Siempre hay.
Dicho esto y acabado el libro, me ha gustado mucho. E incluso he soltado alguna lagrimilla porque me da mucha pena Holden, lo incomprendido que está.
A la escena tan comentada del señor Antonili acariciándole la cabeza. No sé si realmente había en el adulto esas oscuras intenciones que Holden se piensa, o más bien la pena de un adulto que ve a un niño tan perdido. Si yo hubiese sido Antolini también le habría acariciado el cogote al pobre Holden, porque es un niño. |
AL prota lo veo un niño hombre, o un hombre niño. Un adolescente que idealiza la niñez probablemente porque la muerte de su hermano le hace vivir en una continua regresión, de manera que hace cosas de niño (sus estupideces y cosas de indio) y cosas de adolescente (el vago interés por las mujeres) Cualquier niño echaría de menos a su hermano, pero es que Holden, como demuestra con sus gustos literarios y sus sueños de futuro, es una persona de una gran sensibilidad |