¿Hemos matado a los nuevos autores en la era digital?

[MarioJMartin]

Ya es difícil escribir un libro ahora hay que ser experto en marketing.
Antes entrabas en una librería y te llevabas un libro que te llamase la atención, sea bueno o malo, pero te lo leías para el viaje y a lo mejor lo cerrabas después del primer capítulo si era un peñazo. Por supuesto, también existían los best-sellers y las listas de recomendaciones patrocinadas por las editoriales, pero existía un hueco para que un nuevo escritor se diera a conocer; aunque solo sea en la sección de novedades del año.
Ahora en el mundo digital o estás en la lista de los 50 más vendidos de la tienda de Amazon o simplemente no existes. No se trata de que un nuevo autor escriba bien o mal, es que nadie sabrá que existe. Ahora novedad es si ha sido publicado esa misma semana.
¿Estamos matando el libro? Igual que la música se ha estancando en los 90 y aunque hay buenos cantantes de ahora, nadie los conoce. Conocemos a los malos cantantes que tiran de autotune, porque tienen a los chinos dándole al like para aparecer en la primera página de búsquedas. Chinos que ni siquiera saben leer castellano.
¿Cómo podemos solucionar esta situación? ¿O no tiene solución? y estamos abocados a quedarnos estancados en los clásicos de siempre porque no hay espacio para que nuevos autores puedan crecer.
¿Cómo un nuevo autor puede darse a conocer? Suponiendo que no quiera gastarse todos sus posibles ingresos en campañas de Ads de Amazon.

[SergioV]

Es un tema bastante frustrante.

Podemos poner las excusas que queramos, mirar para otro lado, o lo que nos dé la gana, pero, como en todo en esta vida, la última palabra la tienen / tenemos los consumidores, los propios lectores.

Hoy, en plena era digital, los medios para conocer y darse a conocer son otros. Foros como este, o canales de Tiktok, instagram, youtube... son un buen escaparate para conocer libros y autores, y también para darse a conocer. Pero claro, por muy bien que hablen de tu libro, por muchas visitas y likes que tenga el video, si luego nadie lo compra ni lo lee, pues ya me dirás.

Algunos no se dan cuenta de que un "autor consagrado" o un "clásico imprescindible" va a seguir ahí compres su libro hoy o el año que viene, pero un escritor novel, si no vende hoy, puede que no tenga oportunidad de hacerlo mañana.

Huelga decir que todos los "autores consagrados" han sido noveles en algún momento (sí, algunos respaldados por una fuerte campaña de publicidad, o por una carrera previa como periodista o lo que fuera), y no son uno ni dos los que llevan años sacando un zurullaco tras otro, pero luego la gente lo compra igual sólo por ser quienes son.

[Jarg]

Yo no creo que haya cambiado nada, en esencia.

Sí, están las listas Amazon, pero eso siempre ha existido, solo que con otro nombre (NY Times best-sellers, top-10 de libros en los semanarios de los periódicos, etc).

Hay más facilidad para autoeditarse, eso sí, aunque luego la mayoría de autopublicados se topa con el gran muro de la distribución y la promoción. Pero eso era lo mismo hace décadas. Recuerdo que un vecino de mi abuela escribía libros sobre genealogía de la provincia y se los autopublicaba él mismo (hablamos de la década de los ochenta). Evidentemente todo escrito a máquina, maquetado mal y sin vender ni una copia, lo cual no se diferencia demasiado de algunos libros autoeditados de hoy día.

Todo lo demás es igual. Una minoría de autores noveles apadrinados por las grandes editoriales la hay ahora como la había hace treinta años. Y una mayoría de autores noveles ignorados por las editoriales la hay ahora como la había hace treinta años. Recomiendo ver la película italiana Caterina va in città (2003), donde el personaje de Sergio Castellitto interpreta a un profesor de instituto que no consigue que le publiquen su novela y hace afirmaciones muy parecidas a las de este hilo.

Yo el único daño actual que veo es el de las falsas expectativas que dan Internet. Un daño hecho por influencers y booktubers que han transmitido la idea de que hoy día lo que hace falta son seguidores y todo saldrá a pedir de boca. Pues no, más de un influencer se ha dado con la puerta en las narices al pensar así.

[Boralonsus]

Pues si.

[Dama Luna]

Es muy complicado responder de forma tajante. También es verdad que las novedades, ya sea en amazon o en cualquier sitio, físico o virtual, duran un suspiro. No te da tiempo a comprobar qué es nuevo, porque a los días, ¡a las horas casi diría! ya ha desaparecido.

Los autores nuevos lo tienen muy difícil hoy como lo tenían antes, porque acceder al mercado era toda una odisea. Pero vamos, que yo creo que lo más difícil empieza a ser encontrar un libro que merezca la pena leer, porque me da igual en un soporte u otro, la aplastante mayoría son calcos unos de otros.

[Kiraya]

Creo que hay que repensar todo el tinglado, lo pensaba ya hace años, pero ahora parece que urge más.
Y, bueno, con el florecimiento de las IA entramos en nuevas problemáticas que también habrá que considerar.

No creo que se haya matado a la autoría novel. Está ahí y hay editoriales que apuestan por voces nuevas, pero con recursos muy limitados y compitiendo entre ellas. Son como burbujas. Se forman de ilusión, flotan en el aire un tiempo y se desvanecen con un pop, el manotazo del mercado.

En estas editoriales pequeñas se están llevando las antologías de múltiples voces. Quizá este sea el camino para darse a conocer en estos tiempos. Empezar como relatista, intentar que te selccionen en muchas de estas antologías y de ahí, más tarde, conociendo el mundillo y a los seres que lo habitan, conseguir la oferta para tu novelette (otro formato bastante popular entre las editoriales pequeñinas) o tu novela.

Si cambiamos el modelo de negocio, o algunos hábitos y rituales del mundillo, ¿sobrevivirían esas editoriales? ¿Funcionaría una cooperativa editorial? ¿Extensiones de otros negocios? ¿Servicios editoriales más baratos y ceder a la autopublicación?
No sé qué pinta tiene el nuevo modelo, pero siento profundamente que toca cambio.

[Yayonuevededos]

Visto el panorama, corremos el riesgo de matar a los nuevos autores, perdidos en la multitud.
Internet ha abierto una puerta que ya no se puede cerrar, claro que se cuela de todo.
Los escritores rescatables se ahogan entre miríadas de "nuevos autores" a los que sí habría que matar. Se puede alegar defensa propia, defensa del buen gusto o defensa de la gramática y la ortografía.
Estamos en la era del reguetón literario, y un buen blues escrito y corregido, pasa sin pena ni gloria en medio de una avalancha de burradas.

Saludos ofuscadísimos, mi amol
Malcelo