De maravilla, sí. Yo creo que junto con Muñoz Molina es quizá el mejor escritor que tenemos en España.asangrefria escribió:En fin, que me está gustando mucho. Si alguien se desanima al ver esos bloques de texto, que no lo haga, porque se lee realmente bien y Chirbes escribe de maravilla
Ayer empecé "En la orilla", que creo que alguien por ahí la ha elegido como la mejor novela españñola del año 2013. Por lo que llevo leído, "En la orilla" retoma algunos de los temas de Crematorio (la especulación y corrupción) y sitúa la trama en el mismo sitio y lugar, la costa de Levante, hoy. He leído otro par o tres novelas de Chirbes, buenas todas ellas, con la posguerra de telón de fondo, la sensibilidad social, etc.. pero creo que Crematorio (y por lo que llevo leído "En la orilla") son las mejores.
Crematorio lo leí hace tres años, y veo que no dejé aquí reseña, así que aprovecho el tirón para copiar (mi memoria no alcanzaría de otra forma) lo que por entonces escribí sobre la novela.
Crematorio cuenta la historia de una familia en torno a la especulación inmobiliaria de la costa. Añada el lector mujeres, sexo y tráfico de drogas, que abundan en la novela, y ya tenemos listo el culebrón.
Pero más allá de la (vamos a llamarle) trama básica, que a simple vista parece un culebrón, “Crematorio” es una magnífica novela que Chirbes escribe desde el interior de los personajes que pululan por ahí (ya sea en primera persona, como es el caso de Rubén el constructor o en tercera, como en el resto de los personajes, pero siempre dejando la narración en voz de alguno de los personajes).
Crematorio no es una novela de acción, aunque lo parezca (en la misma medida que “La noche de los tiempos” de Muñoz Molina tampoco lo es, aunque la trama pudiera invitar a ello), es una novela de sensaciones, de ideas, de contrastes y de sentimientos, que no es poco. Y es fundamentalmente también una novela de “personajes” que se construye desde lo más íntimo (pero siempre consciente) de cada uno de ellos, personajes que “sudan” ideas, y plantean el conflicto moral de la historia (las distintas visiones de la especulación) desde sus diversos puntos de vista.
Es cierto también que Chirbes utiliza personajes un tanto “excesivos”, como el viejo constructor especulador, la hija contestataria (pero aprovechada), el hermano y los amigos idealistas, los sicarios, la segunda esposa del constructor joven, guapa y antaño medio puta, la tétrica y durísima madre del constructor etc… (todo eso en parte para “tirar” del lector y porque son personajes que se mueven en un mundo un tanto peculiar de dinero, drogas, mujeres).
Y para plantearnos el debate Chirbes echa mano de personajes opuestos cuyas ideas confronta , materialistas los unos, idealistas los otros (para resumir). El único personaje que no “habla” es el muerto, Matias (de ahí el título de la novela), que es el hermano idealista del otro personaje clave (Rubén), el constructor sin escrúpulos.
Pero al margen de todo eso (que puede sonar mal o bien) y de lo magníficamente bien que escribe Chirbes (sencillo, claro), lo que a mi me ha gustado de la novela es que a pesar de jugar con ideas básicas del bien y el mal, y de encarnarlas con personajes algo extremos (los buenos y los malos), al final no está claro quienes ganan a los ojos del lector, quienes son los buenos (si es que hay alguno) y quienes los malos, quienes los triunfadores morales y quienes los perdedores; sí, porque algo así como un velo de “miseria” parece envolver a los buenos y otro de “grandeza” amparar a los malos. Es un buen punto de la novela, aunque también por ello algo desesperanzadora, porque quizá nadie gana, reflejo del podrido mundo de la especulación.
En cuanto a la estructura formal, la novela está dividida en capítulos largos (cada uno lo cuenta un personaje y varios repiten) y no hay, creo, ningún punto y aparte, lo que le da cierta densidad a la novela, pero a mi no me ha resultado nada pesada, al contrario.
Tiene también, como todo, algunos fallos, quizá alguna historia que se queda sin cerrar, pero en fin, yo no soy muy criticón si una novela me gusta.
Señores, muy recomendable, léanla y comenten.