Todos los rostros del pasado - Francisco Brines

[Aben Razín]

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TODOS LOS ROSTROS DEL PASADO
Antología poética
Francisco Brines
Selección y prólogo de Dionisio Cañas.
Círculo de Lectores, S.A.
Fecha de publicación: 2007
Págs. 184.
ISBN 978 8467227154.

Cito de la contraportada de la edición:

En esta antología recogemos una amplia selección de la poesía de Francisco Brines. Partiendo de la base de que todos los poemas de un autor pueden arrojar luz sobre el núcleo central de su mundo poético, los textos que aquí hemos reunido ilustran el eje de su producción poética. Este eje se alimenta de dualidades contrarias pero que son, precisamente por ser paradójicas, el motor que infunde una dinámica de movimiento perpetuo en el que giran la muerte y la vida, el deseo y el desencanto, la memoria y el olvido, la infancia y la senectud, la meditación y la acción, el esplendor del cuerpo joven y el acabamiento de esa juventud (...)

Si bien Carlos Barral declararia al publicarse el libro de Brines El otoño de las rosas que el autor era ya "un clásico", José Olivio Jiménez lo definiría como "uno de los poetas de voz más distintiva e intensa, y además explorador pausado, pero incansable, de un mundo interior singularmente diferenciado. Por ello, eses mundo es el suyo, naturalmente, pero el alcance de sus meditaciones poéticas rebasa sus personales circunstancias y se erige en verdades fácilmente (y dolorosamente a veces) compartibles por todos".

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Aquí dejaré algunos poemas y mis sensaciones hacia este poemario,

[Aben Razín]

Dejo este vídeo de Francisco Brines,

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Intervención del poeta Francisco Brines, premio Cervantes 2020, en la celebración de los 25 años del Premio Internacional de Poesía Fundación Loewe, que acogió la sede central del Instituto Cervantes en Madrid en 2013.

[Aben Razín]

ALBA.

Industriosa ciudad, salobre y húmeda,
en donde las callejas despertaban orinadas y solas,
camino del hotel.
Igual que el sol nacido, pero más puro y libre,
se apoya aún aquel cuerpo, en una esquina,
con restos desprendidos de blasfemias y vicios.
Gatos indiferentes. Y un humo de tabaco
se iniciaba en el día
más hermoso y más largo del verano.

[Aben Razín]

CONTINUIDAD DE LAS ROSAS.

Donde vista la luz, sigue la luz,
y allí donde los cuerpos estuvieron
siguen las olas mojando las arenas;
donde oliste la flor, zumban abejas
nuevas, y otros veleros tiene el mar.
En el lugar donde absorto viviste
el engaño del mundo: tu inocencia,
los mismos astros permanecen.

Ciego,
miras la luz, las olas, las abejas,
los veleros, los astros. El camino
está lleno de rosas, y no hueles
sino la oscuridad desposeída.
Entra en la casa aún, cierra el postigo:
nadie te espera ya, y a nadie esperas.

[Aben Razín]

MADRID, JULIO 1992.

Vuelve la hora feliz. Y es que no hay nada
sino la luz que cae en la ciudad
antes de irse la tarde,
el silencio en la casa y, sin pasado
ni tampoco futuro, yo.
Mi carne, que ha vivido en el tiempo
y lo sabe en cenizas, no ha ardido aún
hasta la consunción de la propia ceniza,
y estoy en paz con todo lo que olvido
y agradezco olvidar.
En paz también con todo lo que amé
y que quiero olvidado.

Volvió la hora feliz.
Que arribe al menos
al puerto iluminado de la noche.

[Aben Razín]

Terminado.

Con El otoño de las rosas, noté a Francisco Brines con una poesía más experiencial. Con éste, lo he sentido más metafísico en el que ahondaba en el Ser, pero, eso sí, desde la experiencia vital. Aunque, en los primeros versos, no estaba congeniando con su poética, posteriormente, me he sentido más cercano. Era cuestión de paciencia.

La poesía no es fácil de recomendar, porque es algo personalísimo, pero me atrevería a hacerlo con la dosis reglamentaria de tranquilidad y sosiego en la lectura y reflexión de los versos que se van leyendo. En algunos casos, hasta tres veces para alcanzar la hondura del mensaje.

En definitiva, entre tanta violencia, una frescura entre naranjos y azahar,

Saludos,