Ciceron, de Anthony Everitt

[madison]

Es la biografía de Marco Tulio Cicerón, estoy encantada con este libro, ya contaré.
Es de Edhasa así que es garantía segura de que es una historia documentada y con rigor.

[Cicero]

Es la biografía de Marco Tulio Cicerón, estoy encantada con este libro, ya contaré.
Es de Edhasa así que es garantía segura de que es una historia documentada y con rigor.

Hoy empiezo con él. Tengo muy buenas referencias del mismo. ¿Te ha gustado? ¿Habias leido alguna otra biografia de él?.

Un saludo.

[madison]

Mucho Cicerón me ha gustado mucho.
Es la primera biografia que he leido sobre él, anteriormente solo he mirado artículos y revistas historicas en las que hablaban sobre él.
Gran personaje.
Si te parece a medida que tú leas vamos comentando
Un saludo

[Cicero]

Me parece perfecto.

De todas formas lo primero que querría decir que me parece que estaría mejor en el apartado de ensayo y divulgación.

Respecto al libro ahora he acabado con el capitulo cuarto que trata de su consulado. Lo estoy encontrando magnifico ya que mezcla perfectamente los acontecimientos historicos con la descripción de la vida cotidiana y de los personajes coetaneos a él. Además lo estoy leyendo de una forma muy especial, ya que simultaneamente voy leyendo algunas de sus obras.

Fue un gran defensor de la república y aunque ya estaba muerta, Cicerón -con sus luces y sombras como cualquier ser humano- ha hecho grandes aportaciones.

[madison]

Pués debe ser muy interesante complementar sus obras.
Cuando acebé el libro me quedé un poco pensativa....en su vida, en sus circunstancias, él lo que quería era ser abogado...

[Cicero]

Bueno, él quería se abogado como medio para conseguir una carrera política, que era su verdaero objetivo, como quería seguir todo buen romano de clase alta. Y como militar no sirvió utilizó su oratoria. Realmente el abogado en Roma no es como en la actualidad y él más que un iuriscunsultus fue un orator, pero su meta real fue siempre poder seguir el cursus honorum y llegar a la maxima magistratura y al reconocimiento general que como "hombre nuevo" no le correspondía. Pienso que realmente no lo consguio en vida y nunca fue aceptado por las clases patricias, pero en cambio si ha pasado a la posteridada que era otro de sus objectivos. En esto su vanidad era total.

Un saludo

[madison]

Pués fijate que yo no le veo tan vanidoso, no era romano, pero tampoco lo pretendía, estaba orgulloso de su procedencia.
Y lo mas importante es que su oratoria todavía hoy persiste entre nosotros, me cae muy bien

[Cicero]

Querida Madison: si llevo su nombre -y con mucho orgullo- es por algo. Su figura me ha fascinado desde que lo estudie en primero de derecho. Es un hombre contradictorio que nos ha dejado un gran legado. Eso no quita que un poco vanidosillo si lo era (la mayoría lo somos pero no nos atrevemos a decirlo como él). Siempre estaba explicando lo bueno que era y todo lo que había hecho por la república y que él la había salvado. Pero personalmente le perdono todo. Son más sus aciertos que sus fallos. El libro, precisamente, da una visión suya muy distinta y positiva que otros autores, más críticos, y por eso me gusta.

[Fley]

La idea de que todo lo que hacía lo hacía por la república le permitía salir del paso y disimular en parte su vanidad. No dudó en unirse a potenciales caudillos (Octavio) que ya eran seguidores de otros caudillos (Cesar). O de ensañarse con sus rivales políticos directos, como Caitilina, a pesar de que éste ya no representaba ningún peligro. Pero la disculpa absoluta está en que todos hacían lo mismo, y Cicerón tenía arte y grandiosidad para hacerlo. Pero sí, algo vanidosillo sí era..

[madison]

Querido Cicerón, desde que vi tu nick imaginé tu admiración por él.

Hablando del libro en general debo decir que me ha parecido muy instructivo, sobre todo para gente como yo que no somos muy doctos en el tema de Roma, así que gracias a él me he enterado de infinidad de cosas las cuales ignoraba totalmente.
Tienes razón, debería estar en el apartado de ensayo, lo abrí aquí porque desconocía que lo fuera.

Y para ir poco a poco comentaré desde el principio las cosas que más me han gustado o impactado. Por ejemplo (quizás te parecerá una tontería) cunado el autor explica cómo era la casa, yo, cerrando los ojos la podía ver y la verdad me moría de envidia.
Esa casa entre árboles, rios, paseos con sus bancos para poder leer, descansar o conversar es una maravilla.

El siginificado de Cicerón (garbanzo) no lo sabía, nunca lo había leido, pero mira él estaba orgulloso y no lo cambió por ningún otro cuando alcanzó poder.

La facilidad de poder escribir quinientas líneas en una noche, aunque lo poético no iba con él, vaya que no era su fuerte, pero con catorce años ya acabó su primer libro

También desconocía que había una fecha exacta para celebrar la mayoría de edad.

Por cierto...sabías que Catón nunca tuvo estatua? supongo que sí lo sabias, pero a mi me ha llamado mucho la atención y más todavia por la respuesta que el dió sobre el tema cuando álguien le preguntó.


Muy interesante también el capitulo del consul Bíbulo.....en fin.....ya seguiremos no?

Por cierto me han entrado unas ganas de leer Vidas Paralelas, de Plutarco

[lucia]

A sus órdenes

[Cicero]

Acabo de leer el suicidio de Catón y aunque me lo sé de memória nunca deja de impresionarme. Fue un gran defensor dela República y con su muerte desapareció uno de sus últimos defensores.
Respecto a la mayoría de edad, está solía ser un poco antes de cumplir los 17 años para los chicos y era el paterfamilias quién tomaba la decisión. Se entrega la bulla y la toga praetexta que se consagran a los dioses y adopta la toga virilis. Se solía celebrar en marzo en la fiesta de la Liberalia. Para las chicas el abandono de la bulla se hacía con el matrimonio.
Respecto al nombre de Cicero, que le venía de familia y parece ser que algún antepasado habría tenido algún tipo de verruga parecido a un garbanzo de la cual se adoptó el cognomen
Respecto a su capacidad de escritura parece que su liberto Tiro inventó un sistema parecido a la taquigrafía y le era muy fácil dictar mucho y rápido. En la novela de Robert Harris "Imperium" se trata sobre este tema.

Si te interesa el tema te recomendaría el libro de "César" de Adrian Golsworthty (puse una reseña en este apartado) y que complementa muy bien toda esta época tan apasionante del final de la república romana.

Vida interesante la de mi omónimo. Realmente la vivió muy intensamente y aunque sus indecisiones y modo de ser dubitativo a veces nos ponen al borde del colapso, hay que comprender que vivió momentos muy criticos.

Voy a continuar la lectura .......

[Cicero]

Pues ya he acabado y la verdad es que me ha dejado gratamente impresionado. El último capitulo "pos mórtem" es espcialmente lúcido. Everitt es un buen escritor y biógrafo y ha hecho un trabajo muy serio. Es la cuarta biografía que de mi querido Marco Tulio leo y no me ha defraudado lo más mínimo. Su paso a la posteridad lo tiene bien merecido.

[madison]

Me alegro que te haya gustado, a mi también sobre todo porque me he enterado de tantas cosas que esconocía...fijate que hasta hace poco creía que peor extermnio fué el de los nazis, pero gracias a este libro he podido comprobar que los romanos ya eran expertos en el tema.
Como no sabían qué hacer con una serie de personas, hala a matar a todo el que hablase latín.

Más que un libro de biográfico creo que también es político.
Y podemos comprobar que los politicos continuan con la misma tónica, peleandose entre ellos y la oposición llevando la contraria.

[Cicero]

De hecho todos los grandes imperios han sido genocidas. Supongo que si al nazismo le hubieran dado tiempo no se habrían quedado cortos.
En cualquier caso una de las cosas "buenas" que nos dejó el imperio romano fue la romanización cuyos efectos han llegado hasta nuestros días ya que básicamente somos hijos de esta cultura. No podía ser todo bueno.

Lo de que todos los que hablasen Latín los hacían matar no lo he entendido

Y, si, ciertamente las formas políticas no han cambiado mucho desde aquellos tiempos lo cual demuestra lo poco que evolucionamos a pesar de internet

Feliz 2761 ab urbe cóndita