Poco he avanzado el fin de semana. Me he dedicado en cuerpo y alma a jardinear en la tierra, trasplantando los plantones de flores de los semilleros a los parterres, y no en el papel. Comienzo el
Libro segundo. El intestino de Leviatán de la
Quinta parte. Juan Valjean (página 1092/1262 (87%)).
Desde luego, además de fantástico prosista, Victor hugo era un auténtico letrado. Lo mismo disertaba sobre moral o sobre historia, que se ponía a filosofar o a ilustrarnos sobre la naturaleza o de los sistemas de alcantarillado a lo largo de los siglos. Y debía escribir bastante de memoria sobre todo esto porque las correcciones a pie de página del traductor son relativamente frecuentes.
jilguero escribió: ↑04 May 2019 16:08... deberías rebuscar en la red a ver si averiguas si este hombre tenía algo de sangre gallega: en la parte conventual me ha recordado mucho a don Gonzalo en el pasaje Ritual Iniciático de las Palanganatas, en La Saga/fuga.
Nada he encontrado. Parece ser que toda la relación de Victor Hugo con España fue su residencia durante dos años de su infancia, entre 1811 y 1812, en Madrid, ya que su padre, militar, había sido enviado allí por José Bonaparte.
jilguero escribió: ↑05 May 2019 19:12En realidad, voy todavía por el libro sexto de Marius, pero me ha podido la curiosidad y resulta que ya sé el final.
¡Anda, mira tú! El jilguero no es curioso por naturaleza pero la
jilguero sí.
Recuento 2024
Ayer: Grito nocturno. Borja González
Los asesinos del emperador. Santiago Posteguillo
Hoy: Hoy es un buen día para morir. Colo
Soberbia. William Somerset Maugham