Aquí os dejo el caso
UN ASESINO ENTRE NOSOTROS
La reunión que había tenido lugar esta misma mañana en la sede de las Naciones Unidas había estado al rojo vivo.
Tras largas horas de negociación, los representantes de los distintos países no habían logrado un acuerdo satisfactorio. Con dos posturas claramente encontradas y a causa de ellas, una violenta y desagradable discusión había tenido lugar hacía solo pocos minutos entre la representante de Italia, Giada Ragione y su homónimo, el representante de Japón, Sinkim Yamamoto.
Algunos de sus colegas habían apoyado a Giada; Lía García de España y Veves Dos Santos de Brasil, pero otros, Gisso Smith de E.E.U.U, Tito Bolt el jamaicano e Iréz Brown del Reino Unido daban la razón a su colega japonés.
La única que tenía dudas era Inmax Swatch, la representante suiza, aunque la presionaban de uno y otro lado para que tomase una decisión.
Así que todo apuntaba a que tendrían que reunirse nuevamente esa misma tarde para intentar llegar a una solución.
Todos decidieron parar para almorzar y retomar las conversaciones después.
Giada estaba tan disgustada que no tenía hambre y pensó que sería mejor quedarse a repasar su propuesta en su despacho una vez más.
La reunión se retomó pero esta vez sin Giada.
El resto de compañeros se extrañaron de su ausencia ya que ella parecía ser la más interesada.
De pronto, se oyó a lo lejos un grito y la asistente de Giada con la cara desencajada y entre sollozos anunció que su jefa estaba muerta.
La conmoción y la incredulidad reinó en la sala.
¿Quién había asesinado a Giada y por qué motivo?
Personajes:
Giada: Representaba a su país solo desde hacía unos meses. Mujer muy ambiciosa y con las ideas muy claras. Odiaba que le llevasen la contraria. La ecología y el medioambiente eran una de sus mayores preocupaciones.
Sinkim Yamamoto: Hombre algo temperamental chocaba con las ideas de Giada, razón por la que casi siempre discutían, aunque era de manera amistosa, por supuesto! ( o no?).... Nunca había llegado “la sangre al río”.
Asegura que no sabía nada del paradero de Giada desde que acabó la reunión.
Inmax Swatch: Siempre muy diplomática (vamos que no se mojaba ni debajo del agua).
Era buena amiga de Giada y lamenta profundamente su pérdida.
No sé quien podría hacer algo tan horrible – declara. Creo que fui la última en ver a Giada con vida pero después no sé que pudo pasar.
Lía García: Se muestra muy tranquila al conocer la noticia del asesinato de Giada.
La difunta me caía bien pero teníamos una relación estrictamente profesional, sabe?
No creo que Giada tuviese enemigos pero quizá la discusión de esta mañana con Sinkim pueda tener algo que ver.
Veves Dos Santos: Está en estado de shock y no puede contestar a las preguntas de la policía. Según su versión Giada no tenía ningún enemigo aunque sí que es verdad que la chica era un poco trepa y no sabía relajarse. Hay que tomarse la vida con alegría, no cree?
Gisso Smith: ¡Qué tragedía la muerte de Giada! Y pensar que hacía unas pocas horas habían estado hablando!
Seguro que la ha matado un terrorista, no pudo ser ninguno de nosotros. Somos gente pacífica - asegura el ex militar.
Tito Bolt: No entiendo nada- dice. La señorita Giada era muy buena y muy dulce, aunque creo que algo le preocupaba.
¿No pensará que he sido yo, verdad? Sinceramente no tenía ningún motivo y además, me horroriza la sangre…
Iréz Brown: No la conocía demasiado bien, ya que hace poco que trabajo aquí pero me parecía una chica bastante seria y competente. Debo decir que no compartía sus ideas pero de ahí a asesinar hay un trecho, no cree?
Para mí que ha sido el japonés, siempre andaban a la greña. Pregunte a quién quiera y ya verá.
Armas: Veneno, pistola con silenciador, las manos, pisapapeles.
Motivos: Profesionales, personales, una mezcla de los dos, ninguno: fue un desgraciado accidente.