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Ivanovich, se lee a una perfección razonable (teniendo en cuenta que mucho en el libro es filosofía). Yo he tardado, porque más que leer, he estudiado y aprehendido ciertos pasajes (los de pura filosofía).
Ilvin nos habla de la filosofía de Schopenhauer de manera que podamos entenderla sin necesidad de leer más de dos veces un mismo parrafo y si los relees es porque simplemente no quieres olvidar. De todas maneras Schopenhauer se consideraba claro a la hora de escribir, no le gustaban los filósofos de prosa incomprensible como Hegel. De hecho le odiaba.
Y tenía una prosa exquisita. (Schopenhauer)
Finite to fail, but infinite to venture E. Dickinson
Recientemente leí ambos libros de Yalom y encontré algo
mas cercano este ultimo dedicado a la dinamica de grupo y el pensamiento -bastante simple -de Schopenhauer.
¿ A que proposito sirve mezclar la psicoterapia y la
filosofia en una novela de este tipo ? Puede que a un intento
bien intencionado y un poquitin comercial de acercar la filosofia
a lo cotidiano y al interes publico.Si es asi bienvenido sea pero creo
que en este caso algo se perdió en el intento.
Perdí entre tanta biografia y filosofia, el interes lector por los pacientes-protagonistas y sus angustias y, peor aún,el interes por el valor terapeutico-importantisimo- de la dinamica de grupo.
Depende de cómo leas el libro y lo que esperes de él.
Yo he leído y estudiado a Schopenhauer (en la universidad) y sin embargo me gusta como Yalom mezcla aquí diversos... biografía, filosofía y un tanto de trama. En gustos los colores.
Finite to fail, but infinite to venture E. Dickinson
julia escribió:Recien editado en castellano,
Deberiaios cambiar el titulo, en castellano lo han titulado La cura Shopenhauer lo compre en la feria de Madrid.
Cierto,además es su título original.Novela un poco floja,es más interesante la vida de Schopenhauer que intercala el autor,que la terapia de grupo,aunque al final aumente un poco la intensidad de sus protagonistas e interés por mi parte,con un desenlace esperado y un tanto pastelón.En fin, El día que Nietzsche lloro es bastante mejor que esta.
El de Nietzsche me gustó bastante, Yalom tiene una forma de escribir muy accesible aunque hable de filosofía, así que miraré también éste. Tendré que experimentar con el portugués, que fue lo único que encontré para descargar, pero bueno, para los gallegos se entiende bastante bien. En la introducción el autor nos menciona varias fuentes que utilizó entre las que se encuentran, entre otras muchas, la biografía de Safranski y los ensayos de Patrick Gardiner y de Bryan Magee, estos dos últimos aunque son escasos se pueden encontran en castellano. De Maggee también dice que tomó de su Confesiones de un filósofo (por lo visto, no está traducido al castellano) la idea de la "biblioterapia". En el primer capítulo nos presenta al personaje, un maduro psicoanalista viudo y con un hija y un hijo, en Estados Unidos y en época contemporánea, no es, pues, como el de Nietzche en el que viviamos con él en su propia época. Como decía, a este hombre, le acaban de diagnosticar un cancer de piel y medita sobre la forma de emplear el año que le queda de vida, repasando su biblioteca parece que quiere recurrir a la "biblioterapia" y lo primero que se le viene a la mano es su admirado Zaratustra, curiosa la comparación que hace sobre las ideas de Nietzche con un test de Rorschach, que no parece muy desacertada, por cierto. Luego, recordando antiguos pacientes, tiene la curiosidad de contactar con un atractivo químico que era adicto al sexo y del que perdió la pista hace 20 años.
Los capítulos comienzan con citas de Schopenhauer, la primera es esta, sacada de El mundo como voluntad y representación:
Cada vez que respiramos, apartamos la muerte que nos amenaza. (...) Al final, ella vence, pues desde el nacimiento ese es nuestro destino y ella juega un poco con su presa antes de comérsela. Mas continuamos viviendo con gran interés e inquietud por el mayor tiempo posible, de la misma forma que soplamos una burbuja de jabón hasta quedar bien grande, aunque tengamos la absoluta certeza de que va a estallar.
ya se ha encontrado con su ex-paciente y parece que su vida a dado un giro importante, ahora tiene una consulta de orientación psicólogica lo que le provoca comentarios bastante jocosos a Julius dado los antececentes del personaje. No obstante, a pesar de su patología, era gran aficionado a la filosofía y alega haber encontrado su gran fuente de inspiración, para su nueva ocupación, en Schopenhauer.
Bueno, tengo algun que otro problema con ciertas expresiones pero vamos yendo. El argumento no me engancha mucho parece muy simple, me atrae más las referencias literarias y filosóficas y los apuntes biográficos de Schopenhauer que va intercalando a lo largo de la trama en pequeños capítulos y que parecen que son con el objeto de darles cierto paralelismo con los personajes. Mencionan en la novela a los Bunderbrock de Mann donde su protagonista utiliza los escritos de Schopenhauer como apoyo emocional así como el ensayo sobre el filósofo que publicó Mann más tarde donde desvela ese detalle ya que en la novela, según Yalom ya que yo no la he leido, no desvelaba quien era ese autor. De todas formas, las explicaciones filosóficas no son profundas los protagonistas intentan implantar un nuevo método de terapia con base a conceptos metafísicos y de aplicacion práctica a la vida diaria.
Curioso me pareció también, aludiendo a distintos autores a los que habría influido Schopenhauer, a Conrad como uno de ellos, es la primera vez que lo oigo.
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