Cuéntame un cuadro (Juego)

[lucia]

Sí que le cundió el rato

[Megan]

Gine, te quedó impecable, pero que triste pobre niñita, me dan ganas de llorar, sos peor que yo para hacer sufrir a un personaje

[Megan]

Bueno, quién se anima a hacer el último micro y poner imagen, ¿será el dragoncito @Sinkim otra vez?
¡Sí! Saliste sorteado, así que vamos por ello, como dicen ustedes

Pd. No importa que hayas puesto la última imagen, ahora vas a poner una pintura, como corresponde

¡No te demores!

[Ginebra]

Sí que le cundió el rato

[Ginebra]

gracias, Megan, pero míralo así: no la hice sufrir, al contrario, alivié su pena

dragonet, anímate!

[Megan]

Sí que le cundió el rato

Me pasa lo de siempre con la br... jefa, no entendí lo que dijo y por lo que veo es gracioso

[Megan]

A ver dragonet, @Sinkim te estás demorando mucho, esperamos ansiosas

[Sinkim]

Ginebra, Megan, unas historias preciosas Me alegra que la imagen os haya inspirado unas historias tan bonitas

A ver qué me sale a mí:

La princesa Alexa estaba escondida en lo más profundo de una oscura cueva a la espera de que el dragón enviado por su malvado tio dejara de buscarla.
De repente su pie chocó con algo duro, se agachó a ver que era y descubrió que era un libro. Con cuidado para que nada de luz saliera fuera de la cueva, encendió un candil que llevaba y empezó a leerlo.
Su sorpresa fue mayúscula al describir que el libro contaba su historia paso a paso, desde su nacimiento, hasta la muerte de sus padres por la traición de su tio y hasta llegar al momento actual.
Al llegar a ese punto algo extraño sucedió. Una luz blanca y brillante apareció en la pared de la cueva, y al andar hacía ella se encontró fuera del libro.
Maravillada se sentó y continuó leyendo el libro, descubriendo lo que tramaba su tío, sus puntos debiles y la forma en la que podía derrotarlo a él, liberando al dragón y volviéndolo en su contra...

[Sinkim]

Sigo pensando que por mucho que el hilo se llame "Cuéntame un cuadro" deberían valer también dibujos que no sean cuadros, pero bueno

Os dejo este cuadro que tiene decenas de historias para contar, "El archiduque Leopoldo Guillermo en su galería de pinturas en Bruselas II" (David Teniers)



Clic para ver en grande

Como pone en el título es el 2º cuadro al respecto, hay otro similar en otra habitación también llena de cuadros

[Megan]

Qué bonito micro, dragoncito

¿Y qué se escribe sobre eso?

[Sinkim]

No será porque no tienes historias para elegir entre tanto cuadro

[Megan]

Ya tengo una idea, pero hay que organizarla

[Megan]

Ahí voy,

Faltaban muy pocos días para la exposición y el Archiduque Leopoldo aún no se decidía sobre el orden en que pondría los cuadros seleccionados para el evento. Sus ayudantes le habían dado muchos consejos sobre el tema, pero él no estaba de acuerdo con ninguno. Era normal verlo parado en medio del depósito, mirando las pinturas desordenadas, con el rostro afligido por su indecisión. Pensaba en que por allí pasaría la realeza de toda Europa y no podía hacer el ridículo, si bien su colección era vasta, los pintores no eran muy reconocidos, por lo que debía actuar con mucha precisión para impresionar a los visitantes.
Una noche se hallaba solo, caminando de un lado a otro, mirando las obras sin verlas. De pronto, lo asaltó el recuerdo de su padre, de quien había heredado la mayor parte de la colección. No fue nada agradable lo que sintió, un inmenso rencor se apoderó de sus fibras más íntimas. A su memoria vinieron los legados recibidos por sus amigos de la infancia, enormes haciendas con campesinos para trabajarlas, grandes tiendas dedicadas a la joyería, marroquinería o espadas de altísima calidad y otras tantas herencias que de por sí, eran más que sustentables para sus dueños. En cambio él tenía una enorme cantidad de cuadros que no valían nada. Su fama provenía de la posición social de su familia, pero en cada exposición si conseguía vender uno o dos pinturas podía considerarse satisfecho. Ser marchand no era su vocación, además de no poder vivir de ello, y por otra parte, el legado en efectivo se estaba acabando y con ello su vida llena de lujos.
Sus pensamientos lo desesperaron y en un arranque de furia, tomó varios cuadros y los destrozó contra el suelo, en tanto blasfemaba contra el legado de su progenitor. En su arrebato, una lámpara de aceite cayó sobre varias obras que de inmediato tomaron fuego. Las llamas iluminaron los ojos del hombre que destilaban tal odio y locura, que en lugar de guarecerse optó por fenecer en medio de su absurda herencia.
Las pinturas que se salvaron estaban en una pequeña pieza al fondo, adonde el Archiduque jamás había entrado, fueron recogidas por su hermano menor.
Todas estaban firmadas por Miguel Ángel.

[Sinkim]

¡Qué bueno! Me ha encantado el giro final Me ha gustado mucho como has imaginado la historia del Archiduque

[Megan]

Muchas gracias dragoncito querido

Ahora quiero leer lo que escribís vos sobre el Archiduque
¡A escribir @Sinkim!