí es un estímulo adicional y me ayuda mucho a avanzar en la lectura.
Mejor no se puede expresar, y creo, aunque no puedo comprobarlo, que hasta en lo de la traducción estás en lo cierto.
Y es por todo lo que tú dices que he disfrutado mucho de este libro, pero si dijera que me ha apasionado tanto como Madame Bovary o La educación sentimental mentiría, también hay que decir que es una lectura muy diferente y por eso mismo tal vez sea un error entrar en comparaciones, pero no puedo evitarlo. De todas maneras da igual, Flaubert podría escribir sobre la reproducción de las cucarachas y haría poesía de ello, así que me guste más o menos el tema siempre me maravilla su estilo.

A mí me ha sucedido algo curioso con este libro, he leído 200 páginas pero tengo la sensación de haber leído 1000.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por Sue_Storm »

Terminado.

Del último capítulo me ha encantado la lucha con el Diablo: tiene imágenes muy vívidas, leerla es una verdadera gozada. Y en particular está muy bien tratada la tentación del suicidio..., esa idea de dejarse deslizar simplemente por el precipicio, que está allí al lado, siempre presente, me recordó a los calabozos del Nido de Águilas en Juego de tronos.

En cambio el final me ha parecido muy soso, en comparación con el resto del libro. Y el desfile último de monstruos fabulosos, que si el catoblepas, que si la mantícora, aburrido. No me termino de explicar que Flaubert, que tanto rehízo y corrigió el texto, se diera por satisfecho con un final tan sosainas.

Pero vaya, que no me arrepiento en absoluto de haberlo leído. En su conjunto es una maravilla y su lectura es toda una experiencia. Gracias por haberme acompañado, Mil :hola:
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por 1452 »

A mí sí me gustó el final; algunos de los bichos me recordaron al Final Fantasy :lol:.

Sue :60:.
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Re: La tentación de San Antonio - Gustave Flaubert

Mensaje por Diocolo »

Resucito este hilo, porque he podido leer estos días este libro.

¡Qué libro! Es extraordinario. ¡Qué cantidad de alusiones y recreaciones! Nos relata la larga noche de delirios de San Antonio... hostigado y atosigado por fuerzas que quieren arruinar su tesón y Fe.

No sabría decir qué Acto me ha gustado más. Aunque creo que hacia el final va quedando como un poquito cansino la aparición de un ser mitológico tras otro (estoy pensando en el Acto último, donde aparecen el unicornio, la Quimera, etc). Pero por lo demás, me ha encantado. Todos van al vacío, al olvido, ninguno escapa. Quizá el más complejo en cuanto a datos sea el IV, creo recordar, donde van desfilando las diferentes corrientes gnósticas... pero a cual más interesante. ¡y qué final de Acto, diciendo Hilarión "Yo soy la Ciencia", como una corriente orgullosa de sí misma que también trata de hundir (obviamente) los conceptos de Fe, Salvación y Dios. El más dificultoso en cuanto a contenido, creo que sería el VI, pero está muy bien conseguido (esa noción de Inmensidad, y el trasfondo neoplatónico/parmenídeo/pitagórico(, es el más filosófico. Curioso cómo recrea a los dioses en el V, recreando el Himno a Démeter, el mito de Osiris, a Buda. Se me hizo especialmente entusiasmante por la recreación de los diferentes personajes (Orígenes, Apolonio, los dioses griegos y romanos)... cómo en los primeros Actos el Diablo va asomando en las sombras... pero al final se materializa del todo. La tentación de Saba, de la riqueza de sabores, la cólera... el final es ya absolutamente onírico.

Es una obra llena de erudición y sensaciones. Qué bien escrita está, y no es fácil de transmitir con esa agilidad alguna de las cosas que trata de escribir (la noción de Inmensidad, por ejemplo). No había leído nada antes de Flaubert, y veo que trataré de seguir conociendo alguna obra más suya.

Muy interesante, muy singular: fascinante. Tengo ganas de volver a leer algunos de los actos.
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