Bueno, aquí viene la muerta con su caso. Siento que no este al nivel de mis predecesores, pero se hizo lo que se pudo
HISTORIA DE UNA ESCALERA
-Policía ¿Dígame?
+ Es es es...
-Tranquilícese, y dígame que le sucede.
+No..no..no puedo. ¡Déjame!
- ¿Oiga?¿Está ahí?
piiiiiiiiiii
Y esa es la llamada que recibimos. Hoy todavía no sabemos que sucedió, y si fue realmente la víctima quien llamó. Lo que sí sabemos es que horas después recibimos un aviso en la calle ¡Ábrete libro! número 27. Se nos avisó que de la puerta dos salía un olor nauseabundo. Al llegar, notificamos que ahí no residía nadie, y tiramos la puerta abajo. Nos encontramos con un cuerpo, que más tarde identificamos como la propietaria de la puerta 5; Iréz. Una chica simpática, educada y tranquila. Sus vecinos no se explican que ha podido pasar.
Acordonamos el portal, y nos dispusimos a interrogar al edificio. Que constaba de tres pisos. Dos puertas por rellano. En la puerta 1 vivía la señora
Lía. Una señora mayor y soltera. Vivía sola, y se dedicaba a ser la espía de todo el edificio. Era la señora de la mirilla. Nadie entraba ni salía del edificio sin que ella lo supiera. Pero por lo que nos contó, no vio nada fuera de lo normal en la noche de los autos. Aunque dudamos que nos contara la verdad, cuando le preguntamos qué relación tenía con la víctima;
“¿con esa? Sólo éramos vecinas, y gracias”
Justo encima de ella en la puerta 3, vivían
Nuevo e
Ireki. Dos estudiantes. Enemigos supuestos de la señora Lía. Porque según ella hacían un día fiesta, y al otro también. ¡Y ella necesita descanso! ¡Con lo que ha trabajado ella en la vida, y a la hora de su descanso, venían estos dos energúmenos a molestarla! A lo que íbamos, Nuevo dijo que ellos sólo estaban ahí porque era un sitio tranquilo donde poder estudiar. Sin fiestas de erasmus, ni chicas que les distraigan de sus quehaceres. Porque su vida consistía en estudiar y entrenarse para sus competiciones. Su compañero (dudamos que sea sentimental) estudia lengua y literatura, y es un erudito en las novelas negras. Cuando les preguntamos por la relación que tenían con Iréz;
“No se podía decir que éramos amigos, pero nos teníamos simpática cada vez que nos cruzábamos en la escalera, y alguna vez se vino a ver alguna película un viernes por la noche”, nos contó Nuevo. Ireki pareció reacio a confirmar lo dicho por su compañero, y se excusó diciendo
“Yo es que no estoy mucho en casa. Los fines de semana me suelo ir fuera”
En la puerta 4 viven la pareja
Tito y
Ada. Por lo que vimos, están casados hace 10 años. Pero no vimos ningún rastro de algún niño en el matrimonio. La mujer se mostró muy afectada, y apenas hablo. Por lo que tomo la voz tito.
“Disculpen a mi mujer, Ada, está muy afectada. Iréz era su apoyo más próximo, pues nos vinimos de nuestra ciudad natal porque me ofrecieron un trabajo que fui incapaz de rechazar. Ada se siente sola, y se respaldó en Iréz. No entiendo quien ha podido cometer semejante asesinato”. Ada, cuando Tito se fue a la cocina a traer un poco de agua (pues entre tanta pregunta, se nos estaba secando la garganta) levantó la vista del suelo, y vi en ella una mirada que escondía cierto rechazo. No pude dilucidar si hacia la policía o hacia su propio marido. No dijo nada en todo el rato que estuvimos en el domicilio conyugal.
Por último tenemos en la puerta 6 a la familia Jonhson.
Sinkim, padre viudo y sus hijos
Yuyu y
Ratpenat. Una familia respetable, están muy unidos.
“Iréz nos era muy querida. Nos ayudaba en todo lo que podía, siempre tenía una sonrisa disponible y buenas palabras” relata el padre de familia. Sus hijos de 21 (yuyu) y 19 (ratpenat), corroboraron lo que dijo su padre. En ese instante se cruzaron una mirada de complicidad. Un leve gesto. Que cabe pensar que saben más de lo que están contando.
Motivo: ¡Que yo no me quedo sin ti!/ Arpia, esa vida era mía/Tan buena no se puede ser, escondes algo oscuro.
Arma: Golpe certero sin dejar rastro/ un poco de cianuro en la sal que siempre te dejo/ jarronazo en la cabeza y asunto resuelto.
Pregunta extra: ¿Quien es el propietario de la puerta 2?