Pedro Páramo - Juan Rulfo

[magali]

Enlace

Editado porque el vídeo anterior fue borrado.

[natura]

Me la he copiado en el hilo del autor, magali, gracias

[magali]

[BARSABA]

La entrevista es interesantísima. Descubre un montón de cosas sobre la obra y el autor. No tiene desperdicio.

[Aben Razín]

¡No prometo nada!,

La he puesto en el Futuro de mi Firma con la intención de leer esta novela tan elogiada,

[Aben Razín]

Con un comienzo prometedor,

Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuando ella muriera. Le apreté sus manos en señal que lo haría, pues ella estaba por morirse y yo en un plan de prometerlo todo.

Aquí, es donde vamos a empezar esta novela:

https://es.wikipedia.org/wiki/Comala

[Aben Razín]

Transcribo unos murmullos que vienen de unas voces; como todas ellas van inundando la novela,

Allá hallarás mi querencia. El lugar que yo quise. Donde los sueños me enflaquecieron. Mi pueblo levantado sobre la llanura. Lleno de árboles y de hojas, como una alcancía donde hemos guardado nuestros recuerdos. Sentirás que allí uno quisiera vivir para la eternidad. El amanecer; la mañana; el mediodía y la noche, siempre los mismos; pero con la diferencia del aire. Allí, donde el aire cambia el color de las cosas; donde se ventila la vida como si fuera un murmullo; como si fuera un puro murmullo de la vida...



(Se encuentra a mitad de la novela y de las voces que resuenan en Comala o en cualquier otro lugar),

[Isma]

Lo he empezado hace un par de días, a recomendación de magali. Un poco por detrás de ti, Aben.

Llevo poco y leo despacio. No he leído el prólogo. Nunca lo hago.

Me dan miedo los pueblos desiertos, abandonados. No tanto por la ausencia de personas sino por el abandono en sí mismo. El olvido, el polvo acumulándose en las esquinas. La promesa malograda. Lo poquito que llevo me da escalofríos, aunque por suerte Comala no está desierta del todo, sino colmada de recuerdos y de fantasmas. La prosa me parece onírica, muy poética. Las frases se entremezclan unas con otras y saltan atrás en el tiempo sin aviso. Me gusta ese juego, pero espero que no pretenda transmitirme desasosiego, el vacío del abandono: me resulta demasiado desolador.

[Aben Razín]

Me dan miedo los pueblos desiertos, abandonados. No tanto por la ausencia de personas sino por el abandono en sí mismo. El olvido, el polvo acumulándose en las esquinas. La promesa malograda. Lo poquito que llevo me da escalofríos, aunque por suerte Comala no está desierta del todo, sino colmada de recuerdos y de fantasmas. La prosa me parece onírica, muy poética. Las frases se entremezclan unas con otras y saltan atrás en el tiempo sin aviso. Me gusta ese juego, pero espero que no pretenda transmitirme desasosiego, el vacío del abandono: me resulta demasiado desolador.

Como no puede ser de otra forma, estoy completamente de acuerdo,

Edito en negrita:

No obstante, no son paisajes con fantasmas, sino que se encuentra el personaje con muertos que realmente nos trae recuerdos de lo que fuimos o de lo que deberíamos ser. En cuanto a la prosa, no puedo más que rendirme a esta manera de escribir tan seductora,

[Massi]

Buff, ni Pedro Páramo, ni llano en llamas... Leer a Rulfo es una experiencia de lo más agobiante... Lo más parecido a despertar dentro de un ataúd... Pides aire, y luz... A grito pelao... Socorrrrooo... Estos mexicanos me dan igual yuyu que al consul guiri borracho aquel...



No es mi cultura... Sorry...

[Aben Razín]

Terminado.

Creo que es lo que persigue Juan Rulfo: crear un ambiente que agobie al lector hasta meterlo dentro de la historia de un México rural donde la violencia y la muerte campan por sus fueros. Por eso, en el fondo, esta novela es, por antonomasia, coral y nos trae y nos lleve por el mundo de la memoria, los recuerdos y, sobre todo, los muertos. En un momento dado, en Comala, allá en la Media Luna, nadie sabe dónde está y cómo se encuentra. Sólo el poder del señor que todo decide, incluso el sexo, marca los tiempos que rompen esa tristeza infinita.

En este sentido, esta obra es de lo mejor que he leído en mucho tiempo con unos saltos temporales que van circunscribiendo una historia que asoma y permanece. Todo ello, sin duda alguna, queda enmarcado y aderezado con una prosa espléndida y con un dominio del lenguaje que me parece prodigioso. Es así, me lo habían dicho, pero es una de las mejores en nuestra lengua española.

Así me ha parecido, pero también conviene aclarar y precaver al lector para que sepa que no es una narración fácil, sino que exige un esfuerzo que, cuando se cierra la última página con la escena final, satisfecho ve que ha merecido la pena.

Saludos,

[magali]

Cómo me alegro de que te haya gustado, Aben!

Coincido muchísimo con tu apreciación de la obra: es absolutamente genial.

[Aben Razín]

magali,

Entonces, he de suponer que la has leído. A 24 horas de la finalización de esta obra, desde luego, deja un poso increíble en un lector curioso y activo, porque tras el mensaje brutal de sus páginas o, mejor dicho, a través de esa propuesta, se esconde una orfebrería fina que se ha ido tejiendo con cariño y esmero: no creo que haya ninguna palabra que sobre y ninguna expresión que esté por exceso. Incluso afirmo que, en algunos momentos, el español que usa alcanza altas notas de calidad literaria y lingüística.

Saludos,

[Isma]

Qué interesante, Aben. Me llama la atención algo que mencionas.

Sólo el poder del señor que todo decide, incluso el sexo, marca los tiempos que rompen esa tristeza infinita.

Tristeza infinita, sí. No encuentro fragmento que esté a salvo de esa tristeza. Hasta las descripciones son nostálgicas, referentes a un tiempo malogrado. En Comala parece que todo ha ocurrido para peor y no hay alegría ni en los nacimientos, ni en las relaciones. Incluso las descripciones de la naturaleza, de las estaciones. Pienso que tras la narración se oculta una seriedad mortal.

Esto también me llama la atención, y me gusta. Así debe ser.

A 24 horas de la finalización de esta obra, desde luego, deja un poso increíble en un lector [...]

[Aben Razín]

Tristeza infinita, sí. No encuentro fragmento que esté a salvo de esa tristeza. Hasta las descripciones son nostálgicas, referentes a un tiempo malogrado. En Comala parece que todo ha ocurrido para peor y no hay alegría ni en los nacimientos, ni en las relaciones. Incluso las descripciones de la naturaleza, de las estaciones. Pienso que tras la narración se oculta una seriedad mortal.

Es cierto, creo que marca completamente la narración de Juan Rulfo: en Comala, todo ha ocurrido para peor y sólo la nostalgia parece mantener ese hilo de la vela que expresa una existencia lacerante.

Esto también me llama la atención, y me gusta. Así debe ser.

A 24 horas de la finalización de esta obra, desde luego, deja un poso increíble en un lector [...]

Y sigue permaneciendo: esta novela rondará por mi mente durante mucho tiempo, pienso que tanto como los muertos y los espíritus en Comala,