Uy la verdad que ha estado complicadito el caso, he cambiado varias veces las hipótesis pensando y pensando...
Me inclino por esta, pero la veo floja igual...
Rachel era una mujer ambiciosa que siempre deseaba crecer y potenciar sus negocios y su rancho.
En unas tierras aledañas a su campo, encontró unas canteras de oro. Sabía que con eso podía empezar un gran emprendimiento que la llevaría a la cima de todo.
Entonces tomo la iniciativa de empezar a trabajar esas tierras, explotarlas para su uso.
Los días previos a la fiesta del pueblo, se cruzó con Luis Sandino y le comentó que tenía grandes negocios para proponerle. Necesitaba muchas herramientas para arar la tierra, cultivar y trabajar. Él era el principal herrero del pueblo. Le avisó que todo el pago se iba a hacer por adelantado en oro, que no se preocupara. Pero que necesitaba los insumos cuanto antes, que ella esa misma pasaba a buscar todo y le pagaba. Luis vio un gran negocio y le confirmó que en el día de la fiesta pasara por los establos, ahí le iba a dejar las cosas para que ella con su caballo lo buscara.
En el trayecto de su vuelta, se cruzó con el sheriff y le pidió que la custodiaran, porque no quería tener más problemas con su vecina Veves, ahora que su rancho iba a tomar mayores terrenos y cercanos al de ella. Rachel confiaba mucho en él, sabía que iba a hacer todo por cuidar su rancho y evitar más problemas en sus tierras.
Lo que nunca tuvo en cuenta, es que pequeña Leona estaba siempre callada en su rincón observando todos sus movimientos y escuchando sus planes. Y lo que menos imaginó que esas tierras que ahora ella estaba usurpando, eran del nativo pueblo indígena de la familia de “pequeña”.
El odio que empezaba a correr por su sangre iba en aumento y a veces se lo hacia notar a Rachel.
Conocía todos los movimientos que tenía que hacer el día de la fiesta y la siguió a Rachel hasta los establos, donde Luis le había dejado sus encargos: unas horcas de espiga.
Pequeña Leona se le aparece de sorpresa y la empuja con tal fuerza que hace golpear la cabeza de Rachel sobre una mesada de madera y cae arriba de las horcas, terminando con la vida de Rachel.
El oro que a Rachel la hacía tan feliz y pensar en riquezas, para Leona era la piedra más insignificante que podía existir. Lo más valioso era su sangre, su pueblo y esas tierras que tanto amaba.
Asesino: pequeña Leona.
Arma: tablón de madera
Motivo: las ambiciones de poder de Rachel por comprar tierras que eran de sus antepasados, con riquezas de su pueblo.