Madame Solario - Gladys Huntington

[Eyre]

Chicas, ¿qué tal vais?

[Sue_Storm]

Yo sólo he "calado" parte del primer capítulo y me gusta el tono, el ambiente y lo poco que sé de los personajes. Pero hasta dentro de un día o dos no voy a poder seguir

[natura]

Yo sólo he "calado" parte del primer capítulo y me gusta el tono, el ambiente y lo poco que sé de los personajes. Pero hasta dentro de un día o dos no voy a poder seguir

+1 pero sin la "cata" . Vamos, que en un par de días me pongo también.

Eyre, te toca sprintar para devolver a la biblio, me temo

[Eyre]

Eyre, te toca sprintar para devolver a la biblio, me temo

Sí, ya me estoy poniendo las pilas porque tengo que devolverlo el lunes , pero vosotras avanzad a vuestro ritmo, sin agobios


He terminado la primera parte y por fin he conseguido hacerme a los personajes, me he centrado. Además, ahora que ha aparecido

el hermano de Natalia

la historia puede tomar un rumbo aún más interesante.

Madame Solario es una mujer reservada, enigmática y fascinante, la reina de la fiesta.

Bernard está intentando sonsacarle información sobre su pasado, sin éxito todavía. ¿Han insinuado que el padrastro de Natalia intentó propasarse con ella? ¿A qué se refieren con "el incidente"? Supongo que será por eso que su hermano se enfrentó a él.

Caro: a mí también me ha chocado lo de la "hora de la merienda por la mañana"

[Sue_Storm]

De la merienda por la mañana nunca he oído hablar, pero sí he oído contar en mi familia que mi bisabuelo se tomaba "sus once" (por las once de la mañana): una copita de vino dulce y un bizcocho. La época coincide. A lo mejor era algo así.

[guille]

Caro: a mí también me ha chocado lo de la "hora de la merienda por la mañana"

De la merienda por la mañana nunca he oído hablar

Bah, mujeres de poco mundo: no conocéis mi pueblito, del que ya os he hablado.

A ver si con un comentario más cultureta os va mejor. 2ª acepción de la RAE: "Comida que se toma al mediodía."

Y el mediodía son las doce y como allí van con una hora menos, ya tenemos las once.

[Eyre]

Ahí va pues

[Sue_Storm]

Llevo unas cien páginas y, la verdad, hasta ahora no me está enganchando mucho que digamos. Veo que la juventud y la inexperiencia de Bernard se contrapone con la sofisticación del entorno, en donde se encuentra un poco despistado y un bastante perdido..., que madame Solario es una mujer misteriosa y perseguida por la leyenda de un pasado turbulento... y está bien escrita, sí, ves las noches de verano y las aguas del lago de Como. Pero, no sé..., quizá es que tiene muchas pretensiones de narrar a lo Henry James, y no sé hasta qué punto lo consigue la autora Creo que mejorará según vaya avanzando la historia. Y me voy a tener que dar prisa porque tengo que devolverlo el día 19 y no me dejan renovar el préstamo, ains.

[Eyre]

Tuve las mismas impresiones en la primera parte, Sue: demasiado pausada, demasiado calmada, demasiado tibia... En la segunda se produce un cambio de perspectiva y la historia se torna más pasional.

[natura]

Pues a ver si es cierto que esto se anima en la Segunda Parte, porque voy por la pag. 150 y mi impresión es clavadita a la de Sue: bien escrito, buenas descripciones de ambientes y caracteres, peeero... tampoco me termina de enganchar la historia, no sé si porque con tanto atardecer, tanta excursión y tanta fiesta no termina de contar nada a fondo, o porque está reservando la historia de los personajes interesantes para las dos últimas partes de la novela. Con tanto misterio en torno a los protagonistas (madame Solario, el conde Kovanski...) a mi se me queda

una narración fría, superficial, sobre una mujer en la plenitud de su encanto y supuestamente marcada por un pasado "atroz" que nos va desvelando a trompicones el hermano recien llegado al hotel.

Lo dicho, que a ver si se espabila la cosa, porque ya estoy un poquito harta de sombreros con muselina y frufrú de faldas

[Eyre]

Pues luego se vuelve un culebrón

[natura]

Ya me dejas más tranquila!

[Sue_Storm]

Terminado.

En su conjunto el libro me parece muy bien escrito, a pesar de esa primera parte errática que durante la lectura resulta algo sosa, porque al ir avanzando (y al cambiar el tono de la narración) cobra cierto sentido y se ve bajo otra luz. La autora ha elegido una forma muy difícil de escribir, que es, como dije más arriba, a lo Henry James: extremadamente ambigua, callando mucho más de lo que dice, y sin dar al lector ningún tipo de explicación adicional. En lo que se refiere a la historia, yo diría que lo ha conseguido. Pero no diría lo mismo en lo que atañe a los personajes, porque algunos se me quedan cojos.

El que me parece mejor construido es Bernard Middleton:

encarnación de la inocencia juvenil sazonada con bastante bobería al que unos y otros utilizan y manejan a su antojo, mientras él, sin iniciativa ninguna, se deja llevar con la boca abierta, y hasta suspira de alivio cuando son los demás los que toman decisiones por él. ¡Pobre chaval! está claro que no olvidará ese verano en toda su vida, y que a pesar de todo, soñará con aquellos días cuando esté trabajando en ese banco que le han buscado y que tan poca gracia le hace.

Madame Solario

es la auténtica mujer fatal, que provoca desgracias y corrompe todo lo que toca y que, aunque a veces intente escapar a su destino (su matrimonio, el romance con Kovanski, la huida en busca de aquel viejo amigo que puede devolverla a Estados Unidos, donde vivió cuando aún era inocente...) en el fondo de su corazón sabe que no podrá hacerlo, y por eso ni se sorprende ni se alborota cuando el hermano incestuoso termina siempre encontrándola y volviendo a llevársela consigo. Creo que la autora ha querido dibujar un icono, un prototipo, más que una mujer de carne y hueso. Y es que no vemos a madame Solario sufrir por esas contradicciones; no la vemos llorar ni asustarse, ni siquiera ponerse nerviosa... ¡Siempre como un témpano, irradiando atractivo y atrayendo a los hombres como una araña a las moscas, pero sin inmutarse! La verdad: estos aspectos del personaje me parecen irreales; no me los creo mucho.

El conde Kovanski

es un personaje muy típico de aquellos años y de la sociedad internacional que la autora dibuja: el noble eslavo atormentado y apasionado, que ha arruinado su carrera militar y que, consumido por pasiones diversas -la bebida, el juego...- pone sus últimas esperanzas en conseguir el amor de Natalia Solario y, cuando la pierde definitivamente, hace lo que hace. Lo vemos casi siempre a través de los ojos de Bernard Middleton, y el cambio de perspectiva de éste según va sabiendo más de él resulta muy bien conseguido: de ser un personaje odioso se convierte en alguien digno de lástima.

Y Eugene Harden

para mí es el "malo" de la historia, un sinvergüenza sin escrúpulos que maneja a su hermana en todos los sentidos y, además de utilizarla para lo que la utiliza..., que ya hay que ser perverso y malvado de corazón... planea nada menos que buscarle otro marido rico y vivir "tranquilamente" a costa de ese nuevo matrimonio, mientras por detrás... Y todo parece indicar que lo va a conseguir. ¿Es que Natalia no tiene voluntad? ¿O es que... le gusta? Eugene es un malo muy coherente, desde luego, eso sí.

Hay situaciones y momentos del libro que creo que se me van a quedar dando vueltas en la cabeza durante algún tiempo.

En suma, una buena experiencia, a pesar de algunas carencias. Lo recomiendo porque no te deja indiferente.

Y acabo de enterarme de que hay película. Francesa, de 2012.

Enlace

[Eyre]

La historia es un culebrón, pero con estilo El final es de traca.

En la primera parte se van sugiriendo algunas cosillas. Se insinúa, se deja entrever, pero no es hasta la segunda cuando se levanta el velo. Hacía falta ese cambio de perspectiva para observar más de cerca lo que sucedía de puertas adentro.

Bernard

es un buenazo, pero le falta un hervor Le falta ese puntito que otorga la experiencia. Sin embargo, se le ve noble: se conmovió por la situación de Ilona y quiso hacerle justicia; lo que pasa es que luego se deja llevar por los demás. Pusilánime.

Madame Solario me transmitía lo mismo que a ti. Parafraseando a Guille: es como una bella estatua, de mármol, o de hielo. Hermosa, seductora, fascina a todos los que la rodean, pero esa impasibilidad transmite frialdad.

Quizás las experiencias vividas en el pasado provocaran que Natalia estuviera de vuelta de todo.

Harden

personaje maquiavélico. La relación que mantiene con su hermana es malsana.

Y acabo de enterarme de que hay película. Francesa, de 2012.

Hm, interesante. Gracias

[Caroline]

Sue